Hope Center [MiChaeng]

Capítulo 3

La chica rubia giró rápidamente y me miró con odio.

-¿Tú que miras, Barbie de los 80? -preguntó, claramente con las ganas de que viniera alguien a matarme.

Oh, esta chica es demasiado confiada en sí misma.

El doctor, que por lo qué podía ver se llamaba Jaebum, suspiró agobiado acomodando su chaqueta empapada, intentando mantener la calma. Miró a Chaeyoung de mala gana y se acercó a mi fingiendo una sonrisa.

-¿Tú eres la tal Srta Mina? -preguntó acomodando sus lentes.

Respondí asintiendo con la cabeza mirando de reflejo al joven.

Después de decir eso Jaebum me saco a rastras de aquella sala agarrándome con fuerza en mi brazo derecho.

-Escúcheme bien señorita Myoui, tiene que hacer todo lo que ella le pida, no puede hacerle sentir mal, o algún otro inconveniente. Trátela con respeto. Ella es uno de los peores de aquí -suspiró y se fue.

Hice una mueca burlona y volví a entrar a esa sala con el chico dentro.

Empezaba a notar una sensación incómoda, nadie hablaba. Me acerqué y me senté en una pequeña silla al lado de la cama donde la chica se encontraba mirando detenidamente, esto se estaba se estaba volviendo aún más incómodo.

Abrí mi boca para decir alguna cosa para dar a conocer algún tema de conversación, pero la rubia me interrumpió.

-Oye, ¿te has dado cuenta de que caminas como un pingüino? -sonrío pícara mostrando sus alineados dientes.

¿Perdón?

Arqueé una ceja en señal de asombro y solté una ligera risa.

Había escuchado sobre este lugar, en dónde sólo venía gente con problemas mentales, según todas las críticas negativas esto era un manicomio, pero, estar con esta chica me parecía divertido, no es tan espeluznante como yo pensaba.

-También pareces una emo, ¿en qué año te quedaste? -rió posando su mano sobre su boca.

De alguna manera me pareció tierno.

Baje la cabeza y recordé lo qué pasó con el florero.

Me atreví a hablar.

-Oye, ¿y tú por qué tan agresiva con los demás? -sonreí.

La chica de ojos oscuros se encogió de hombros como si estuviera buscando una excusa.

-No lo sé, ese es mi carácter... supongo -suspiró cansada y cerró los ojos como si fuera a dormir.

Vi que su ropa estaba totalmente empapada, supongo que de tirar demasiados floreros.

-¿Quieres que te duche?

La chica abrió los ojos asustada mirándome.

-Pero ni siquiera sé tu nombre, y no, puedo ducharme sola, "gracias" -Chaeyoung suspiró agobiada y aparto las sábanas blancas que le cubrían, dejando ver que llevaba un camisón del mismo color. Al dar el primer paso cayó al suelo.

-¿Necesitas ayuda o...? -sonreí divertida y me crucé de brazos -Por cierto, soy Mina.

-Bien Mina, te doy permiso para que me ayudes pero no me violes -me miro malhumorada.

Me levanté de la silla y agarré a Chaeyoung al estilo princesa, era demasiado ligera.

Ahora que lo pienso, todavía no sé de la enfermedad que sufre, pero creo que me hago una idea.

Por suerte, el baño estaba a cuatro pasos de la habitación así que en menos de un minuto llegamos ahí. En todo el camino no dijo nada, es bastante tranquila.

Bien, pues a ducharla.