el mioco vs alíen

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La alarma del despertador, anuncia un nuevo día para la familia Díaz, marco levantando a sus hijos mandándolos al baño, ellos obedeciendo, marco aun le costaba creer un poco de la suerte que tuvo ya que antes estaba solo, ahora tiene amigos, aventuras, pero sobre todo una linda novia e hijos claro son adoptados pero el cariño que se tienen es lo que más importa no es la sangre, levantándose y a su novia mío, ella como siempre sonriendo le gusta hacer sonrojar a marco, y lo puede lograr con solo abrazarlo, después de preparar el desayuno, y tener un desayuno en familia marco envió a sus hijos a la escuela

Mio: creo que debemos cambiar de colegio a nuestros hijos marco

Marco: si tal vez debamos

Los amigos de marco incluso rei y shuars se van de la capi-cueva dejando solo a la pareja, pero antes de irse shuars le había preparado un caramelo especial para que rápidamente se puede cambiar de traje, de su ropa a la que tiene cuando se transforman en vengador fantasma, marco entrando a su habitación para cambiarse ya que se había olvidado de quitarse la piyama, cambiándose rápido cuando iba a salir del cuarto, vio otra cosa que le hizo sonrojarse de pies a cabeza

Marco: mío ya vengo, nos vemos en la tarde –voltea, y sin querer ve a su novia en ropa interior- O////_////O

Mío: -sonriendo sonrojada- marquito ya te dije, si solo quieres verme cambiarme solo tienes que pedirlo

Mío: -sonriendo sonrojada- marquito ya te dije, si solo quieres verme cambiarme solo tienes que pedirlo

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Marco: -muy nervioso y sonrojado como un tomate- y..y-yo-yo claro que no, s-solo iba a decirte que nos vemos en la tarde –agarra su tijera dimensional, que está en su armario-

Mío se cambió aún más rápido, colocándose su ropa, ve que su novio abrió un portal para irse, pero esta vez mío se acercó abrazándole a marco por la espalda evitando que se vaya, sonrojando aún más el pelicastaño de su oreja le sale un poco de humo a sentir el contacto y rose que esta su espalda con los pechos de mío que lo sigue abrazando

Marco: y d-dime ¿quieres acompañarme?

Mío: así es, yo iré contigo a donde sea que vayas

Marco: -ps: solo respira, recuerda tú no eres un mañoso- b-bueno vamos –dijo aun nervioso pero sonriendo sonrojado-

Sin más cruzan el portal agarrados de la mano como pareja, llegando a un bosque, de noche en el ambiente con ventiscas de aire frio, caminando por el pasto con cada paso marco ya sabía que se acercaba más, a donde quiere ir, mientras conversa con su novia, llegando al cementerio

Mío: -confundida- ¿para qué hemos venido al cementerio?

Marco: solo para ver a mi viejo yo

Mío: tu viejo yo

Marco: es que para que todos, incluso a los que yo solía llamar amigos piensen que ya he muerto, y así jamás tendría que verlos de nuevo

Se acerca al cementerio adentrándose, la lluvia comienza a caer de las nubes negras del cielo

marco diaz: el vengador fantasmaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora