Con cuidado

Cambios

Narrador Omnisciente

-Francis, que cosas dices, deja de decir estupideces.-Dijo Caleb mientras dejaba entrar a sus dos mejores amigos a su departamento.
-¿Que no te has enterado? Pareciera ser que algunos soldados andan tocando en todas las puertas haciendo preguntas.- dijo Elie llamando la atención de cierto peli rojizo, quien no sintió miedo por lo dicho, sino que simplemente le daba curiosidad la palabra "soldados".

Cautelosamente asomó su cabeza por fuera de los pasillos viendo a dos chicos cuyos nombres no sabía. Quería ir donde Caleb y preguntarle que era esa palabra pero tenía miedo de que esas personas se lo llevaran hacia donde lo tenían antes.
-Bueno, y como les fue ayer en el cine?
-De maravilla..-empezó a decir Elie mientras relataba todo lo ocurrido.- y entonces luego fuimos a com—
-¿Quien es él?- preguntó Francis apuntando hacia el de orbes anaranjadas, quien rápidamente se escondió en la habitación. Caleb se tensó al ver que sus amigos habían descubierto a Oliver.
-E-él..bueno, verán..
-Caleb nos estás asustado..-dijo Francis al ver a su amigo tan nervioso. Caleb suspiro y decidió llamar a Oliver para contarle a sus amigos toda la historia.

-Se que suena irrealista pero es la verdad.- dijo el de orbes verdes. Oliver miraba a Elie y Francis esperando que salieran corriendo pero a diferencia de eso..
-¡Eso es genial!¿¡Tienes un chico que tira fuego?! ¡O por dios siempre quise que algo así me pasara en la vida! No te preocupes Oliver, yo te ayudaré.- Dijo Francis completamente emocionado por la situación. Elie sonrió y tomó las manos de Oliver.
-Tengo que comprarte ropa..
-¿Elie en lo único que piensas es ropa?- dije riéndome por lo absurdo de su respuesta.
-Pues déjame decirte que este chico no tiene ropa y necesita un cambio de look urgente.
-¿Que es un "look"?- preguntó Oliver tímidamente. Todos nos dimos vuelta ante su pregunta y el se encogió un poco más.
-Es tu estilo. Como te reconocen según lo que ocupas. Por ejemplo. A mi me gusta la ropa pastel y oscura y me gusta llevar aros de estrellas.- Oliver miró a Elie y asintió.
-¿Cual es m—..- el sonido del timbre sonó por el departamento interrumpiendo a el de orbes anaranjadas. Caleb se levantó y fue a abrir la puerta dejando que sus amigos respondan las preguntas de Oliver en ese momento.
-entrega para Caleb Morel.- dijo el repartidor. Caleb sonrió y pasó la plata
al mismo tiempo que el repartidor le entregaba la pizza a el castaño. Caleb cerró la puerta y se dispuso a servir la pizza para luego dirigirse donde sus amigos. Le pasó la pizza a Oliver, quien miraba la comida con intriga y curiosidad. El de ojos naranjos probó su pedazo de pizza y en menos de un minuto ya no existía tal pedazo. Miró expectante por más a lo que Caleb le entregó otro pedazo y le pasó un vaso de bebida. Oliver miró con un poco de miedo el vaso, le recordaba a lo que le obligaban tomar en ese horrible lugar. Elie al darse cuenta de la mirada del chico tomó su vaso y tomó el líquido hasta el fondo mostrándole una sonrisa al terminar la bebida. El peli rojizo tomó la suya y dio un pequeño sorbo probando de ese extraño pero exquisito líquido. Sonrió y todos tuvieron un buen almuerzo enseñándole a Oliver nuevas palabras y también como comunicarse.

Luego de un amistoso almuerzo
-¡Eres una monada!- dijo Elie al ver a Oliver con ese pijama
-Elie no es navidad para andarle comprando pijamas de renos.- dijo Francis.
-Pues yo creo que le queda bien y que así cuando sea navidad Caleb se ahorrará 10 euros, ¡aparte míralo!- Oliver sonreía mientras veía el reno en su pijama .
-Bien nos lo llevaremos pero por favor podemos ir a ver las zapatillas? No podemos dejarlo con esos zapatos todos viejos.- Dijo Caleb mientras ayudaba a Oliver a quitarse el pijama. El peli castaño fue a pagar mientras que el resto se dirigía a hacer las últimas compras del día. Oliver se veía bastante curioso ante todas las nuevas tiendas o cosas que encontraba y, no tardaba ningún segundo en apuntar algo a lo que los demás tenían que explicarle que era o para que se usaba. Una ves llegaron a la tienda de zapatos dejaron que Oliver se acercara a lo que más le llamara la atención mientras ellos se sentaban en una banca. El peli rojizo llegó con tres zapatillas a lo que Francis rápidamente tomó y se los llevó a alguien que trabajara ahí intentando adivinar que número calzaba el de orbes anaranjadas.

Pero con los soldados...
-Toca de nuevo.- dijo uno
-Ya te dije que no hay nadie aquí adentro. Solo anota la maldita puerta para que vengamos mañana.- le respondió el otro de mal humor debido al cansancio que tenía. Había entrenado toda su vida y lo mandaban a tocar las puertas de todos los ciudadanos. Justo cuando estaban por irse apareció un vecino.
-¿Disculpe sabe quien vive acá?- él vecino de ya unos cuantos años miró la puerta y sonrió.
-Un joven muy apuesto y amable. Siempre me ayuda con las bolsas de compras.
-¿Nadie más vive con él?- preguntó el soldado de mayor estatura.
-No. Solo aveces trae a sus amigos pero nadie vive con él.
-Muchas gracias por la información.- el señor sonrió y entró en su departamento.
-Tacha la dirección. Tampoco hay nadie aquí con esa maldita cosa. Juro que cuando lo encuentre la estrangularé...- dijo uno de los soldados saliendo de el departamento.

Más tarde...
-Creo que eso es todo.- dijo Francis viendo que el peli rojizo tuviera todos sus útiles personales.
-genial, gracias a ambos por todo.- dijo Caleb agradeciéndole a sus amigos.
-Llámanos si tienes problemas,ok? Y Oliver, no dudes en decirnos si este idiota se porta mal contigo.- dijo Elie.
-¡Oye!..- se quejó el peli castaño.
-¿Se van?- preguntó el de ojos anaranjados.
-Volveremos pronto.- dijo la pareja y se despidieron de ambos chicos. Una ves solos, ya que era tarde, buscaron entre las bolsas un pijama para Oliver y se dirigieron hacia la cama. Caleb dio un vistazo al chico con pecas y sonrió al verlo cabeceando de sueño. Se apresuró en cambiarse y una ves cómodos en la cama apagó las luces.
-Siento lo de tu espejo..- dijo Oliver de repente haciendo que el de orbes verdes soltara una leve carcajada.
-No te preocupes. Siempre puedo comprar otro. De todas formas ese no me gustaba.- término de decir Caleb para voltearse a ver a Oliver.- Hay que dormir...
-Si...