*Alec POV*
—Estás loco si crees que te dejare ir de aquí si no es a tu casa— le dije abrazándolo de nuevo. Era alarmante verlo así, tan indefenso, tan vulnerable.
—Alec de verdad solo será por hoy— dijo en un hilo de voz.
—Está bien, pasa— no quería molestarlo, pero si no es para regresar a su casa que ni se le ocurriera irse.
—Gracias— dijo abrazándome con fuerza —Iré por algo de ropa al auto— aun con voz nasal me soltó y se dio la media vuelta.
—No— le dije deteniéndolo —Sube, si quieres date una ducha y yo bajo tu ropa— asintió con la cabeza.
*Magnus POV*
Me sentía tan estúpido, pero de verdad no quería estar solo... aún más solo. Tan siquiera Alec, Izzy y Max me hacían sentir querido.
Subí las escaleras por una orilla ya que iba dejando un rastro de agua, después de cambiarme le diría a Alec que yo lo secaría.
Llegue a la habitación de Alec y mire antes de entrar ya que estaba alfombrado y al igual dejaría el camino de agua. Pero de todos modos entre me estaba congelando.
Deje correr el agua y de inmediato se templó, así que me saque toda la ropa para poder entrar.
— Con una hubiera bastado— mire las maletas
—No me importa lo que digas Mags — dijo dándose la media vuelta —De acá no te vas a menos que sea de regreso a tu casa— suspire profundamente
—Está bien— dije como si no me quedara otra opción.
— ¿De verdad?— pregunto ilusionado.
—No— conteste y mire hacia abajo —Me quiero cambiar— rodo los ojos y salió de la habitación.
*Alec POV*
— ¿Tienes frio?— entre a la habitación después de que me aviso que estaba listo. Abrazaba sus piernas
—Algo— dijo tímidamente. —Olvide empacar sweaters o sudaderas— froto sus ojos con su mano.
—Pero seguro traes todo el cargamento de camisas y zapatos de charol— una sonrisa se coló en sus labios. —No me gusta verte así— dije sentándome a su lado. — ¿Fue por mi culpa?— tenía más que claro que su madre me detestaba y conociendo el carácter de Magnus me imagino cual pudo haber sido el problema.
—Claro que no— dijo poniendo sus manos en mis mejillas
—Estas helado— reí y me puse de pie para buscar una sudadera. —Ten— le entregue una gris con letras blancas, la tomo y se la puso despeinando un poco su aun húmedo cabello. Realmente me sorprendió que no lo acomodara. Estaba mal. —Acá te puedes quedar todo el tiempo que quieras— le dije sentándome con el una vez más. —Pero insisto, las cosas con tu madre se pueden arreglar— acomode su cabello —No sabes lo que daría yo por tener a mi madre o a mi padre— levanto su mirada y esta se cristalizo.
—Alec...— susurro pero pareció arrepentirse ya que solo me abrazo.*Magnus POV*
La mirada rabiosa de Ragnor me indicaba que ya sabía que no vivía más con mi madre.
— ¿Cuándo pensabas decírmelo?— me reclamo
—Hey, Hey— alargo Alec haciéndolo atrás como si fuera mi guardaespaldas
—No te metas— le dijo Ragnor de mal modo a Alec matándolo con la mirada.
—Mira yo me meto...
—Alec — puse una mano en su pecho indicándole que se tranquilizara. Mi amigo solo se preocupaba por mí. Me miro con reproche a los ojos, beso mi mejilla y camino por el pasillo dejándonos solos.
— Magnus ¿Te estás quedando con él?— pregunto y asentí con la cabeza al mismo tiempo que el negaba.
—Mira Ragnor— dije con fastidio —Tú conoces mejor que nadie la situación mía y de mi madre— lo señale —Sabes bien que por más que lo intento ella no da su brazo a torcer— suspire —Me canse así que no creo que cambie mucho el que ya no esté en la casa— miro hacia abajo
— ¿Y por qué no me hablaste? ¿Ya no me quieres? — solté una carcajada.
—Porque me hubieras llevado arrastrando de regreso a casa— sonrió cosa que me indicaba un 'Si' —Y claro que te quiero— lo abrace —Tu no te libras de mí nunca Ragnor— di un beso en su mejilla.
—Está bien— acaricio mi mejilla —Pero trata de hablar con ella.
—No te aseguro nada— levante una de mis cejas
—Ragnor...— era Catarina —...Hola— me saludo no muy segura.
—Hola— sonreí —Me voy, iré a buscar a Alec — dije antes de despedirme con la mano para ir en búsqueda de Alec.
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Me, Myself & I (Malec) [ADAPTACIÓN]
FanfictionMagnus Bane pensaba que lo tenía todo. Popularidad, perfección, amor. Hasta que lo perdió todo, dándose cuenta del mundo superficial que lo rodeaba. El. El chico rudo, Alec Lightwood había llegado para cambiar las cosas, pero sobre todo para cambi...