So, So Adorable

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El sol apenas comenzaba a salir por la mañana, Sav aún se encontraba durmiendo sobre su blanda cama, cuando sintió un par de ojos clavados en él. Gruñó ligeramente, se giró a su costado izquierdo y al abrir los ojos, vió a Joe.

─ No me digas que lo único que has hecho por los últimos quince minutos ha sido verme dormir ─ Sav volvió a cerrar sus ojos, su voz seguía algo rasposa pero una sonrisa se dibujó en sus labios.

─ Te mentiría si te dijera que no ─ Joe también sonrió, se hallaba apoyado sobre su brazo derecho de forma que su mano recargaba su cabeza.

─ Ugh, ─ Sav arqueó sus cejas, aún mantenía sus ojos cerrados ─ Por favor, deja de hacerlo. Es espeluznante ─ tragó saliva, aún se sentía adormilado.

Movió una mano al rostro de Joe con la intención de hacer que le deje de ver. Sin embargo, fue un movimiento algo torpe ya que no abrió sus ojos, y su mano fue detenida por la mano libre de Joe.

─ No puedo evitarlo, te ves muy adorable cuando duermes ─ llevó la mano de Sav a sus labios y dejó pequeños besos a lo largo de sus dedos ─ Es tu culpa, por ser lindo.

─ Dios, suenas como un pervertido, sabes ─ bromeó el de rizos, abriendo sus ojos cuando sintió unos labios en su mano.

Joe soltó una carcajada, mas continuó dando besos a toda la mano de Sav, quien también sonrió ante este pequeño toque que su novio le daba.

El momento comenzó a hacerse más serio pero a la vez caliente, al segundo en que Joe lamía y mordía de manera ligera pero sensual el dorso de su novio. Empezó a crecer un rubor en las mejillas de ambos.

Con su mano libre, Sav acarició el cabello rubio de Joe y se acercó a él, para reemplazar su dorso por sus propios labios. Esto tomó por un poco de sorpresa a su novio, pero enseguida correspondió.

El beso duró por casi un minuto, convirtiéndose en uno muy apasionado pero húmedo, cuando sus lenguas se hicieron paso dentro de la boca del otro. Se separaron lentamente, y se veían directo a los ojos.

─ Supongo que esto es a lo que llaman "buenos días" ─ se rió Joe, causando que el contrario también ría y baje la mirada.

─ ¿"Buenos días" ? Siento que aún es de noche ─ Sav volvió a asentar su cabeza en la suave almohada, cerrando sus ojos.

─ Hace un rato que el sol salió, querido ─ hizo el mismo gesto, acostándose cerca de su novio, ambos sonriendo.

─ Cinco minutos más.. ─ murmuró Sav, con un tono tan adorable al cual sabía que su novio no se resistiría.

Efectivamente, Joe hizo un ruido como de "aw", mientras se acercaba a la frente del de rizos y dejaba un corto beso en ella. Se separó y volvió a acostarse a tan solo pocos centímetros.

Sav volvió a sentir aquellos ojos de color verde sobre él. Silenciosamente, abrió un ojo para encontrarse a Joe viéndole directamente, con una tonta sonrisa plasmada en su rostro.

─ En serio, necesitas dejar de hacer eso ─ murmuró Sav, cerrando sus ojos de nuevo y acomodándose ligeramente sobre la cama ─ Tienes un problema.

─ No tengo ningún problema, sólo te tengo a ti ─ Joe susurró, soltando de paso una pequeña risa juguetona ─ Te amo mucho.

Al escuchar esas tres palabras, Sav volvió a abrir sus enormes ojos azules, regalándole a su novio una adorable sonrisa, además de corresponderle.

─ También te amo, Joe.

One Shots [Saviott]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora