Peeta regresa y conversamos un poco, sobre algunas cosas sin sentido, aunque despues se vuelve un silencio algo incomodo, y eso es lo que hacemos solo quedarnos en silencio escuchando nuestras respiraciones, mirandonos...
-sabes...-su voz vuelve a distrerme de mis pensamientos-se supone que estamos locamente enamorados así que puedes besarme en cuanto quieras...-vaciló un poco pero no se como pero llego a sus cálidos labios recordando aquellos momentos... Me separo de el y lo miro a los ojos, sin decir nada, pienso en los juegos, en aquellos momentos donde solo nos teníamos el uno al otro. Ya no hay sangre ni terror ahi esta Peeta conmigo, y aqui esta ahora, y creo que el estara conmigo...
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Lo que no se conto en sinsajo (los juegos del hambre)
Novela JuvenilLa vida de Peeta y katniss antes del epilogo.