El infierno perfecto.

Cuidala.

Iba feliz de la vida, pero seguía con su rostro impenetrable, aún era temprano y no había muchos alumnos en los pasillos se dirigía al despacho del director.

-Adelante Severus- Dijo Albus desde adentro antes de que Snape tocara.

-En que puedo servirte Albus-

-Mi querido Severus, ven, acercarte- Snape se acercó lentamente, algo le decía que aquel viejo chiflado planeaba algo.

-Anda- lo apresuró, cuando llegó a su lado le hizo una seña para que viera algo.- ¿sabes que es? -pregunto curioso.

Oh claro que lo sabía.

El espejo de Oesed.

Oesed lenoz arocut edon isara cut onotse.

Esto no es tu cara sino de tu corazón el deseo.

Severus trago saliva difícilmente, recordó la última vez que lo uso, se vio a él y a Lily a su lado, felices. Ahora no sabía que demonios vería ahí.

-Pruébalo Severus- Dijo el profesor ansioso y contento.

-No... Yo no...-

-Anda ven- a Severus le ganó la curiosidad, se acercó lentamente, tenía miedo de ver a Lily, él quería a Hermione pero ¿y si en su lugar estaba Lily?  Llegó frente al espejo, inhaló y vio lo que había frente a él.

Apareció una casita muy pintoresca y bonita, la figura de el comenzó a hacerse visible, se veía diferente, con el cabello corto y vestido con un pantalón negro y camisa blanca. La figura de una mujer comenzaba a aparecer a su lado, se asustó al pensar que sería Lily pero al ver un cabello Castaño y alborotado se tranquilizó, Hermione apareció a su lado, con una sonrisa de oreja a oreja y un poco mayor, él la abrazaba y besaba su mejilla.

-Pero Severus- el mencionado volteó, ahí estaba Albus, aunque parecía tranquilo sus ojos mostraban sorpresa.

-Albus yo puedo..-

-No, no tienes que explicarme nada, lo he visto todo-

-Yo no se que decirte Albus... Sólo se dio y...-

Dumbledore sólo hizo un gesto con la mano diciendole que no siguiera.

-Sólo cuidala Severus, se que eres bueno y que sé aman pero cuidala, es lo único que te pido-dijo tranquilamente el anciano -también te pido que seas discreto, Granger lamentablemente es menor que tu y hasta que ella salga de aquí podrán hacerlo oficial y andar libremente-

-Si lo se Albus, la esperaré- en su rostro apareció una sonrisa.

-Bueno, las clases comenzarán, después vienes y me cuentas mejor Severus- Dijo con calma mientras abría un caramelo de limón.

-Viejo chiflado- soltó una risita y salió. Le esperaba un día largo, ese día no tenía ganas de regañar ni castigar y mucho menos revisar trabajos de mocosos irresponsables.

Cuando llegó a la clase con los alumnos de sexto año de Slytherin y Gryffindor decidió hacer algo diferente.

-Hoy la clase será diferente..- Dijo con su típica actitud y su típica voz, fría y arrogante -pero si desobedecen mocosos... Tendrán un castigo severo.-

Hermione alzó rápidamente la mano hasta casi tocar el techo -¿y que haremos profesor? - Pregunto en el mismo tono de siempre.

-No puede esperar a que le de la palabra Granger- la miro molesto, está y todos esperaban el regaño o los puntos menos hacia la castaña.- bueno, hoy no tengo ganas de pelear ni quitar puntos, así que todos caminen hacia afuera ordenadamente, no hagan que me arrepienta.- todos se quedaron boquiabiertos, eso no sucedía todos los días, por esa razón todos obedeciendo salieron ordenadamente al patio delantero.

-Bien- Dijo Snape cuando llegaron, saco su varita y hizo aparecer caladeros e ingredientes frente a ellos.-formen equipos de tres, y pueden sentarse en el piso, es más relajante- nadie, absolutamente nadie podía creerse eso, ni siquiera Hermione.

Snape hizo aparecer una silla y se sentó -daré las instrucciones, procuren escuchar bien, no repetiré- definitivamente no era una clase normal pero todos hicieron lo que tenían que hacer.

Al terminar Snape pidio la opinión de cada uno, para saber si les había gustado esa clase, todos aseguraron que fue la mejor clase.

-Bien, si se portan así tal vez los saque más seguido, ahora recojan sus cosas y retirense- todos se retiraron lo más pronto posible, Hermione camino hacia un costado del Castillo sin que nadie la viera, se esfumó sigilosamente. Snape la vio y cuando todos salieron de su vista fue a donde aquella niña. La buscaba como si la fuera a cazar pero no la veía, de repente sintió un pequeño cuerpo saltar hacia el por detrás y unas pequeñas manos tapar sus ojos. La chica río y se incorporó, este le sonrió y se abalanzó hacia ella, Hermione sólo reía al sentir besos por su cuello, mejillas, ojos, nariz, frente y cabello. Para después recibir uno en los labios.

-Esa clase fue extraña- Dijo cuando se hubo separado para tomar aire.

- ¿No te gustó? La hice así para ti- admitió, la quería sorprender a ella, lo hizo por ella.

-Claro que me gustó- Dijo mientras acariciaba su mejilla dulcemente -me tengo que ir a Aricmatica- Dijo tristemente.

-Y yo con los mocosos de tercero- la chica río. Se dieron un último beso en despedida y tomaron rumbos diferentes.

Como amaba a ese hombre, tan impredecible. Tan misterioso pero sorprendente.

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Ahora si actualizé rápido para que no me lancen crucios.

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Los quiere con cada beat de su corazón lleno de cocaína.

-Andrea xx