[21]

1K 74 3
                                    

El cantar de los pajaritos fuera me hizo darme cuenta que ya estaba amaneciendo, y que una persona muy conocida ya estaba despierta. 

—Ey, no hagas eso... —Dije soñolienta. Él sostenía mi barbilla moviendo mi cara de derecha a izquierda, sentía su mirada en mi aunque tenía mis ojos cerrados.

—Tu solo intenta obligarme a no hacerlo.

Me estiré lo suficiente para que mis pies y manos chocaran contra él, empujándolo al borde de la cama.

Soltó un quejido al darse cuenta que casi cae de la cama.

—Buen intento, T/N...—Recogió mis brazos y piernas. 

Sonido de notificación

Me giré para alcanzar mi celular, era Noah, teniendo la mirada de Asher encima me senté al borde de la cama dándole la espalda encendiendo mi celular y desbloqueandolo.

Noah 

Imagen multimedia
Encontré esta foto vieja jaja

Era una foto de los chicos haciendo muecas, se veían más pequeños. 

—La próxima será mejor, espero que prepares tu caída— Las notificaciones llegaban haciendo que mi celular sonara repetidas veces, entre pequeñas risas me recosté dejando los pies fuera de la cama sosteniendo en el aire mi celular.

—¿De qué tanto te ríes?

—No es problema tuyo— Le sonreí y volví a mirar la pantalla de mi celular.

Querida, no es por arruinar la sorpresa pero alguien se acerca a nosotras, ahí te dejo el dato.

¿Qué?

Asher poco a poco bajo mi celular haciendo que lo pusiera en mi pecho, sus hermosos ojos parecían tener un brillo aunque fuese de día, relamió sus labios lo cual hizo que se volvieran rojizos, juntó nuestros labios torpemente debido a que estaba de cabeza.

Sinceramente no sé cómo Mary Jane y Spiderman hacen ver ese beso tan fácil.

Me reincorporé y me acosté sobre él dejando mi trasero por encima de lo que empezaba a ser una erección, tomó mi cabeza entre sus manos colocando sus pulgares en mis mejillas dando círculos imaginarios en estas.

Pasado mañana nos iríamos del campamento, así que quería aprovechar el mayor tiempo posible antes que empezara a ser la señora amargada, Annie tenía bastante suerte de tener el placer de poder admirarlos todo el tiempo.

Ahora que lo pienso... él a estado más presente desde esa vez...

Corté el beso y metí mi cara en su cuello, su perfume conjunto a su olor corporal me llevaban al cielo.

Tarareé una canción lentamente mientras me mecía.

—Besó la coronilla de mi cabeza acompañado de un abrazo— No me imaginé que estaría en situaciones con mi vecina acosadora... pero bueno, quiero disculparme por ser un idiota.

Saqué mi cara de su cuello para mirarlo.

—Yo sabía lo que pasaría si me involucraba contigo, yo realmente no quería y no quiero— Remarqué lo ultimo—, pero tu la cagas con esa maldita sonrisa y esos hermosos ojos, no te imaginas lo malditamente difícil que es resistirse...

shit; asher angel [En proceso de edición]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora