You steal my breath [Matsuoka Rin]

Parte 2

Hola a todos. Hace mucho tiempo que no escribía algo ¡Lo siento! Bueno quería informarles que esta historia (al igual que todos los OneShot de Free que he escrito) tendrá 4 partes, eso quiere decir que nos quedan 2 más. Espero les guste los que les dejo hoy. Nos vemos pronto. Cualquier comentario es siempre bienvenido.

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(1)Tú nombre.

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- ¡Lo siento! -Dije de pronto al ver la hora en mi reloj de pulsera -Debo irme, mi madre ya debió darse cuenta de que escapé de casa.

- ¿Escapar? ¿Por qué? -preguntó el chico extrañado.

-Es una larga explicación. Gracias por la bebida -dije antes de salir corriendo a toda velocidad.

Y así fue como pasaron las cosas; mi madre se había percatado de mi ausencia, cuando llegué me esperaba en la puerta de la casa con su cara de "estas castigada por el resto del mes" pero aquel día no me importó su castigo, más bien... fue la primera vez que me sentía feliz.

Los días pasaron y luego de la escuela debía estar encerrada en casa, a pesar de que mi madre no se encontraba seguía las reglas, no quería tener más problemas. Pero un día alguien tambaleo mis reglaras.

Mientras caminaba de regreso a casa escuche una risa familiar. Al observar en aquella dirección pude divisar a dos estudiantes, con uniformes blancos. Supe enseguida que eran de Samezuka y quedé pasmada cuando vi al pelirrojo sonriendo con sus dientes afilados.

Estábamos a menos de 10 metros cuando Rin me divisó, se detuvo y sonrió, luego le habló a su acompañante y caminaron hacia mí.

Junto al pelirrojo había un chico de cabello oscuro y ojos turquesa, quien siguió su camino al llegar a mi lado. Rin soltó su nombre antes de que él se alejara, le dijo que lo vería en el instituto.

- ¡Oh, (1) -chan! -Dijo Rin al llegar a mi lado -Tanto tiempo.

-S-sí -respondí nerviosa -No me dijiste que estabas en un instituto tan famoso.

-Y tú no me dijiste que asistías a un instituto de chicas -dijo al observar mi uniforme.

Ambos nos miramos unos segundos y reímos.

-Bueno, no hablamos de eso aquel día ¿verdad? -dije en cuando pude detener mi risa.

-Verdad, solo hablamos de correr.

-Sí -y al decir aquello sentí que ya no tenía más temas de conversación.

-Ahora entiendo aquello de "escaparse de casa"...

-Ah, eso... -sentí un poco de vergüenza que recordará aquello -bueno mi madre me castigó por escaparme a correr. -De pronto miré la hora otra vez - ¡Debería estar en 10 minutos en casa! ¡Dios, otra vez tendré problemas! -dije alarmada.

-No te preocupes -dijo Rin llevándose su mano hasta el cabello. -te acompaño a casa y hablamos por el trayecto.

- ¿Eh? -aquello me sorprendió - ¿De verdad? No quiero molestar...

-No molestas -dijo con un tono sin importancia. -Vamos.

Al llegar a casa pude comprobar que mi madre aun no llegaba, así que invite a Rin a entrar, sabiendo que no debía invitar a nadie a casa y menos a chicos. Le ofrecí algo para beber mientras charlábamos y el sol poco a poco empezó a esconderse. De pronto el teléfono comenzó a sonar, le hice una señal a Rin de que guardara silencio mientras respondía y cuando tome el auricular ya sabía de quien se trataba.