AE (EDITANDO)

Capítulo 1

Narra April:

El reloj sonó a eso de las seis de la mañana y me levante de inmediato. Tenía que prepararme para mi gran entrevista de trabajo.

Ya lista, decidí salir y tomar un taxi. En menos de quince minutos, ya estaba frente a una señora de unos sesenta años que me hacia muchas preguntas.

¡Obvio April, era una entrevista!

Luego de terminar la entrevista, salí a esperar fuera junto con otras chicas; ellas también esperaban salir de allí con el puesto de secretaria. Estuve en espera tres horas.

Bueno, después de tantas horas de espera, se abrió una puerta y sale la señora.
No saben como odie el momento en que me estaba entrevistando. En cuanto salió, se dirigió a todas:

- Chicas el jefe acaba de decirnos que ninguna será seleccionada. Se debe a un error en el anuncio puesto en el periódico. - informo, tranquilamente, la anciana.

- ¿Qué? - Dijimos todas al unísono.

- ¿Qué le falto al anuncio ? - Pregunte enojada y con voz muy, muy alta. Admito que me altere.

- Al parecer el señor nos ha encomendado buscar a una chica con conocimiento en el área del modelaje y con buena dicción. - respondió a mi pregunta.

- Entonces, déjeme hablar con su jefe. - Dije enfatizando la palabra "SU". Estaba muy desesperada.

- De acuerdo señorita ...-

- Hudgens, April Hudgens. - contesté.

- Bueno April, espere aquí. Yo veré que puedo hacer por usted. - Dijo la señora marchándose hacia la oficina de su jefe.

Todas las chicas se marcharon de aquel lugar resignadas, así que tenía esperanzas. Luego de cinco minutos de espera, la anciana volvió y se dirigió hacia mi.

- Señorita Hudgens, el jefe la espera en su oficina. -

- Gracias. - agradecí con una sonrisa mientras ella me dirigía hacia la oficina.

Cuando iba entrando leí en la puerta que decía: " Sr. Cameron Whiterspoon". ¡Genial! Al menos ya sabia el nombre de mi posible futuro jefe. ¿Lindo no?

Entré y enseguida me encargué de buscar el tal Cameron, porque en su asiento no estaba. Decidí sentarme y esperar a que apareciera.

Mientras estaba esperándolo, me fije en una foto que había detrás de su escritorio. Era de un chico muy guapo, cabello castaño, piel clara, ojos color azul y al parecer, alto. Debajo de su foto estaba una dedicatoria la cual por supuesto leí. Al final de todo decía su nombre "Cameron Whiterspoon". Solo puedo decir que se veía muy bien a primera vista.

Narra Cameron:

Una de mis empleadas de confianza me dijo que una chica quería hablar conmigo. Le dije que la hiciera pasar a mi oficina. Enseguida salí de ella (la oficina) y fui al tocador para ver como me veía. Luego volví a mi oficina y de repente "Puff" me encuentro con una chica de pelo oscuro y ondulado sentada frente a mi escritorio.

- Buenos Dias señorita...-

- Buenos Dias Sr. Whiterspoon. -Contestó ella poniéndose de pie y dándose la vuelta hacia mi.

Era hermosa, la verdad no me esperaba tan grata sorpresa. Este día comenzó bien. Alta, sencilla y muy elegante. Esta chica era un angel caído del cielo. Realmente me gustaba lo que estaba frente a mí. Había carácter hasta en su forma de mirar.

- ¿En que puedo ayudarle? -le pregunte seriamente.

- Señor me llamo April Hudgens y vengo a pedirle que me dé el puesto de secretaria. - Sin dejarme hablar, ella continuo -Tengo un bachillerato en publicidad y en diseño gráfico. Además, en mi anterior trabajo aprendí por obligación técnicas de pasarela, maquillaje, buena dicción, entre muchas otras cosas más. Así que con esto espero que sepa que soy su mejor elección en estos momentos . ¿Entiende? -

Termino de decir todo eso y la verdad es que me tenía embobado con su belleza. Aún no creía lo que tenía en frente.

- Señorita Hudgens, lamento decirle que el trabajo de secretaria ya esta ocupado por otra persona. - En ese momento vi como se le aguaron los ojos y enseguida bajo su mirada al suelo y se levanto del asiento.

- Oh, entiendo. No se preocupe de todas maneras, muchas gracias. - respondió y iba saliendo cuando de repente se me ocurrió algo.

- Espera... - le dije - ¿te gustaría ser la persona que organice mis ideas? En realidad me acabo de inventar el puesto, pero si lo quieres, es tuyo. ¿Aceptas? - terminé con una sonrisa.

Lo pensó por un momento.

- Acepto. -ella se giro de nuevo y salto de la emoción. - Muchísimas gracias Cameron, es decir Señor Whiterspoon. - se sonrojo un poco y se marcho.

No podía dejar esa cintura perfecta y esos ojos llenos de ilusión irse así nada mas.