No more pain. [Vkook]

04

—¿Conoces a ese chico, Tae?— Apuntó JiMin en dirección a donde estaban SeokJin y JungKook caminando. 

—No lo conozco, en la fiesta... solo lo confundí con alguien más .

—¿Y por eso te veías tan preocupado?— Arqueó una ceja el mayor de los dos.

—No estaba preocupado, él solo se veía demasiado mal y me dio cosa verlo.— Suspiró.

Si lo estaba, siempre se preocupó por JungKook, solo quería abrazarlo y protegerlo de todo lo malo que le pudiera pasar, que nada en este mucndo de mierda volviera a lastimar a ese pequeño ángel.

—Claro, como tú digas.—JiMin sonrió con falsa inocencia y se encaminó hacia JungKook y Jin bajo la atenta mirada de TaeHyung. —Disculpa, ¿puedes decirme tu nombre?

JungKook pestañeó varias veces ante la pregunta de JiMin, nunca antes había hablado con él, lo había visto y la gente siempre hablaba de él ya que era uno de los "populares". ¿Por qué querría hablar con él?

—Y-yo eh.. soy JungKook.— Murmuró mientras su mirada viajaba inncómoda por todo el pasillo.

JiMin sonrió y palmeó el hombro de JungKook despacio. —Gracias, JungKook.— Volvió con TaeHyung y volvió a sonreír. —Se llama JungKook, ¿no es el mismo nombre que dijiste cuando lo viste en la fiesta de YoonGi?

TaeHyung desvió la mirada y resopló. —Quizás es solo casualidad, JiMin, no lo sé.

Un suspiró volvió a escaparse de sus labios, JiMin no era una persona que se rindiera fácil, le interesaba hasta la más mínima tontería que se le viniera a la cabeza, no importara cuanta cantidad de veces le quisiera explicar algo.

Si algo no le cuadraba, JiMin no iba cesar.

—No es casualidad~ es el mismo chico y el mismo nombre, ¿de dónde lo conoces? quiero sabes, dimelo.— Insistió de nuevo mientras tomaba un brazo de TaeHyung y lo sacudió.

—Otro día te lo diré— Casi gritó el pelirrojo y quitó su brazo del agarre de JiMin. —Deja de insistir, luego voy a contarte todo ¿si?

TaeHyung realmente odiaba habar sobre temas relacionados con su mejor amigo de la infancia, lo ponían demasiado mal, hacía que se le viniera a la cabeza todas esas veces en la que el pequeño le contaba entre lágrimas y sollozos todo lo que le había pasado, le rompía el corazón el solo recordarlo.

———

—JungKookie, ya estoy en casa.

Al más pequeño sonrió al oír esa voz, su hermano ya había vuelto de la escuela, lo había esperado toda la tarde para que ambos pudieran comer caramelos y ver dibujos animados como hacían todas las tardes.

—Estoy aquí, hyung.— Murmuró el pequeño desde la cocina, en sus pequeñas manos tenía uno de los peluches que le había regalado su mejor amigo y estaba tratando de alcanzar su leche de banana.

—Sabes, pequeño, hyung te extrañó mucho mientras estaba afuera.— Una sonrisa surcó sus labios mientras veía las bonitas piernas de su hermano pequeño.

JungKook sonrió con demasiada inocencia sin notar la mirada de su hyung. —También te extrañé mucho, hyung.

YoungSoo se acercó a su hermano, colocando sus manos sobre las delicadas caderas del más pequeño, acarició la suave piel por encima de la tela de su larga camiseta.

—Te ves demasiado lindo hoy, pequeño.

Un tierno sonrojo se coloreó en las esponjosas mejillas de JungKook, realmente le avergonzaba cada vez que alguien le decía algo bonito, pero en estos momentos, era demasiado inocente como para ves segundas intenciones en las acciones de su hermano.

—No es verdad, hyung, me veo igual que siempre.

—No, hoy te ves especial, pequeño, tan... dulce.

Acercó su nariz al sensible y pálido cuello de JungKook y pasó su lengua por este, causando un pequeño chillido y un escalofrío en el niño de solo nueve años.

[...]

—Hyung... ¿q-qué haces?— Tartamudeó el pequeño, sus manos en el pecho de su hermano, tratando de alejarlo, no le gustaba que lo tocara así, le era incómodo.

—Relajate, bebé, no va a dolerte si colaboras.— Susurró en su oído antes de arrancar toda la ropa del pequeño y frágil cuerpo, iba a hacer lo que tanto estuvo esperando.