Sentimientos...

Sonrisas

Sonrisas... Que son? A veces es simplemente posar para una foto para parecer más feliz de lo que eres, otras veces sonríes porque te ha pasado algo bueno y te va bien la vida, y a veces no puedes evitarlo pero algo o alguien te ha conseguido sacar una sonrisa.
Cuando sonríes falsamente se nota. O al menos lo notas tú porque sabes que es falso y la gente que realmente te conoce porque sabe cómo son tus sonrisas verdaderas. En esos momentos tal vez lo haces para huir de algo, para fingir que estas bien y ni tener que dar explicaciones, tal vez porque la realidad es mucho más difícil que una simple sonrisa, porque hay veces que aunque el mundo se te cae a pedazos y lo único que quieres es un abrazo, tu orgullo no te deja rendirte, no deja que digas "ya no puede más", traiciona a tu mente para que piense que no pasa nada, que no será la primera caida ni la última y tienes que levantarte.
Cuando sonríes porque te ha pasado algo bueno, esa sonrisa te ilumina el rostro. Irradias luz y lo sabes, o tal vez no te das cuenta, pero la gente a tu alrededor sí, y es muy probable que les contagies ese buen humor y por un momento también se olviden de sus problemas. En esos momentos no piensas en nada, solo sabes que eres feliz y que por una vez algo no falla, algo no se rompe, es una sensación única y reconfortante.
Y por último está cuando sonríes sin querer. Cuando ves algo en la calle que te alegra, quizá escuchas una canción que te gusta, ves a alguien que sin conocerlo te cae bien, o simplemente escuchas algo que te hace recordar una situación vivida y un recuerdo se te cruza por la mente haciéndote sonreír.
También hay veces en las que sonríes por alguien. Si estas enamorado pasa mucho, sobre todo si piensas en esa persona que hace que sientas mariposas en el estómago, pero también pasa cuando hablas con alguien a quien quieres mucho. No hablo de que te guste esa persona, sino que te sientes a gusto hablando con ella o te hace alegra el día con una de sus tonterías. Da igual que sea tu vecino, de la ciudad de al lado o del otro continente, esa persona te importa y te encanta estar con ella.
Por eso hay veces que mientras habláis sonríes sin pensarlo, sin desearlo, y tal vez te da rabia porque resulta que estabas de mala hostia y algo insignificante como puede ser una palabra que te ha dicho, te ha hecho ponerte de buen humor. Pero te diré algo, lo que te hace feliz no es lo que te han dicho, sino quien te lo ha dicho, y por mucha rabia que te dé, en realidad te alegras de tener a alguien que haga ese efecto en ti; a las personas así tienes que mantenerlas, porque consiguen algo mágico, y es que sonrías.