El peligro de tus héroes

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Había estado huyendo por media hora  de esos demonios, en ese punto mis músculos deberían estar adoloridos sin embargo no sentía la menor fatiga, algo había cambiado en mí, no había forma de saber que tanto y no había tiempo, esas cosas me alcanzarían en cualquier instante.

Pasé por una enorme pila de cadáveres de solados, sin duda presas de los demonios de Demiurgo, el olor a intestinos y piel quemada era insoportablemente fuerte, pero había encontrado lo que necesitaba, si los solados habían muerto al instante en el que fueron atacados lo normal sería que aún tuvieran consigo pociones de curación.

Lo siento pero necesito esta poción más que tú ahora

Con 3 pociones era más que suficiente para el experimento que tenía planeado, sin embargo el miedo de ser devorado por criaturas infrahumanas hacía que quisiera salir de ahí aprovechando que ahora sabía que tenía una stamina mayor al promedio. Por supuesto esas criaturas cuando las veía en el anime solo eran caricaturas o monstruos a computadora, era imposible temerles a cosas así, pero ahora todo era real, su pelo se movía con la brisa de la noche, sus ojos llenos de un odio casi palpable, todo ese deseo de matar que uno difícilmente se enfrentaría en mi mundo, los lamentos de sus víctimas...

Fue en ese momento que los escuche llegar eran 5 en total, una masa deforme de carne que tenía 12 cabezas que se sostenían por cuellos desfiguradamente largos cual si fueran dedos, mientras que encima de dicha masa se mantenía una cabeza mucho mas grande sin ojos ni boca, pero se podía sentir que te observaba.

Pese a su apariencia, deben ser demonios de bajo nivel, no había necesidad de enviar nada demasiado poderoso en un asalto en una ciudadela de humanos, tengo 3 pociones, si algo sale mal saldré de aquí mientras me curo, si eso no basta buscaré la formación donde se encuentra Gazef Stronoff y dejaré que ellos se encarguen, si me logran alcanzar antes de llegar... Pues simplemente tengo muy mala suerte.

- Qué están esperando?! Vengan de una vez!

Con un ardor en mi pecho por el grito y con todos mis músculos dolidos al obligarlos a quedarse mientras mi instinto me decía que huyera, me paré firme frente a los monstruos los cuales lanzaron las cabezas más pequeñas alargando sus cuellos huesudos a una velocidad increíble, alcanzando a sentir como sus colmillos trataban de encajarse en mi piel mientras me quedaba completamente quieto.

-Ja.. Jajaja... Jajajaja! Supongo que no tengo tan mala suerte como esperaba! Y pensar que me tomé la molestia de buscar pociones!

Nada, ni siquiera un mínimo rastro de dolor, el experimento de resistencia fue todo un éxito, no había necesidad de huir ni de contenerse, pero mis sentidos humanos aún me decían que huyera, que era peligroso o que podía morir, como no iba a sentir eso frente a monstruos tan horribles.

Supongo que Ainz tuvo suerte en ese sentido

Tomando una de las cabezas que mordía mi hombro, lentamente fui aplastandola como su fuese una uva, los sesos se escurrían de entre mis dedos, dejando en mis manos un tono rojizo. Era repugnante, pero en el nuevo mundo no podía ser quisquilloso, necesitaba librarme de ese miedo, de las náuseas, de cualquier sentimiento innecesario.

Lanzándome hacia los demonios comencé a hacer pedazos las cabezas una por una, los horribles gritos que salían de esas cosas se fueron apagando poco a poco mientras mi sonrisa crecía, mis brazos entraban en esas enormes masas grotescas y salían con un puñado de sus entrañas, el ruido fue desapareciendo hasta que antes de que me diera cuenta ya no quedaba nadie. Un profundo suspiro me permitió calmar por completo mi mente mientras dejaba atrás mi último rastro de temor, mis sentidos se mantenían más enfocados, fue entonces cuando lo entendí:

Nivel total: 100

Aún debía descubrir mis niveles raciales y de trabajo pero no había tiempo para eso, no tenía nada de equipo, si un jugador nivel 100 se enfrentará a alguien de menor nivel pero con equipación legendaria o divina e incluso reliquia, el jugador de nivel 100 perdería, en especial si este no conoce sus trabajos, sus razas o sus habilidades.

Un terremoto? Es el terremoto de Mare, entonces la batalla terminará pronto.

Pronto todo acabaría así que me apresure a cambiar mi ropa por la de unos aventureros que cayeron víctimas de la batalla. Al reunirme con un grupo de humanos que corrían en ayuda del héroe oscuro Momon sabía que de momento estaría seguro, los enemigos eran prácticamente nulos y finalmente llegamos al centro justo a tiempo para escuchar el grito de victoria. El personaje que admiraba se encontraba justo delante de mi con su armadura negra y con espada en mano, era todo lo que siempre había querido.

Si no me tranquilizo siento que diré un "Ainz-sama" estilo Albedo...(algo esta mal)

Darkness regresaría a E-Rantel decidí seguirlos hasta la colina antes de que despegaran, mientras pensaba en todo lo sucedido, no podía creer que incluso había asesinado a un par de monstruos con mis propias manos.

Es idea mía? O acaso esos monstruos una vez que acabe con ellos lucían... Apetecibles..?(no vayas)

De pronto algo interrumpió mis pensamientos, un par de miradas fijas me helaron hasta los huesos, lentamente levanté la cabeza mientras mi piel se tornaba completamente pálida, la mirada del "héroe oscuro" y "la bella princesa" estaban clavadas en mí, como si me inspeccionaran de arriba a abajo, pese a estar a una distancia considerable logré notar como mientras Nabe me miraba fijamente decía:

"[Message]"

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Atrapado en Overlord!! Donde viven las historias. Descúbrelo ahora