Nuestro Hilo Rojo [Jaemin] (EN EDICIÓN)

My First And Last

Pov Jaemin

Esa tarde con Yu In fue inusual, tenía en mente olvidarme de todo y concentrarme en ella, pero no pude.

Aún estando absorto en mis pensamientos llegué a casa ya que era algo tarde.

-Por fin llegas. -dijo una voz grave, esa voz que me hacía tensarme y que me llevaba recuerdos dolorosos de mi jodida vida con la persona dueña de esa voz.

-Por fin estás cuerdo. - no pude evitar decirlo. Grave error.

~

Pov Yu In

Desperté agitada. Era la misma pesadilla, el accidente, mi madre... Y ese rostro.
No podía ser ella ya que en el sueño ella está a mi lado en el asiento del conductor y el rostro aparece en el lado de mi ventanilla y simplemente no lo puedo ver claramente.

El accidente había sido ocasionado por un conductor a exceso de velocidad en estado de hebriedad y no fue sancionado porque huyó en cuanto pudo, no se qué habría pasado si nos hubieran ayudado. Tal vez ella habría sobrevivido.

Pero no fue así, huyó y mi madre está muerta, no lo puedo cambiar. Algún día lo encontraré y me tendrá que ver a la cara y decirme por qué nos dejó a la deriva a espera de que alguien más nos ayudara, aceptar que fue un cobarde y un desgraciado.

Mi madre se merecía una muerte digna, no morir por culpa de los errores de alguien más..

Mi día no mejoró pues ni siquiera vi al Profesor Taeyong, alguien suplió su clase pues él no estaba.

Conocí a dos muchachos agradables Xiaojun de cejas muy tupidas y Doyoung de piel muy pálida.

Sí, Wonho había sido expulsado, en su ausencia parecía que todo había mejorado en la escuela, me sentía más tranquila.

Fui al café en la tarde y honestamente no lo esperaba ver.

Me sorprendí cuando lo vi sentado medio encorvado y con su cabello revuelto, lo más notorio era lo moretoneado de su cara.

-Jaemin... ¿Qué te sucedió? - inconscientemente tomé su mejilla a lo que hizo una mueca, tenía una expresión triste y sus bellos ojos estaban apagados a diferencia de las veces que nos habíamos visto.

-Tuve algunos problemas, pero nada por lo que preocuparse. - intentó sonreír. - No me mires así Yu In, estoy bien, no te preocupes. - No cambié mi mirada.

No me había dado cuenta cuánto tiempo pasé con mi mano en su mejilla cuando dijo:

-¿Podemos ir a otro lado? Quiero decirte algo.

-Eh sí, sí, claro. - dije y le hice una seña a Garin de que yo me encargaba.

Fuimos a un parque y nos sentamos debajo de un árbol frondoso.

-¿Qué querías decirme?

-Bueno, verás... tenemos que dejar de vernos.

-¿Por qué? - fue lo único que atiné a decir.

-Porque yo no debo estar contigo, no soy bueno para ti... Soy un desastre, Yu In, ni siquiera pude darte una primer cita decente y créeme que era lo que más quería. - sus ojos se habían cristalizado y hablaba triste, dolía como una maldita daga clavándose en mi verlo así de vulnerable.

-Dime qué ocurrió Jaemin.

No me percaté de que mis ojos se había vuelto llorosos también.

-Tuve una pelea con mi padre, y tuve una pelea con mi hermano el día de nuestra cita, salí contigo igualmente porque pensé que podría sobreponerme pero no pude. Soy un maravilloso desastre.

-Eres maravilloso. - dije sin pensar.

Vi que se sorprendió pero no más que yo por lo que vino después.

Sonrió, una triste sonrisa que poco a poco pude ver mejor y se acercó a mí, cada vez más cerca... cerré mis ojos y sentí sus labios contra los míos. Fue un beso suave y tierno casi como si se estuviera refugiando en mis labios.

Dios, qué confundida estaba ahora.
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