En el interior de aquella casa, mundos hallaban sus senderos. Cuando al principio, los dos tenían pensamientos culpables: qué era eso sino amor, o, por qué estar unidos, si acaso lo suyo tenía importancia; en los segundos que vivían, ya no era una razón para preocuparse.
Goku, a quien las manos le temblaban, sintió pánico al tocar el cuerpo de Vegeta. No sabía el por qué pero también luchaba por mantener los ojos cerrados, ansiosos, a su vez, de ver la creación y el poder de un dios.
Y entonces, volvió a sentir su ki. Impresionado.
Vegeta lo miró con las pupilas moviéndose como locas. Goku decidió regresar al mismo estado que este.
Si la pregunta hubiera sido: hey, ¿quieres hacerlo conmigo?, la negación sería la primera respuesta, incluso no quedaría espacio para buscar alguna otra. Seguirían besándose y peleando como siempre. El detalle aquí era que el sentimiento decidió crecer y expandirse en un órgano vital, oh, y también en sus almas.
Estando desnudos, la vergüenza y los nervios los hizo cobijarse primero entre las sábanas, para luego explorar con cuidado el cuerpo del amante. Hasta que dejaron las cosas fluir...
El saiyan con el que jamás pensó tener algún contacto más allá de las peleas, acarició sus piernas, sus brazos. Todo. Fue como si su cuerpo añorara un dueño y solo hacía falta empezar a percatarse de que ya lo tenía. Notando que el mismo no fuera como esperaba.
El tonto de Kakarotto preguntaba por un millón de cosas, entre refunfuños y quejidos, porque al parecer quería dar lo mejor de sí. O al menos eso Vegeta logró percatarse.
Goku, en cambio, no sabía si elegir entre suave o incómodo. Se besaban más de lo que se miraban, gruñían cada que la posición anterior cambiaba ligeramente; lo cual ni siquiera sabía si estaba bien, y para él, lo más suave, fue ver el rostro de su amante pedirle un poco más; de cada cosa, de cada caricia, de cada gesto. Parecía ser que decir "lo siento" en susurros, hacía sonreír al príncipe.
Expresa ingenuidad, ternura, bondad, y ausencia de todo mal, sinceridad, romance y amistad. El rosa es un color emocionalmente relajado e influye en los sentimientos convirtiéndolos en amables, suaves y profundos. Hace sentir cariño, amor y protección. También nos aleja de la soledad y nos convierte en personas sensibles. Así como el rojo refleja más la parte sexual, el rosa se asocia al amor altruista y verdadero. Las palabras claves del color rosa son: inocencia, amor y entrega total.
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✨- De muchos colores. |KakaVege|
Short StoryNuestra vida forma sentimientos coloridos. Género: Ficción General, Romance. Adicionales: Contenido Explícito. [Los personajes aquí presentados no me pertenecen. Alabad a Akira por su creación] |Fecha de Publicación: 24/09/2019