Fantasías Prohibidas (Tom Holland y tú)

2: Tensión 🔥

*Narra Tom*

Me quedé pensando en lo que ______ dijo, eso de que "jamás me probaría" ¿Realmente no me desea? ¿No tiene ganas de besarme? Es decir, soy hermoso, cualquiera que estuviese en su lugar y yo hubiese hecho esa propuesta aceptaría, pero ella no. En realidad, ahora que lo pienso, siempre me rechazo todas las veces que bromee de esa cierta con ella. Pero me encanta, que sea difícil me atrae mucho más, me encanta provocarla. Y ahora que vamos a convivir juntos, voy a disfrutar muchísimo más hacerlo.

Me levanté como todos los días para ducharme antes de ir al colegio, poniéndo mis pantalones de jean, desodorante y perfume, mientras me miraba al espejo admirando la belleza que Dios me dió, escuché la voz de mi hermana con _____ en el pasillo, entonces sin pensarlo dos veces salí de mi cuarto sin ponerme la remera,  haciéndome el distraído

Tom: Oh lo siento, no sabía que estaban aquí —Mentí, tocandome el pelo, dejando ver mis brazos y abdominales marcados—

Daya: Si, como digas, ¿Que te estaba diciendo _____? —Pregunta desinteresada mirándola nuevamente—

— No.. no-no se —Balbucea mirando y quitando su mirada de mi cuerpo una y otra vez— Amm, creo que.. del exámen

Justo en ese momento lo único que hice fue mirar a _____ fijamente mientras sonreía de lado, de la forma más seductora posible, no tenía que esforzarme demasiado de todas maneras. Pero claramente había logrado mi objetivo, ponerla nerviosa.

Daya: ¡______! ¿Estás escuchandome? —Mi hermana volteo a mirarme— Y TÚ PONTE UNA PUTA CAMISA O LO QUE SEA, Deja de hacerte el galan —Enojada—

Tom: ¿Qué? —Respondí enojado también— ¿Ahora porque está ella no puedo andar sin remera por MI CASA?

Daya: ¡NO!

— Amm.. Permiso iré al baño, ya vuelvo —Dice caminando por mi lado hasta quedar dentro de este—

Tom: Apresúrate en lo posible, yo también quiero ir —Dije mirándola de lado, siguiendo todo su paso hasta que cerró la puerta—

*Narra ________*

¡Mierda! Qué situación incómoda acabo de pasar, claramente cuando me pongo muy nerviosa no se que decir, y logró ponerme hiper nerviosa mirándome de esa forma y encima sin remera. Esos abdominales bien marcados, sus brazos, esa media sonrisa que hizo mientras me miraba, no pude parar de pensar en cómo sería que me sujete con esos brazos y.. ESPEREN, ¿QUE CARAJOS ESTOY DICIENDO?

— Listo Daya ya estoy —Murmure saliendo del baño no sin antes mirar a Tom ya con una remera puesta—

Daya: Okey, vayan bajando que yo guardo mis libros y ya voy. TOM —señalandolo con el dedo— nos llevas tú porque mamá no esta

Tom muerde sus labios rodando sus ojos algo molesto

Tom: Tengo que pasar a buscar a Harrison con unas amigas, ¡No entran todos en el auto Zendaya! —Exclamó furioso—

Daya: No me importa, nosotras estamos primeras antes que esas idiotas que vas a pasar a buscar —Contesta sin importancia a sus palabras entrando a su cuarto para buscar sus libros—

Ambos en silencio, no quería demostrar más nerviosismo del que demostré antes.

—Como te tienen.. —Bromee sonriendo sutilmente. Tom voltea a verme—

Tom: ¿Quien? ¿Tú?

