Ice for Burns ¦myg+jhs¦

[ t h r e e ]

La voz lo aterrorizó con consejos no solicitados (pero correctos) varias veces más durante la próxima semana.

Era "Hoseok, deberías usar un jabón más cremoso en invierno, ¿no te pica la piel?" O "¡Hoseok, estás sosteniendo el cuchillo mal!" O "Hoseok, realmente deberías apagar la manta eléctrica cuando vas a dormir."

Cada vez, Hoseok se congelaba con un grito ahogado, agarrando la superficie estable más cercana antes de marchar mecánicamente hacia su teléfono para llamar a Namjoon o algún otro amigo para un poco de apoyo y distracción.

Sus amigos se reían de él cada vez, lo llamaban con una variedad de nombres, pero seguían hablando con él, explicando amablemente cómo los fantasmas no eran reales o contándole despiadadamente sus propias historias con fantasmas más aterradoras.

Su determinación en fingir que no oía nada era admirable. Sin embargo, apareció un nuevo gel de baño en la ducha, y su historial de búsqueda en Internet incluía "la mejor manera de cortar verduras" y "hielo para quemaduras".

"Ni siquiera puedo hacer el ridículo en mi propia casa", se queja después del cuarto o quinto consejo oportuno que parecía evocado de la nada. Pero aún le temblaban las manos mientras limpiaba la mesa de café, murmurando algo sobre "malditos fantasmas".

“¿Hoseok? No soy un fantasma".

Quieto como los muebles, Hoseok se congela en medio de la habitación oscura. "Al menos, no creo que lo sea".

Sin respuesta, ni siquiera una contracción. "No quiero asustarte", continúa la voz. "No-no quiero asustarte".

"¿Quién eres?" Pregunta de lo más silencioso. Hoseok está demasiado asustado para darse la vuelta y ver algo.

"Yoongi, um, Min Yoongi".

El instinto gana y Hoseok se da la vuelta. Su corazón se tambalea hacia su estómago, asustado y aliviado de no ver nada. "¿De la clase de física? ¿Qué mierda?"

“Tú-¿tú me conocías? No pensé que supieras quién era", responde la voz con timidez.

Hoseok casi se siente mal admitiéndolo pero, “no exactamente. Sólo, la maestra llamó tu nombre todos los días durante dos semanas y tenía un poco de curiosidad sobre quién era el tal Min Yoongi holgazán que nunca se presentaba".

"Ah. Sí, bueno, morí, supongo, así que".

"Claro", ríe torpemente Hoseok, tocando una pegatina pegada en la estantería para distraerse del ruido sordo de su corazón. "Buena razón para faltar a clase".

Levanta la vista hacia los tonos grises de su sala de estar, pero no hay ojos con los que hacer contacto. Su mente está gritando Estoy loco Estoy loco Me he vuelto loco Necesito ayuda pero, al mismo tiempo, la voz está allí, normal como cualquier otra voz.

Cerrar los ojos lo hace más fácil, encuentra. Es más fácil olvidar que no hay un cuerpo adjunto a la voz. "Cómo..? Em, ¿por qué...?" Cualquier pregunta que pueda pensar suena grosera. Se sienta cautelosamente en el brazo del sofá, con los ojos cerrados.

"Estoy muerto, Hoseok, no vas a herir mis sentimientos".

Se ríe un poco, pero aún así, es difícil de decir. "T-tú ¿moriste?"

"Morí. Y... el cielo era raro. No había una luz brillante, quiero decir, sí la había, había una lámpara sobre su mesa-como sea, había una mujer, cuyo rostro seguía cambiando. Ella dijo que estaba encargada "de los caminos".

“Ella dijo, ¿qué? Creo-no es por ser grosero, pero no creo que haya sido el cielo".

"Sí, no me digas". La voz parece más cercana, a la izquierda. “Pero, no era el infierno. Estaba bien. Normal, ignorando que su cara hiciera esa cosa. Ella dijo que podía 'regresar y terminar mi camino', o podía 'ser un derrotista y transportar almas'”.

"Pero no eres... quiero decir, eres un fantasma o lo que sea, no es... ¿no es realmente 'regresar'?"

"Sí, he tenido mucho tiempo para pensar estas últimas semanas, y he llegado a una conclusión".

Con las manos temblorosas en su regazo, Hoseok lo espera. No es lo que esperaba.

"Creo que ella estaba jugando conmigo", dice Yoongi con confianza.

"Ella-tú-¿qué?"

"Sí. Como que, me morí, y luego estuve como allí, en algún lugar, y ella me llamó y supuse que sabía qué demonios estaba pasando, ¿sabes? Supuse que ella trabajaba para Dios o algo así. Pero, ¿y si ella fuera como una timadora?"

"¿Una qué?" Su cordura se sentía cada vez más cuestionable mientras más tiempo dejaba hablar a la voz.

“Una timadora. No lo sé, has oído de timadores. Tal vez eso es lo que ella era".

Hoseok estalla en carcajadas y entierra su rostro en sus manos. "Mierda. Realmente me estoy volviendo loco. Tengo que ir a ver a alguien, a un médico o..."

"Lo sé, lo sé", descarta la histeria de Hoseok. "Pero escucha, realmente estoy aquí, de verdad no soy un fantasma, simplemente... no del todo... no lo sé. Ella no explicó mucho. No pregunté".

“¿No preguntaste? ¿Estás bromeando?" Finalmente levanta la cara de sus manos.

"¿Alguna vez has muerto?" Yoongi suena exasperado. “No sabes cómo es. Imagina el primer día de escuela. Como estudiante de primer año. En un pais diferente. En otra dimension. Y también como que, ya sabes, acabas de morir. Sí, no pregunté. No pregunté, y aquí vine, y aquí he estado".

La sala es silenciosa. Dudoso, Hoseok extiende una mano hacia la dirección de la voz.

"A la izquierda", proporciona Yoongi. "Un poco más. Síp, esa es mi cara, la traspasaste", se ríe.

Hoseok se estremece. "Dios. Tengo que... ir a la cama y... dios". De repente se encoge de nuevo en sí mismo, centrado nuevamente en todas las cosas aterradoras que toda la conversación sugiere sobre su cordura.

Como si un pequeño acto de normalidad lo salvara, se ocupa de enderezar la mesa de café. "Tengo que ir a la cama", repite. "El día comienza temprano mañana, hora de dormir", intenta animarse.

Sin inmutarse, la voz simplemente le dice buenas noches mientras que Hoseok se apresura por el pasillo.

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