Frente a ti - Shaun x Hyoga

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La parte difícil finalmente la había superado, ahora sólo seguía la segunda fase, preparar todo para una cena en la playa.
Ella no tenía experiencia ni idea de como organizar algo de tal magnitud, su hermano menos lo sabía, él ni siquiera tenía novia o al menos nunca le conoció alguna en todo lo que llevaban de convivir juntos.

— Veamos, espero que ideas en cinco minutos pueda ayudarme.

La chica había comprado varias revistas con ideas prácticas para cenas en la playa, descargado varias recomendaciones en internet y hasta consultado blogs en línea para outfits para la ocasión, todo debía ser perfecto. Jamás se había sentido tan presionada, ni siquiera cuando obtuvo la armadura de Andrómeda tuvo tanta presión; ahora que enfrentaba está situación se dió cuenta que cualquier cosa daba menos presión que ésto.
Las horas pasaban y ella no tenía idea de por dónde empezar, ni siquiera había terminado de elegir lo que quería y tampoco había ido de compras.

— maldición... ¿¡Por qué tiene que ser tan difícil!? Vamos, ya pelee contra los caballeros negros ¿Por qué se me dificulta organizar una simple cena en la playa?

Exclamó con desesperación y angustia, parecía una pequeña haciendo una rabieta por no poder hacer las cosas a la primera.

— veo que mi adorable hermana menor tiene problemas

Una voz masculina que ella conocía a la perfección la sacó de sus pensamientos, miró hacia la puerta de su departamento y vió a su hermano mayor asomarse por la puerta, parecía bastante serio, aunque él siempre tenía una expresión seria en el rostro.

— hermano, que agradable sorpresa, pasa ¿Qué te trae por aquí?

La chica dejó su desastre en la mesita de café y se levantó para recibir a su hermano mayor, hace tiempo que no lo veía, era extraño verlo pero a la vez era reconfortante ver un rostro familiar.

— sólo pasaba a atender unos asuntos hasta que oí tus gritos, ¿Todo en orden? ¿De nuevo te molestaron?

Ikki pasó al departamento y miró de reojo la cantidad de papeles y revistas que había en la mesita de café, quizá no sabía nada de mujeres, pero entendió rápidamente que su hermana tenía problemas con un asunto relacionado al corazón.

— Es amable de tu parte hermano, pero ya no soy una niña para que me cuides, puedo defenderme yo sola

Ante sus propias palabras, la chica alzó sus puños y sonrió ampliamente para darle a entender a su hermano que ya era grande y no necesitaba que viniera en su rescate las 24 horas.

— Sí, lo olvidaba, ya eres toda una mujer.

Desvió la mirada, no por vergüenza, sino porque al verla podía ver a Esmeralda y eso para él era una patada directo al corazón, aún le dolía su perdida a pesar de los años, pero jamás se atrevería a reemplazarla o compararla con su hermana; Esmeralda no tiene comparación con nadie, por mucho que aprecie a su hermana, pero su difunta amada es incluso más importante. Este gesto Shaun lo notó con preocupación buscó la mirada del mayor.

— ¿Estás bien Ikki? ¿Te sientes mal?

Preguntó ella con preocupación; jamás iba a entender la magnitud de la carga emocional que su hermano mayor cargaba sobre sus hombros, jamás lo iba a comprender.

— Sí, es sólo cansancio, mejor dime ¿Qué es todo eso? ¿Investigación sobre el santuario?

Le preguntó al señalar la mesita que traía encima varios libros de revistas, algunos de modas y otros de ideas para cenas.

— oh, eso... Hermano, creo que eres el único al que puedo confiarte esto, pero primero vamos a sentarnos

Las mejillas de la muchacha se tornaron de un tono rosado que era bastante evidente debido a la palidez de su piel, realmente se veía linda así de sonrojada.