Trago saliva. Me seco mis sudorosas manos en los vaqueros ajustados, demasiado ajustados para mi gusto.
-Y... Dime Papa... ¿De que se trata esa tarea?- digo tartamudeando.
-¿Que pasa hijo? Tienes mala cara- dice mi padre a la vez que me acaricia la cara con la palma de su mano derecha.
-Nada... Es solo que... ¿Estas seguro de que yo realizare bien ese.... Trabajo?-
-JA JA JA- suelta una larga carcajada a la vez que me golpea en uno de mis hombros. Es una risotada algo irónica. - Hay hijo mío, no te asustes... Sígueme y veras.-
No decimos nada mas. Trago saliva y le sigo a una distancia aceptable. Recorremos un largo pasillo luminoso, decorado totalmente con paredes de mármol blanco mezclado con feldespato y Cuarzo. Subimos unas escaleras por las que caen enredaderas de flores que nunca antes había visto. Llegamos a un invernadero que esta repleto de plantas *Valla ahora comprendo de donde salían las enredaderas* pienso.
Atravesamos la sala y justo en el centro se encuentra un ascensor de cristal, en el cual nos montamos para ascender hasta la próxima planta en la que se encuentra una sala llena de juguetes, el sueño de cualquier niño pequeño.
La verdad es que parándome un poco a pensar aquí hay de todo, y ahora ya comprendo porque lo denominan como paraíso. Pero cuando lo tienes todo te das cuenta que no te son imprescindibles todas esas cosas para ser feliz.
Al fin llegamos, y paramos delante de una puerta de oro, que pesara unos 94kg. Trago saliva de nuevo. Estoy confuso. ¿Cual será ese trabajo? Es la única pregunta que tengo en estos momentos en mente.
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Like an angel fallen from the sky
Roman d'amourUn juramento sagrado. Un Angel Caído. Un amor prohibido. Pero lo prohibido es lo que más nos atrae, y como dice la canción "Una aventura es más divertida si huele a peligro"
