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— H-Hyoga...

Había llegado el momento, era ahora o nunca; se aferró al cuerpo más grande sintiendo el calor corporal del contrario y oír los suaves latidos de su corazón, era como oír una hermosa canción de cuna.

— Hyoga, yo te amo, desde que nos conocimos no dejé de pensar en ti. Sé que no nos conocemos fuera del campo de batalla, pero quiero conocerte, y que me conozcas tú también así que... ¿Qué dices?

Sonrojada alzó la mirada hacia él, estando su respuesta con ansias.

— Hmp... jajajajajajajajaja

Pero en respuesta recibió una risa, una risa nerviosa, parecía una risa de burla mal intencionada; está reacción dejó a la chica confundida.

— ¿Hyoga?

¿Había sido un error? ¿Estaba mal interpretando las cosas? No entendía que le parecía tan divertido, le estaba confesando sus sentimientos Y él respondía así.

— ¿Enserio pensaste que algo entre nosotros podría suceder? ¡Despierta niña!

Se separó bruscamente de su cuerpo y cruzó los brazos mirando con gran desprecio a la chica que ahora lo miraba en estado de shock, está reacción lo divertía, así que prosiguió con su respuesta.

— Entiende niña, yo preferiría unirme a Odín y morir a manos del santuario por traición que estar unido a una plana horrenda como tú...

— H-Hyoga... ¿Q-Qué quieres decir?

Ella retrocedió lentamente tratando de alejarse, de entender sus palabras tan crueles y frías, no entendía nada, no entendía que pasaba.

— ¿Estás sorda? Te dije que nunca, ni aunque Hades me toruture en el Yomutsu estaría contigo, así que... Mejor desaparece de mi vidas ahora mismo, y de ser posible de mi vida, o te juro que te encerrare en ub ataúd de hielo aquí mismo, y a ver si tu hermano te salva en una sola pieza.
Oh, se me olvidó, la señorita es independiente, entonces me gustaría ver como te sale tú solita

Las lágrimas comenzaron a brotar de sus ojos, un nudo en la garganta le impedía hablar, estaba enojada, se sentía humillada por el hombre que tanto amaba.

A medida que avanzaba ella tropezó, cayó al agua, su pulcro vestido ahora estaba mojado y lleno de arena, su maquillaje ahora era un asco y su dignidad se la había llevado el océano.

— ¡Hermano!

Exclamó ella con desesperación, ahora mismo sólo quería desaparecer de la faz de la tierra.
Y en menos de lo que pensó su hermano entró en escena, Shaun entre lágrimas corrió a sus brazos y lloró, lloró como nunca lo había hecho.
Él miró con furia al ruso, pero esté no se inmutó.

Ikki abrazó a su hermana y acarició sus cabellos con suavidad, no necesitaba entender que pasó, lo había oído todo, sólo se limitó a abrazarla sin importar que se estuviera mojando también.

— tranquila Shaun,

— Ikki, quiero ir a casa

— mi pobre hermana, si tan sólo hubiera alguien aquí que realmente te ame

— ¿Qué?

Ella se separó de su hermano, miró a su hermano y notó que él en lugar de mostrarse dulce y comprensivo se veía sonriendo de manera muy cínica.

— hermanito ¿Por qué tú...?

— soy Ikki para ti y tú no eres mi hermana, él es mi verdadero hermano

Detrás de él apareció un chico ligeramente parecido a ella, esté se veía confundido por lo que pasaba al igual que ella.

— yo, no entiendo, ¿Quién es él hermano?

— hermano ¿Quién es ella?

A eso, Hyoga se acercó al chico y lo abrazó por la cintura para posteriormente besar su mejilla.

— él es Shun, mi novio y el hermano menor de Ikki, el verdadero, impostora.

Al no poder soportar más la desgarradora escena corrió lejos de ellos, alejándose y perdiéndose en la obscuridad de la noche, estaba demasiado mojada, sucia y humillada como para quedarse a ver a las dos personas que tanto amó traicionarla de esa forma.

— hermano, Hyoga ¿Quién era ella? ¿Está bien que la dejen irse sola a casa?

— Tranquilo conejito, ella puede sola

— no te preocupes por nada hermanito, vamos a continuar con su cita, tal y como debió ser desde un principio.

Frente a ti - Shaun x HyogaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora