Bésame...

Bésame... / Capítulo 2

Boruto entró a la casa de sus padres como si viviera aun con ellos, y como era temprano todos estaban compartiendo el desayuno.

─ ¡Boruto! Buenos días, hijo ─ Hinata lo saludó con gran efusividad ─ ¿Quieres desayunar? ─ Y sin esperar respuesta se levantó y puso su lugar en la mesa como siempre ─ Anda, siéntate.

─ Hijo, pensé que estabas indispuesto, ¿cómo te sientes?

─ No, yo estoy bien ─ respondió.

─ Hermano ─ Himawari lo saludó muy escuetamente; y del mismo modo él la saludó.

Boruto no le quitaba la mirada de encima a su padre ─ ¿Sucede algo, hijo?

El chico asintió ─ Necesito hablar contigo, a solas.

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Naruto y Boruto se miraron fijamente.

─ Dime, ¿qué pasa?

Boruto dudo un poco en preguntar pero lo hizo ─ ¿Y Sarada?

─ En una misión que fue solicitada en último minuto.

El silencio se hizo de nuevo.

─ ¿A qué tipo de misión?

─ Fue como guardaespaldas de un señor feudal a las afueras de la aldea, nada que represente peligro, además no está sola, Kawaki está con ella ─ Boruto se tensó y su padre lo notó ─ ¿qué me ocultas?

Su hijo lo miró con asombro y sonrió despreocupadamente.

─ Nada, pero me gustaría alcanzarlos, me puedes dar su ubicación.

Naruto, buscó entre su escritorio la copia de los detalles de la misión ─ ¡Ah! Aquí está ─ ofreciéndole la información descrita en la hoja, pero antes de que su hijo la tomara sintió un malestar en su estómago que lo hizo doblarse por el dolor.

─ ¿Qué demo...? ─ Preguntó perdiendo el conocimiento.

Naruto brincó sobre el escritorio, gritando el nombre de su hijo y a su vez el de su esposa con gran preocupación, Boruto se había desmayado.

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Cuando Boruto abrió los ojos, estaba desorientado, sin saber dónde estaba, aunque definitivamente el lugar se le hacía familiar, era su antigua habitación.

─ No te levantes ─ ordenó una voz también conocida ─ puedes caerte, aún tienes el efecto del veneno aturdidor.

─ ¿Veneno? ─ Repitió sin entender nada.

Sakura lo miró ─ ¡Oh! Nada preocupante, ese veneno solo hace de duermas por dos días enteros, bien utilizado sirve para que descanses.

─ ¿Pero veneno? ─ Volvió a preguntar.

─ Hiciste enojar a Sarada anoche, ¡eh!

Boruto repasó la noche anterior con la Uchiha y recordó claramente lo que la hizo sentir, ruborizándose al instante, ¿pero, enojo? No eso no era factible, ¿o sí?

La pelirrosa lo vi sonrojarse y dedujo que había sido así, Boruto había hecho enojar a su hija, por lo que con ternura se acercó a él para hacerle un confidencia ─ descuida ─ sonrió ─ tú le gustas, ya lo arreglaran cuando regrese de su misión, pero procura ya no hacerla enojar, sería malo para ti.

EL chico se mantuvo en silencio sin saber qué decir, aun sentía el calor de Sarada con él, por lo que decidió levantarse sin lograrlo.

─ ¡Oh! No lo hagas ─ le pidió Sakura ─ Aún tienes los efectos, deberás descansar hoy.

─ Pero...

─ Descuida, ella llegará mañana y podrán hablar ─ casi como si supiera lo que planeaba el hijo de sus amigos.

En eso entraron su familia, es decir, su hermana y sus padres, ya un poco más relajados, después de que Sakura les hubiese dicho qué tenía Boruto.

─ ¡Hijo! ¿Discutiste con Sarada? ─ Preguntó Naruto sin más.

Hinata y Sakura obligaron al Hokage a no cuestionar a su hijo, estaban seguras que la discusión tenía que ver con asuntos del corazón, así que no tenían por qué intervenir.

─ Boruto está bien, solo no debe levantarse por el resto del día para evitar accidentes.

─ Está bien, Sakura ─ replicó Hinata ─ Himawari ─ se dirigió a su hija menor.

─ Sí, mamá.

─ Tú serás la encargada de que tu hermano no se levante, ¿entendido, Boruto?

─ Pero... pero ─ viendo la estrecha mirada de su hermana, prometiendo dolor sino cumplía lo que debía de hacer, a pesar de ser un Jounin, había cosas que aún le causaba temor y entre ellas era su pequeña hermana.

─ ¿Entendiste, Boruto? ─ Volvió a preguntar Hinata, así que el rubio no le quedó más que asentir con la cabeza, su mamá enojada era definitivamente otra cosa le causaba terror ─ Bien, ese es mi hijo, ahora les parece si lo dejamos descansar.

─ Yo me quedo con mi hermanito ─ declaró Himawari con una voz llena de ternura que simplemente difería con la mirada de asesina con la que observaba a Boruto.

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Ya en la sala de la casa de los Uzumaki las deliberaciones de lo sucedido entre sus hijos fueron sumamente palpable.

─ ¿Qué creen que haya ocurrido entre ellos? ─ Naruto las miró con curiosidad.

─ Pelea de enamorados ─ concluyó simplemente Sakura.

─ Sí, estoy segura que eso ocurrió ─ replicó Hinata.

Naruto abrió la boca en sorpresa ─ ¿Es en serio? ¿Ellos son pareja? ─ Dudó en preguntar.

Hinata y Sakura intercambiaron miradas ─ Ellos gustan ─ dijeron a la par.

─ ¿De qué te sorprendes? ─ Dijo Hinata.

─ Era de esperarse ─ comentó Sakura como si fuera lo más natural del mundo ─ esa química entre ellos nació y se desarrolló con el tiempo trabajando en misiones.

En un momento Naruto dejó de escucharlas, ya que su mente divagaba en un futuro no muy lejano, es decir, nietos y su sonrisa tonta así lo delató.

─ ¿Naruto, escuchaste lo que dijo Sakura?

Pero no hubo respuesta.

La pelirrosa movió la cabeza ─ olvídalo, lo hemos perdido.

─ Creo que es así ─ Hinata asintió ─ por cierto ¿Sasuke tiene conocimiento esto?

─ No, no lo creo, además no sé cómo se conduciría, pero dudo que lo tomará de manera tan afable como lo está haciendo Naruto, será mejor no decir nada hasta que ellos decidan dar a conocer la noticia.

─ Estoy de acuerdo, no queremos desatar la siguiente guerra shinobi por una simple especulación.

Sonriendo nerviosas ante tal idea que aunque sonara descabellada podría hacerse realidad.

Fin del capítulo 2 / 030819

Espero les haya agradado, gracias por regalarme un poco de su tiempo.

No estamos leyendo.

Saludos!!