Sólo Por Un Tiempo

Cap. 2 Niño

Había sido un largo viaje, estaba más cansado de lo normal, lo bueno era que sólo tenía que asistir al cumpleaños del niño. Lo que más odio de su trayecto fue esa arrogante, presumida y terca chica, bufo molesto ¿Quién se creía? Además ese tipo de comportamiento jamás lo había visto, ella era todo lo contrario a Sheime, la cual era, y es, amable y dulce con todo el mundo, en definitiva, odiaba a esa pelilila, se alegraba de que nunca la volvería a ver.

Tomó su celular y reviso los mensajes, sonrió y abrió el chat con el nombre de cierta rubia.

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Se acostó en su cama, agotada, había sido un día lleno de sorpresas, el saber que ganó un sorteo, el tener que empacar, el viaje, estar "hablando" con el estúpido futbolista. Suspiro cansada, empezó a cerrar los ojos pensando en todo lo que haría mañana.

La despertó el sonido del teléfono.

— ¿Si?

— ¿Desea servicio a su habitación o bajará al comedor? — Preguntó la voz al otro lado de línea haciendo que observará el reloj, el cual marcaba las 7:30 a.m.

— Servicio a la habitación, por favor — Pidió para luego colgar, se estiró los brazos y se dirigió al ventanal para observar la ciudad.

Vio todo muy maravillada, aunque ese sentimiento extraño que tenía ayer seguía colado en su corazón, le costaba creer que haya ganado, cuando nunca lo habia hecho, no por nada tenía billetes de Loterías pasados, aquellos que había comprado cuando estaban por quitarle la casa y ahora estar en un hotel tan lujoso le causaba un poco de incomodidad. 

«Solo disfruta»

Sonrió al recordar las palabras de su amigo, tenía que hacerle caso, al menos por esta vez, detenio sus pensamientos al escuchar el llamado de la puerta.

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Era otro día y se sentía realmente bien, se había levantado de buen humor, tanto que bajo a desayunar al comedor, había pedido lo saludable del menú y agradeció que no hubiera tantas personas o que lo reconocieran, después de todo era un reconocido futbolista. Llevaba media tostada en la boca cuando escucho el sonido de su celular mostrando el nombre de su hermano.

— ¿Que sucede Yukio? — Preguntó de mala gana, observando la otra mitad de su tostada, le gustaba desayunar sin interrupciones.

— Sólo quería avisarte que el patrocinador personalmente vendrá a recogerte.

— ¡Wow! Enserio que debe admirarme su hijo.

— Espero no pelees con el niño como sucedió la anterior vez....

— ¡Ey! Yo no sabía que ese adolescente era mi admirador, parecía un acosador — Se defendió, recordando al chaval que lo había bañado de pintura.

— Cómo sea, esto es importante nii-san, por favor — Pidió haciendo que el peliazul bufara y colgará.

— Yo soy el mayor — Resoplo molesto, observando su teléfono, lo dejo de lado y le tomó atención a su desayuno.

Comió a gusto lo restante, para luego subir a su habitación y prepararse para recibir al contratista, también busco el regalo que había comprado.

El reloj marcaba las una de la tarde y no había señales del patrocinador, pero le llamó la atención ver a unos varones uniformados, correteando de un lado a otro con un micrófono, hasta que.....

— Por favor dar informe de un pequeño desaparecido, vestía un pantaloncillos rojos y un polo azul. Acercarse a la plataforma de incidentes por si lo encuentran.