Vaporwave Life

𝕣𝕖𝕔𝕦𝕖𝕣𝕕𝕠 𝕪 𝕤𝕒𝕔𝕣𝕚𝕗𝕚𝕔𝕚𝕠

Nunca había tenido una cita.

Por lo tanto,no sabía si estaba más nervioso por no saber qué hacer o porque en concreto mi cita era con la persona de la que estaba enamorado.

Normalmente sólo me preguntaba ese tipo de cosas cuando estaba borracho o drogado.

¿Cómo se comporta la gente?

Es algo que nos avergüenza preguntar,pero estaba casi seguro de que todos lo habían pensado alguna vez.

Qué hacer en situaciones normales para las que tu madre no te prepara.

En mi caso,mi madre sólo me había preparado para unas pocas,y una de ellas era cómo afrontar el total abandono de tu figura materna,para basar la relación en llamadas vacías y reprimendas por obligación.

No la odiaba.

Si pudiera abandonarme,yo también lo haría.

Supuse que una cita no sería tan distinta al resto de situaciones al que me había visto expuesto antes con aquel muchacho. Al fin y al cabo,siempre acababamos más cerca de lo que debíamos.

Pensé eso durante los primeros 3 minutos,hasta que Dan me tomó de la mano para seguir caminando.

Me parecía bien que las cosas surgieran sin querer,pero eso era forzado.

Quiero decir,me seguía pareciendo bien,claro que sí,pero para eso no me había mentalizado.

Siempre que había acabado a escasos 5 centímetros de Dan había sido por casualidad,por alcohol en el organismo o por..lo que fuera que le había pasado en el sofá de su casa.

No era forzado.

Pero ahí estabamos,caminando de la mano.

Cuando se encontró con uno de sus amigos y no me soltó me sentí importante.

Pero también deje de sentirme así cuando me presentó como otro amigo.

Volví a planear mi discurso para el final de mi cita,sólo que hasta entonces sólo se me habían ocurrido palabras malsonantes para insultarle por hacerme sentir mal.

Nos dirigíamos al centro comercial mas cutre de la ciudad.

De hecho,era mi favorito.

Al ser tan antiguo,apenas era transitado,y era fácil conocer a la gente de allí,al igual que todo el lugar.

Me gustaba conocer los lugares en los que me sentía de cierto modo encerrado.

Tenía la paranoia de planear mi huida por si algo salía mal,un incendio,una invasión alienígena,un intento de Dan por acercarse a mí...
Y conocer bien todas las entradas y salidas me daba bastante ventaja.

Me sentí algo extraño.
Al ser lunes,muchas personas del instituto pasaban por allí para comer algo después de clase.

Lo mismo que pensabamos hacer Dan y yo.

Salvo que yo estaba atrapado en una cita,y ellos estaban mirandome extrañados.

Era normal,nunca nos habían visto juntos,salvo en la clase de biología y hoy,a última hora.
Ah,y aquella vez que estuve en su equipo de fútbol en clase de educación física.

Perdimos por mi culpa,pero el fue el único en dedicarme una sonrisa y agradecerme el haber dado todo de mí.

Me sentí mal,porque no había dado todo de mí.

No me interesaba el fútbol,pero ese día comenzó a interesarme más Dan.

Y me interesó mucho más cuando vi cómo se quitaba la camiseta en el vestuario.