— ¿Yo que? — Pregunté levantando la ceja, confundida—

Tom: ¿Como me tienes tú? —Pregunta acercando se lentamente. Otra vez—

— No, como te tiene tu hermana —Respondí alejandome mientras me doy la vuelta—

Tom: ¿Y no te gustaría saber cómo me tienes tú? —Vuelve a repetir ahora dando la vuelta para ponerse enfrente mío nuevamente. Su mirada me puso nerviosa. ¡OTRA VEZ!—

En ese momento, pensé en irme para hacerle entender que no me interesa, pero a la vez, sentir su respiración tan cerca me volvió loca. Si lo odio, yo se que lo odio pero tenerlo pegado a mi y seduciendome de esa forma solo me hizo imaginarlo a él besándome sin parar. No sé bien que estaba sucediendo conmigo, este hijo de puta estaba provocando muchas sensaciones en mí en tan solo dos días y una de ellas era la tensión sexual que se generaba al estar cerca suyo. Y odiaba sentir eso.

— ¿Como te tengo, según tú?—Pregunte notando como mi respiración aumentaba y mi corazón latía rápidamente por los nervios. Él sonríe—

Daya: Listo chicos —Dice saliendo de espaldas a nosotros para cerrar la puerta de su cuarto. Me separé rápidamente de él antes de que Daya nos vea— ¿Vamos? —Pregunta tomando mi mano con aquella hermosa sonrisa característica de ella—

Tom: Si vamos —Contesto mirándome con una sonrisa ganadora en su rostro. Mierda, ¡Soy una estúpida! Claro que lo hizo aproposito, es el típico juego de él y yo volví a caer—

Rodee mis ojos soltando un suspiro corto pero profundo de la tensión que sentí hace un momento. Tom para ese momento ya estaba bajando por las escaleras

Daya: ¿Estás bien ____? —Pregunta con preocupación—

— Si, estoy bien vamos —Asentí—

Subimos al auto, Tom manejaba, Daya iba de copiloto, yo en el asiento de atrás. De repente el teléfono de Tom comienza a sonar, él contesta al instante

Tom: Hola Hazza —hablando por telefono—  Si, lo siento bro pero no es mi culpa, es culpa de la estúpida de mi hermana —Dice entre dientes mirando a Zendaya de reojo. Daya le da un pequeño golpe en su brazo— Es que no puedo llevarlos a todos no entran en el auto —Comenta rodando sus ojos mientras suspiraba y manejaba a la vez. Yo solo miraba a mis alrededores preocupada por mi vida. ¡Es un idiota!— Si está bien perdóname amiga, y dile perdón a las beibis, después se lo compenso —Comenta bromeando mientras reía. Zendaya pone su mejor cara de asco. ¿Vas a dejar de hablar y conducir? Pensaba— ,Genial adiós nos vemos en la escuela —Se despide colgando AL FIN aquella eterna llamada—

Daya: ¿Beibis? —Mirando a Tom con su rostro arrugado— ¡Que asco me das!

Tom: Que tú seas horrenda y no tengas a nadie detras no quiere decir que yo también

Los minutos pasaban y yo iba con mi vista perdida en la ventana hasta que mire por el espejo retrovisor y lo ví a Tom observandome por el, ¡Este chico no se cansa! Le hice 'fuck You' con el dedo y él sonrió. DEJA DE SONREIR ASI POR FAVOR

Al llegar al colegio, Daya baja primero y cuando estoy por bajar escucho su voz.

Tom: Tú y yo tenemos una charla pendiente, no lo olvides —Murmura mirandome por el espejo retrovisor nuevamente—

—Déjame en paz ¿Quieres? —Conteste bajando del auto— Molesto de mierda —Murmure—

Tom: ¡Epa! Que boquita —Ríe—

Claramente soy otra persona al tenerlo lejos mío, puedo razonar lo que estoy haciendo. Pero no puedo ser la misma si lo tengo cerca, ¿Por qué me hace esto? ¿Por que ahora? Jamás me miró antes, esta tortura no va a terminar bien, y todavía nos faltan 30 días juntos, o quizás más.