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-¿Qué pasó? Me estas asustando mamá.- solté una risa nerviosa.

Su cara pasó de ser seria a preocupada y luego triste.

-George perdió el trabajo.

-¿Qué? ¿Es en serio?.- pregunté indignado.

-Si Francisco, es en serio. Lo llamaron hoy por la mañana.

-¿Y que le dijeron?.- dejé mi mochila a un lado y me fui a sentar al sillón. Mi mamá me siguió.

-Bueno ya sabes que George  llevaba trabajando años y años en aquella empresa y su puesto no era de gran importancia, por eso mismo sacaron a todos los de su puesto por gente mas joven así despidiendo a los que ya tenían varios años trabajando por decir así.

-¿Y que va a pasar con la casa? ¿las cuentas? Apenas nos mudamos y ya no podemos pagar las primeras cuotas de las cosas de la casa.- dije molesto.

-Yo tengo algunos ahorros y dinero separado que juntamos en caso de emergencia. Voy a tratar de buscar algún trabajo por acá supongo que debe de haber, mientras tanto George va a buscar trabajo también.

-Esta bien. ¿Y yo? Puedo ayudar también.

-No, tu te quedas a cuidar a Brandy. Mas que seguro que no tenga tiempo con todo esto de buscar trabajo y si es que lo consigo, tendría que organizarme con los horarios.

-Bueno, esta bien. Me voy a mi habitación.

Estaba subiendo las escaleras pero me pare en un escalón, me gire hacia mi mamá y le pregunté cautelosamente:

-La salida de hoy...¿queda en pie?.

Me miro seriamente alzando una ceja y negó. Yo asentí y seguí subiendo.

17:15 hs.

Estaba durmiendo una siesta, por que siempre duermo, y de repente suena el celular. Tres mensajes de Daniel y dos llamadas perdidas, una a las cuatro y media y otra hace un minuto.

Medio dormilón le marco a Daniel y responde rápidamente.

-Hola.- digo con voz ronca.

-¿Fuiste a..? Espera..¿estabas durmiendo?¿que no te ibas?.

-Cambio de planes, luego te cuento.

-Bueno ya que no te fuiste puedes venir a la feria que ya abrió y de paso me cuentas todo, todito ¿que te parece?.

-¿Por que tanta curiosidad sobre mi vida?- pregunté curioso.

-¿Por que me preocupo?¿Por que eres mi amigo? No sé, solo digo.- dice obvio. Y tiene razón.

Suelto una pequeña risa.- Si, si, bueno tienes razón. Estoy ahí en cinco.- dije y cuelgo.

Me levanto y me pongo una remera gris, un jean azul medio gastado, una campera negra y unas zapatillas addidas.

Llego a la sala y no encuentro a nadie.

-¿Mamá?.

Nadie.

Entro a la cocina y tampoco hay nadie. Voy a su habitación y tampoco hay nadie.

Supongo que se fue.

Le dejo una nota pegada en la heladera y luego me voy cerrando la puerta con la copia de la llave de la casa.

Luego de unos minutos llego a la feria en el parque central y me dispongo a buscar a Daniel.

Hay muchas personas, diría que casi todo el pueblo. Hay muchos puestos de comida, manualidades, entre otras cosas. También esta tocando una banda en un pequeño escenario y el resto los alienta cantando, saltando y bailando.

Me dispuse a llamarlo por que de verdad no lo encontraba. No era MUY grande la feria, pero al haber mucho amontonamiento en un mismo puesto o varios puestos no alcanzaba a verlo.

¿No podríamos haber puesto un punto de encuentro DENTRO de la feria?.

Un tono. Dos tonos. Tres tonos.

No contestaba.

Mas tonos y...buzón de voz. Genial.

Otra vez lo llamé y nada de nada. Lo único que podía hacer era seguir buscándolo. Guardé el celular y caminé.

NARRA DANIEL.

¿¡Donde se metió!?

Me dijo en CINCO minutos. CINCO.

Pasaron DIEZ y no lo encuentro. Para colmo se me callo el celular en no se donde y tampoco lo encuentro. De seguro debe estar como loco buscándome y llamándome y yo sin respuesta.

(Por si se preguntan donde estoy, estoy atrás del escenario).

Me asomo para ver si logro distinguirlo, pero no. Ya que no veo nada empiezo a caminar hacia la entrada.

Estoy por llegar pero de repente siento una explosión y luego veo como sale humo detrás de algunos puestos en varios varios colores.

Azul, negro, verde, violeta...

Levanto la mirada y lo veo..Francisco. Si. Estaba flotando en el aire.

¿¡Pero que mierda estaba pasando!?.

Corro hacia donde esta él,  intentando esquivar a las personas que corren despavoridamente intentando huir. Estoy por llegar pero me rodea un circulo de fuego bastante grande. Mierda. Ya estoy soñando.

-¡¡FRANCISCO!!- grito poniendo mis dos manos al rededor de las comisuras de mis labios.-¡¡FRANCISCO!!- vuelvo a gritar y nada.

Parece que estaba en una especie de sueño o como si se hubiese desmallado.

Estoy encerrado en este círculo pero nadie intenta ayudarme o intentar hacer algo. Solo corren hacía la salida.

-¡¡AYUDENME!! Alguien que me ayude.- empecé a acercarme a una parte del círculo pero me quemaba mucho y tenia que retroceder.

No sabia que hacer, me estaba empezando a marear demasiado y veía colores rojos, naranjas, violetas..azules..

Cada vez me iba durmiendo más y más, hasta que me desplome en el piso.

-Fran...amigo..- empecé a balbucear.

Lo único que logré ver antes de cerrar los ojos por completo fueron unas botas color negro oscuro y una túnica grisácea...



















SheDonde viven las historias. Descúbrelo ahora