"Extraño sentir"
Ambos adultos se encontraban tras la puerta del recinto de aquel hombre de abrumadoras cejas, esperando que la menor de tan bella cabellera cayese en los brazos de Morfeo, para así no ser testigo de aquella charla que estaban apunto de tener.
-Gai- Llamó su atención con gran seriedad- Danzo ha mandado a varios ANBU para vigilar a la niña, no parece para nada contento con su estadía, te recomendaría le informaras a Lord Hokage de ello, como también he de recordarte que no olvides tu misión.
-Me lo suponía, Hisae avanza rápidamente en sus entrenamientos ninja, es algo de sorprenderse, digno de admirar como también de temer, no me sorprendería si para fin de año ha mejorado más del doble- Añadió para luego voltear su rostro evadiendo la oscura mirada de su frío compañero- Lo sé, no la he olvidado.
-Y tras lo que ella dijo.. -Habló con frialdad el platinado- "Enseñarle a un extraño como defenderse no ha de ser una buena estrategia" Aquello puede tomarse de mala manera fácilmente, no dudo que alguno de los ANBU escuchase aquella frase y fuese a contárselo a Danzo -Realizó una pausa analizando sus próximas palabras- Gai yo no estoy encariñado con la niña, y por ello sé que tú estás olvidando el punto principal de tu misión -Su mirada permanecía fría como si los sentimientos le faltasen cosa que comenzó a molestar al azabache- No es darle amor y cariño, no es darle compasión, te recuerdo que tu misión es regañarla de la peor manera si es necesario y entrenarla hasta que caiga rendida sin siquiera poder sentir su cuerpo, cumpliendo con las reglas del Lord Hokage -Suspiró- No es encariñarte con ella.
-¡Lo sé Kakashi! ¡Pero yo no soy como tú! ¡No puedo voltearle la cara a una niña que ha perdido a sus padres y sólo quiere un hogar! Ella da todo por mejorar, trabaja duro y da a florecer su juventud -Habló con gran molestia- ¿Qué acaso no puedo llevar a mi alumna al parque tras un gran entrenamiento?
-No es sólo eso Gai- negó rendido- La dejas llamarte "Otōsan" te emocionas cuando lo hace, te encariñaste con sólo verla sonreír, estás perdiendo el rumbo de tu misión sin darte cuenta, no es sólo tu alumna, no es tu sucesora, no es tu hija, es tu misión.
-Comprendo..
𓁧 𓁨𓀱 𓀽 𓁀 𓁎 𓁏 𓁐 𓁒 𓁓 𓁖 𓁗 𓁨 𓁪
-¡¿Viste eso Ōtosan?!- Gritó la menor con gran entusiasmo en su mirada- ¡Corrí 50 vueltas en tiempo récord y no me siento tan cansada!
Tanto el hombre de tan llamativo estilo como la pequeña de tierna mirada no podían evitar dejar escapar la gran emoción que sentían en aquel momento, pues apenas el día de ayer nuevamente la joven había caído rendida al suelo con gran cansancio, pero tras un arduo esfuerzo la gran mejoría había dado sus frutos, terminando no solo en tiempo récord su meta, sino que con las energías suficientes para dar quizá una vuelta más antes de caer.