veintisiete: [especial 1/?]

64 15 2
                                    


Cómo dije, esto es para que sepan que pasó entre Sarah y Reiji en todo este lapso, será el especial entre cuatro o tres capítulos, idk.

.

.

.

Reiji había pensando seriamente en que debería irse, no quería estar pensando en Daryus puesto que él seguía con la idea que la homosexualidad no era buena, pero a ojos de su madre. Era por ella que no aceptaba su gusto, aún no salía del dichoso "clóset".

Le había ofrecido un buen trabajo en Estados Unidos, solamente tendría que irse de una vez, no estaría dispuesto a esperar a terminar el año ahí, entonces se fue a Nueva York, además que tenía contactos que podrían ayudarlo si iba a ahí, entonces, Adiós Japón, hola Estados Unidos.

No sé digno a despedirse de nadie, a excepción de su madre claramente, no era una sorpresa.

Aunque a los días de su estadía tuvo algunos mensajes y llamadas de su primo Subaru, y su conocida Sarah, se lo esperaba así que no se sorprendió, solamente que daba respuesta cortas cuando le preguntaban donde estaba, no quería que se enteran ni nada parecido, en especial Daryus, le daba gay panic y no se sentía listo, sin embargo podría decir que era ligeramente su tipo.

Su estadía de dos años realmente fue agradable aunque un poco complicada al principio, aún sentía que extrañaba alguna que otra actividad que hacía o las cosas que ya conocía, pero sabía que era por su bien en realidad.

Él siempre procuraba tener aunque sea una flor o un pequeño ramo, de unas flores en específico, camelias blancas, pues le recordaban a Daryus, incluso aún recordaba el ramo que una vez él le hizo con esas flores.

Tenía que reunirse con uno de los ejecutivos más importantes, prefería siempre enviar a su asistente pero recientemente se había quedado sin una, ahora no podía negarse y le irritaba, siempre quería que todo se hiciera como él quisiera.

Entonces en el elevador, miró de reojo a su acompañante y era nada más y nada menos que Sarah, tenía mucho que perdió la comunicación con ella, bueno, muchas personas, le sorprendía en verdad verla pero no tenía ese brillo y estilo que le caracterizaba cuando la conoció, ¿Cómo olvidar como le pateó literalmente el culo a Ayato? De todas formas, para estar en aquella empresa vestida de manera muy informal, era extraño y no sabía que pasaba.

Se enteró que el dueño de la empresa era tío de Sarah, aquella chica podría servirle de algo. Entonces tuvieron su reunión y Reiji la aceptó como su asistente personal, entonces al salir de aquél encuentro conversaron de lo que fue la vida de ambos después de la universidad, Sarah no dijo mucho al respecto, sólo que volvió a su hogar, y decidió viajar a Los Angeles pero quería quedarse y necesitaba trabajo, y con su tío sería seguro tener aunque sea algún trabajo.

Se volvieron un poco unidos con el trabajo, además que se dió a la tarea de conquistarla, quería tener influencia en la empresa de aquél hombre, la suya era mejor pero si se unían, sería fantástico, el viaje no podría decirle que no, además que pronto según se enteró su hijo tendría su empresa, era prácticamente perfecto.

Entonces cuando aceptó ser por fin su pareja, algunos meses después le pidió matrimonio, quería que fuese lo más rápido posible, de eso no había duda. Sentía ligera atracción por esta pero estaba plenamente seguro que le iba mejor el su mismo sexo, todo sea por la influencia.

Cuando se casaron, un año después se la presento a su madre, se mostraba satisfecha, además que creía que hacían linda pareja juntos, un punto extra, pensó.

También se enteró cuando su hermano decidió casarse con Yuuma, asistió a la ceremonia y por supuesto, la fiesta, aquello hizo que se consideraran conocidos, a pesar de ser hermanos, su relación mejoró un poco y arreglaron algunas de sus diferencias, sabía que seguir con odio no servía y por supuesto pero secretamente, en su cabeza pasó que él envidiaba que no pudiera si quiera darse un beso con Daryus, y su hermano mayor lograra después de un tiempo, por no decir años, casarse con su amado.

Habían intentado tener un hijo, sí, Reiji podría ser todo un gay de clóset y casarse para aparentarlo pero él quería una familia al fin y al cabo, pero simplemente ella no quedaba embarazada, llegó a pensar que la chica era estéril y no lo sabía, bueno, él se hizo la conclusión pero no estaba seguro, ya tres años de casados y nada...

Su empresa tomó más importancia y se extendió a Nueva York, pero entonces llegó una fecha importe, debía reunirse con muchos ejecutivos, entre ellos el primo de Sarah, eran solamente hombres jóvenes puesto que ya muchos le hederaron a sus hijos, pero el que más le interesaba era Daryus, pero simplemente no podía arriesgarse a su sonrisa, su rostro nuevamente, puesto que ya seis años habrían madurado a aquél chico, sí, no podía quitárselo por completo de su fría cabeza, aunque sin decirle nada a Sarah, le pidió que ella fuera a aquella junta y propusiera las ideas que ambos tenían para unir no solo la empresa de ambos, sino las demás también.

Solamente llegó su esposa, revisó los papeles y todos estaban firmados, pero no quiso preguntar cómo estuvo todo, pensaba que era innecesario a final cuenta, y además que ella se ofreció en ir a la empresa de este cuando se necesitara, le molestó porque quería ver a Daryus. Pero simplemente no dijo nada, entonces desde ahí las salidas de su mujer comenzaron, ¿Acaso casi todos los días necesitaba ir a la empresa de Daryus? Joder.

. . .


Últimamente Sarah ya no quería estar con Reiji, se negaba a sus besos, a salir, incluso decía que estaba ocupada, es su esposa y la respetaba, pero se estaba hartando de la situación, sí, la enfrentaría porque quería de nuevo a la Sarah de antes, él no había cambiado mucho, lo admitía, pero últimamente Sarah lo evitaba e evadía en muchas cuestiones.

Gay. » ʀ̶̶ᴇ̶̶ɪ̶̶ᴊ̶̶ɪ̶̶ s̶̶ᴀ̶̶ᴋ̶̶ᴀ̶̶ᴍ̶̶ᴀ̶̶ᴋ̶̶ɪ̶̶ «Donde viven las historias. Descúbrelo ahora