Un nuevo verano (billper)

Cap. 5

Narra Dipper
Bill rápidamente se separó, volteando a ver a mi hermana, la cual estaba parada en la puerta.

Yo estaba muy sonrojado ¡casi beso a Bill! ¡A Bill! Quien casi me mata a mi y a toda mi familia.

-¡LO SIENTO!-

Grito Mabel antes se cerrar con un portazo y salir corriendo.

Mire a Bill, quien estaba tan shokeado como yo.
Hubo un silencio muy largo y pesado.

-...Pino... por lo de antes... yo... lo siento...-

-no tienes porque disculparte... pero... no lo vuelvas a hacer...¿si?...-

Eso era lo que decía pero por dentro estaba muriendo, Bill es hetero, no debería estar jugando conmigo así.

-me tengo que ir ya...-

-es-está bien... buenas noches...-

Bill se retiró. En realidad no quería que se fuera, no quería quedarme solo...

Me puse el pijama y ya casi estaba listo para dormir.

Pero justo cuando iba a apagar la luz, alguien tocó mi puerta.

-¿qué pasa Pacifica? Ya estaba por irme a dormir...-

Me fijé que ella también traía pijama.

-¿qué le pasó a Bill?-

Se le notaba muy seria. Me puse nervioso ¿que habrá visto o escuchando?

-¿p-por que preguntas?-

-lo vi pasar a su habitación con la cara que pone solo cuando o piensa en ti o cuando te fuiste, nunca pasa nada bueno cuando pone esa cara. Ahora te repito ¿que fue lo qué pasó?-

Le expliqué todo a Pacifica. Ella pareció entender.

-¿te gusta Bill?-

Cuando escuche esa pregunta se me pusieron los pelos de punta, ya que me venia cuestionando eso desde que me fui.

-yo...am... no lo sé...-

-¿aún te lo cuestionas?-

-...-

-Dip, te diré algo. Estos últimos dos años Bill se los pasó pensando en ti, en verdad esta muy enamorado... y yo me encariñe mucho con el, lo quiero muchísimo, no quiero que sufra, ni tampoco tu... te voy a pedir que lo pienses bien ¿si?-

-...ok...-

Si que maduro mucho, ya no era la niñita caprichosa de hace años.

-me voy. Descansa Dip-

-bye-

Intente toda la noche dormir, pero no pude cerrar un ojo.

Más o menos a las siete decidí levantarme.

Me puse unos jeans y un poleron holgado.

A las ocho en punto ya estaba en el comedor. Me di cuenta de que Bill no estaba, mire a Pacifica y ella solo se encogió de hombros.

Todos terminamos de comer.

Me acerqué a Pacifica, y le pregunté susurrando.

-¿y Bill?-

-te dije que no pasaría nada bueno. Se encerró en su cuarto y se niega a salir o dejarme entrar-

Un sentimiento de culpa se apoderó de mi y no entendía porque.

-llévame con el-

Seguí a Pacifica por la mansión. Hasta que llegamos a una puerta más grande que todas las demás.