Capítulo 04

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Para Katsuki la confianza siempre había sido importante entre Izuku y el, puesto que, después de todo lo que habían pasado para llegar a ser novios no estaba dispuesto a echar su relación a perder por una tontería. Aún así, era fácil que ambos discutieran por cosas bobas y todo se vino a abajo cuando le pidió a Izuku dejar de ocultar su relación, pues entendía que él peliverde tenía mejores razones que simplemente no querer echar a perder una imagen de rudeza, pero estaba consciente de que era algo que ambos podían tolerar incluso si la clase entera intentaba intervenir en su relación.

Esa mañana habían sido los primeros en despertar y bajar a la sala común, ya listos con el uniforme de la UA, incluso aprovechando que todos aún dormían comenzaron a platicar de algunas cosas a una distancia considerable por si alguien bajaba,sin embargo, las cosas se tornaron feas en cuanto tocaron el tema sin querer. Izuku se había negado al principio con tranquilidad, luego con nerviosismo y al final habían terminado discutiendo, sacando todas esas cosas que habían dicho que habían perdonado y Katsuki se había estado contenido de gritar, logrando manterse sorprendentemente más calmado que él mismo Midoriya, hasta que él susodicho empezó a cambiar tema tras tema y comenzó a decir lo egoísta que era al nunca pensar en él ¿Tenía razón? Tal vez la tenía, pero si sé ponía a pensar bien, era Izuku quien más se apartaba de el, era Izuku quien le decía donde verse y cuando iban a hablar, incluso la semana anterior Izuku fue quien decidió verlo luego de esos esos frustrantes días ¿Cuándo Bakugou Katsuki se había ablandado? Ni él mismo lo sabía. La bomba estalló cuando los demás comenzaron a bajar mientras que Izuku le gritaba que detestaba que aparentara ser un "chico rudo" cuando en realidad era alguien era muy sensible junto a otras cosas personales que terminaron por romperlo. Izuku lo sabía y lo dijo delante de todos, se sintió herido, su orgullo y ego se fueron hacia abajo, porque él peliverde lo conocía demasiado bien, porque básicamente había dicho eso frente a todos siendo que era un tema que no tenía nada que ver con el principal. Avergonzado y dolido, no había dudado en gritarle que era un maldito cobarde antes de dirigirse a los elevadores, decidiendo que le valía una verga las clases de ese día.

Enterró su cabeza en la almohada, se sentía ridículo por dejar que algo así le afectara, pero era difícil sabiendo que la persona que amaba lo había dejado vulnerable ante todos. Ni siquiera se molestó en cambiarse de ropa, no tenía ganas de nada, simplemente dejó que sus tormentosos pensamientos lo arrullaran para cerrar sus ojos y caer en brazos de morfeo.

Despertó casi tres horas después, cuando su estómago comenzó a emitir borborigmos, así que, de forma lenta y perezosa salió de su habitación, bajando a la sala común para tomar algunas papas picantes de la alacena-que si no mal recordaba eran de Kirishima- y una de las sodas que Sero compraba diariamente, incluso tomó algunos bocadillos más por si en la noche le daba hambre, porque ni de broma pensaba ver a los demás ese día, mucho menos quería ver a Izuku a pesar de saber que debían de arreglar las cosas, pero necesitaba tiempo para calmarse, no quería cometer los mismos errores de comunicación que habían llevado a su amistad quebrarse cuando eran niños.

Las horas posteriores tan solo se dedicó a jugar video juegos,estudiar y leer algunos cómics que tenía escondidos en uno de sus cajones, se había aburrido pero aún así tan solo se dio cuenta de la hora que era cuando algunos toques a la puerta interrumpieron su lectura.

-Oye, bro... ¿Estas ahí? - la voz de Kirishima resonó a través de la puerta.

-Bro, traemos las libretas de las actividades de hoy - Kirishima volvió a hablar con un tono de preocupación, fue por esa razón que se levantó para abrirle la puerta, percatandose también de la presencia de Denki. Ambos amigos tenían expresiones de preocupación en su rostro, nunca habían visto al de carácter explosivo actuar de esa forma, normalmente habría lanzado una explosión a Midoriya mientras le gritaba improperios y se abría ido a desayunar, pero su sorpresa fue que tan solo gritó algo para subir a su habitación, no explosiones, no una verborrea de improperios.

-Tsk. Al menos sirven de algo- sin cuidado alguno les arrebató las libretas, aún sabiendo que estas posiblemente tuvieran pocos apuntes, pero ya se encargaría de estudiar por su propia cuenta.

-Bro, Iida esta molesto porque faltaste a clase y porque mentimos diciendo que estabas enfermo para que Aizawa-sensei no se molestara, Iida dijo que bajaras para disculparte - Denki le sonrió nervioso, esperando un golpe o alto así, pero se sorprendió al ver que Bakugou se limitó a rodar los ojos.

- ¿Qué fue eso de la mañana? No me esperaba que discutieran tú y Midoriya tan temprano- Kaminari le observó pidiendo una explicación que claramente no iba a dar.

-Que les valga verga -Fue lo único que contestó dispuesto a cerrar la puerta de su habitación.

-Midoriya se puso a llorar después de que te fuiste. Se siente mal por lo que te dijo bro... Sé que ya no son amigos pero ¿Por qué comenzaron a discutir por algo así? Eso es poco varonil y hasta para Kaminari no tiene sentido- Él pelirrojo teñido ni siquiera obtuvo una respuesta pues la puerta fue cerrada frente a sus narices. Entonces Kirishima y Denki suspiraron, mirándose con resignación y bajaron a la sala común donde los chicos de la clase 1A estaban reunidos charlando, al verlos llegar Iida se puso de pie.

- ¿Y Bakugou?- preguntó al no ver al chico explosión entre ambos amigos.

-Tomó las libretas y cerró la puerta- respondió Kirishima restándole importancia, escuchando el gran discurso de Iida sobre la honestidad, el camino de un héroe y demás.

Izuku quien también estaba ahí, bajo su mirada y no queriendo escuchar más subió a su habitación sabiendo que al menos esa noche Kacchan no le abriría su puerta...

1028 palabras.

¡Jódanse! •KatsuDeku•Donde viven las historias. Descúbrelo ahora