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Israel Galli
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Se dice que la verdad se basa en la realidad y la vida es incluso alterada. Jueves por la mañana y el tiempo está justo ahí esperando por vernos gastarle, los rayos de luz son vistos a primera vista, Break up every night sonando en el centro comercial, personas abordando con sus tickets y el olor a tabaco en los baños de aquella estación hacen del día un nuevo comienzo.
Mi nombre es Israel Galli pertenezco a la ciudad de Palermo, pero estudio en la capital a dos o tres horas de mi punto de origen, sí ingeniería en mecánica. Viajé hasta aquí para empezar de cero, mis planes, mi propio dinero y metas por cumplir. —se dijo Israel antes de comenzar a escribir.
Jueves 9 de Enero 2017. Hoy estoy de regreso, visitare a mamá, papá y mi pequeño travieso hermano, será una visita breve, motivo:
"Certificado de preparatoria sin sello del estado"
Mi autobús se retrasó un poco y son las dos de la tarde, mis ansias por llegar son más fuerte que la de un niño por un dulce. He traído conmigo una maleta negra de ruedas.
Hola aquí de nuevo...
He llegado a la ciudad, todavía.
¡Vaya sorpresa! olvidé mi cargador, así que tomaré un taxi ahora, destino: Plaza los muelles.
La respuesta a esto es radioshack.
—Bueno aquí voy subiendo las escaleras, vaya Sanborns, finalmente doblare a la derecha ¿o era a la izquierda?
Finalmente, Israel pudo ver las letras de la tienda. y en ese momento algo se disparó con un sonido que provenía de su bolsillo mientras caminaba apresuradamente pues tenía que abordar un último recorrido.
—¿Otro mensaje? ¡Oh rayos he cambiado de tono! ¿Será una llamada entonces?...
¿Bueno?
*Respondió a la llamada tan pronto como pudo*
El único sonido que escuchó fue un total silencio. Devolvió la llamada, para asegurarse, pero nadie respondió
—Vaya, pero sí es algo importante seguro llamará otra vez—se dijo desconcertado.
*Número desconocido*
La llamada provenía de un numero extraño sin lada, y así de extraño iba el día cuando con un paso delante de otro, Israel sin ser precavido resbaló por la rampa de azulejos que subía.
—¡Joder malditos azulejos! —una voz exaltada con enojo provenía de su mente.
Israel al volver para ponerse de pie se percató de una mano proveniente de un desconocido que extendía hacia el para ayudarlo, pero este se paró de inmediato con una sonrisa avergonzada.
—¿Estas bien? —dijo el desconocido.
—Rayos tengo un dolor horrible y apenas puedo caminar, pero vaya aún sigo estando vivo ¿no?,
¡Hay esperanzas!
—¡Vaya tío! —Contestó con un gesto confirmando haber entendido el sarcasmo.
Dos jóvenes se encontraban parados frente a frente en el pasillo del centro comercial, cruzaron las miradas y una sonrisa salió de ambos.
—Mi nombre es Nevan Oslo—dijo con un acento que no reconocía en ese momento.
Israel pudo ver un joven de quizás cercana a su edad, traía un saco negro, zapatos cafés, y el cabello negro ondulado que le daba una vibra muy positiva.
—Disculpa, soy Israel Galli—dijo repitiendo su nombre dos veces mientras estrechaban las manos.
—Vaya golpe que te has dado—dijo Nevan.
—Supongo que me lo merecía, ahora tengo que apresurarme o perderé el autobús—contesto Israel
—Si claro, ¡Con cuidado entonces! —fueron las últimas palabras dirigidas a Israel mientras volvía a su camino.
"Resulta que no encontré el cargador que buscaba".
He recibido una llamada proveniente de aquel número de nuevo y solo pude reconocer una canción "Here we go" por Mat kearney, pero ni una voz alguna.
Israel estaba abordando cuando el teléfono se le apagó y con un enojo expresó el día malo que estaba teniendo.
—Oye, Israel ¿cierto? —una voz desconocida le rodeo por detrás de él.
Estaba enojado, era tarde y no había encontrado el cargador, pero al escuchar esa voz tan cerca me resultó algo familiar sin embargo no he visto a nadie. ¿Estaré perdiendo la cordura? Esto sí es extraño.
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DESCONOCIDOS | Historia de amor
Teen FictionUna vida normal no es nada divertida sin un poco de caos. Esta es la historia donde la linea del tiempo es alterada. Dos personas son testigos de lo ocurrido, y solo uno de ellos consigue recuperar la memoria cuando los años han pasado en segundos...