Nothing Alike

462 36 4
                                    

-Por favor Yu In, dime qué ocurrió. - mi hermano estaba sentado frente a mí.

-Bueno, primero que nada, estoy bien si? No es lo que piensas, Jaemin no me hizo daño conscientemente. - sabía que no él creía eso. - No sé por qué reaccionó así, le hablando de la ausencia del profesor Lee y cuando le dije cómo se llamaba se quedó estupefacto. No es chico agresivo, al contrario, siempre es muy lindo y amable, no sé qué le pasó. Honestamente estaba empezando a temer que me pudiera hacer algo cuando me sujetó más fuerte pero en cuanto me quejé me soltó, se disculpó y se fue... Pero seguía estando distinto, sus ojos estaban turbios. - en este punto yo estaba diciendo las cosas para mi misma más que para Jae. No podía comprender qué hizo que reaccionara así, me había equivocado con Jaemin? No lo creía.

-No quiero que vuelvas a acercarte a él, si es necesario deja de ir a esa cafetería, entiendes? Si perdió la cabeza una vez podría hacerlo de nuevo. - Jaehyun iba en serio, no recordaba la última vez que había estado tan severo.

No dije nada.

-Prométemelo Yu In. - odiaba hacer promesas que no sabía si podría cumplir.

-Está bien. Trataré.

~

Al día siguiente me enfoqué en pasarla bien con Dahyun, Aisha, Nako y otra chica nueva llamada Yuna, sólo tiene 15 pero es muy hermosa y creo que tiene hasta cierto parecido con alguien que conozco pero no logro descifrar aún con quién.

Las chicas me preguntaron sobre la marca en mi brazo pero no iba a decirles que el chico que me gusta me lo hizo, claro. En cuanto al profesor Lee, todavía no aparecía por la escuela pero nos dijeron que en unos días regresaría y que había estado ausente por razones personales, siendo sincera, yo ya quería verlo.

La mañana pasó muy rápido, cuando no estaba concentrada en algo me venía a la mente el encuentro con Jaemin del día anterior pero intenté alejarlo de mi mente. Ahora que lo pienso, hay muchas cosas que desconozco de él aún y tal vez sea mejor que se quede así...aunque mi corazón no quiera.

~
Al salir de la escuela decidí no ir al café, no quería encontrarme a Jaemin hoy ya que tenía muchos pendientes por hacer y dudo que él fuera a ir, como lo vi ayer supongo que estaría enfadado o tomándose algo de espacio, como yo.

Estaba a unas calles de llegar a casa cuando alguien me sujetó por la mochila, lo primero que se me vino a le mente fue que se trataba de un robo pero quien diablos se iba a robar la mochila de una colegiala? Mi segundo pensamiento fue un secuestro... Sí, soy así de positiva.
Pero todos esos pensamientos fueron borrados al instante en que vi a la persona que sujetaba mi mochila.

Era él.

Jaemin.

Que ahora traía el cabello castaño por cierto, ese cambio hacía que se pareciera aún menos al Jaemin que conocí al principio.

Cuando me acompañaba a casa tenía el hábito de tomar la agarradera superior de mi mochila, recordé.

Duramos unos segundos mirándonos a los ojos, se veía triste pero también  noté que me miraba con... Lástima?

-Qué quieres? - gran inicio Yu In.

-Quiero disculparme contigo... Y decirte algo. - soltó mi mochila.

-Te escucho.

-De verdad lo siento, perdí el control y no merezco que me perdones, lo sé. Y-yo te quiero Yu In, en serio y por eso yo mismo no puedo perdonarme por hacerte daño. Nunca volveré a hacerlo. -me dijo y miró la marca de mi brazo.

-Me vas a decir qué hizo que te pusieras así?

Suspiró. - No puedo decírtelo aún, quisiera pero no puedo. No depende de mí, Yu In.- se le veía cabizbajo.

-Si es algo personal lo entiendo, pero no puedo olvidarlo, Jaemin. Me asustaste y nunca creí sentir eso a causa tuya. - un sentimiento amargo se estaba apoderando de mi a medida que decía aquello.

-De verdad lo siento, Yu In, no te mereces a un imbécil como yo. Te prometo que no volverá a pasar, yo mismo me mato antes de ponerte una mano encima de nuevo. - cuando dijo eso sus ojos se volvieron llorosos y lágrimas resbalaron en su bello rostro.

No lo pensé, solo lo hice.

De un momento a otro mis labios se encontraron con los suyos, y yo había hecho el primer movimiento. Carajo, cómo puedo caer así de fácil?

Él estaba sin duda sorprendido por mi acción pero no me rechazó, tomé su rostro con mis manos y limpié las lágrimas que habían caído por su mejilla. Hasta yo estaba sorprendida por lo que estaba haciendo, pero no me importó, verlo así y no saber que le ocurría y por ende no poder  hacer nada para ayudarlo me frustraba porque yo sentía  que en el fondo era un buen chico, sentía que su esencia era brillante y pura luz, una luz que me iluminaba, lo quería por algo y al final de cuentas su amabilidad y su personalidad me había cautivado.

Estoy perdida.

Nos besamos y al separarnos sus ojos volvían a relucir, pero yo ya no sabía que hacer y el tomó la iniciativa de nuevo, como antes, perdí la cuenta de cuántas veces nos besamos esa tarde.
.
.
.
.
.
.
.
.
Holaaaa muchísimas gracias por leer, ojalá les guste y prepárense para lo que viene jejejej

💚

Que sean muy felices.


Nuestro Hilo Rojo [Jaemin] (EN EDICIÓN) Donde viven las historias. Descúbrelo ahora