Frente a ti - Shaun x Hyoga

01

— ¿¡Hablas enserio!?

Exclamó Ikki con gran sorpresa, enfado y celos, pero no celos románticos; pensar en su hermana de esa manera era repulsivo, (por no decir que vomitivo y enfermo), eran celos de un hermano sobreprotector.
No podía creer lo que ella le había dicho, tenía que estar en la dimensión desconocida o quizá ahora mismo estaban en guerra y se había golpeado fuerte en la cabeza.

— Es verdad hermano, le pedí una cita a Hyoga y pienso declararle mis sentimientos en la playa está noche

Respondió ella llevando sus manos a sus mejillas al sentir un leve ardor en ellas, todo era demasiado nuevo, nuevas sensaciones que había descubierto en la guerra como caballeros la invadían, un doloroso y hermoso sentimiento que dolía en su pecho, era amor, de eso no había dudas.

— Shaun, ni siquiera lo conoces bien, es un completo extraño; quizá conviviíste con él en el torneo galáctico, pero ahora no hay torneo, no hay enemigos que enfrentar, no hay santuario, no hay nada. Él es un completo extraño fuera de toda la aventura que viviste.

— Hermano, yo sé que no lo conozco bien, sé que arriesgo mucho y créeme que no había tenido tanto miedo desde que era una niña, ¿Recuerdas? Yo siempre tenía miedo cuando los niños me molestaban, pero tú siempre estuviste allí cuando más vulnerable me sentía, por eso hermano, necesito tu apoyo una vez más

La chica colocó su cabeza en el hombro del mayor y cerró los ojos, una sonrisa se dibujó en su rostro, estar cerca de su hermano mayor le daba la tranquilidad y la confianza que ahora mismo le faltaba.

Ikki meditó sus palabras un rato, no se movió de su lugar para no molestarla, se veía cómoda en esa posición; esto iba a ser difícil, tal vez así se sentía un padre cuando tiene que entregar a su hija en el altar, entregar su cuidado a un completo extraño iba a ser lo más difícil que haría, pero aunque le doliera sabía que era algo que Shaun debía enfrentar, sólo ella sabrá si fue la decisión correcta o no.

— De acuerdo, te voy a apoyar Shaun, te ayudaré con todo lo que necesites y tú sólo debes preocuparte por verte presentable, pero si algo pasa no dudes en llamarme y estaré ahí antes de que tus lágrimas caigan.

En respuesta ella se incorporó y abrazó efusivamente al mayor, mientras que pequeñas lágrimas traicioneras caían por sus mejillas, era lo más dulce que pudo haber escuchado de su siempre rudo y fuerte hermano mayor.

— Ikki, muchas gracias hermano

— Tranquila, mírate, ya empezaste a llorar y no has siquiera salido por esa puerta; ve a lavarte la cara pequeña llorona, yo me encargo de todo esto por ti.

El mayor separó al la chica de su cuerpo y limpió gentilmente sus lágrimas con sus pulgares, Shaun asintió y rápidamente fue al baño a limpiar su cara y preparar su ropa.
Al ver a su hermana fuera de su campo de visión, sacó su teléfono y buscó entre sus contactos un número específico para mandar un pequeño mensaje de texto, Ikki también le tenía una sorpresa a su hermana menor y prometía dejarla sin habla.