¡Oh My Esmeraldina!

Capítulo 5 "Qué comience el Bodorrio"

[El destino es tiempo, esperemos a que ocurra... Pero mejor hay que cocinar cupcakes]

Esmeraldina: ¡AHHHHH!– Corrí gritando por todo el pasillo del segundo piso. Entré a mi habitación y me tumbé en mi cama. Maya se acercó a lado mío y se recostó en mi espalda.

Esmeraldina: ¡Maya! Dios...– me levanté y me senté en la orilla de la cama. – ¡Otra vez siento el amor!– grité emocionada y me levanté de la cama.

Esmeraldina: Es que Maya... Hubieras visto, Alejandro es tan lindo– cierro mis ojos y me imagino esa sonrisa tan hermosa.

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Llegamos a nuestra habitación que se encontraba en la otra sección del castillo. Tuvimos que cruzar todo el jardín principal para llegar a ella. Al entrar, se encuentra en closet del lado derecho y del izquierdo estaba el baño. Había una cama "Queen Size", en frente de la cama estaba un escritorio gigante, la televisión y un pequeño refrigerador con refresco, vinos, jugos y uno que otro chocolate. Tenía un balcón, se veía todo el jardín principal. En la misma habitación a lado del closet estaba otra puerta que estaba conectado al cuarto de mi hermano Antonio.

Alejandro: Esto es tan exitante– me lancé hacia la cama.

Antonio: Nos hacían falta unas pequeñas vacaciones– se sienta arriba de mi– Pero bueno...– se levanté y se dirige hacia la puerta que está dentro de la habitación– Iré a tomar un baño en la tina y después te veré en la fiesta, Cámara te la lavas– entra a su habitación.

Me levanté y me senté en la orilla de la cama.

Alejandro: La princesa es demasiado linda, sentía una atracción. Por primera vez me gustaba alguien (Ya qué mi tío me presentaba siempre a diferentes chicas fueran las vecinas o amigas de la tía del abuelo del vecino del amigo del primo...). Sentía mucho amor hacia Esmeraldina.

Me levanté de la cama y me dirigí hacia al baño para bañarme, la fiesta comenzaría en unas horas y tenía que estar listo.

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*Toc toc*

Esmeraldina: Si eres un ratero, no pases.

Gordella: ¡AMIKAAAA!– corre hacia mí y me abraza.

Esmeraldina: ¡Te tengo una noticia super mega increíbleeeee!– pongo mis manos debajo de la barbilla.

Gordella: ¿Llegaron unos guapos panaderos y te gustó uno?

Esmeraldina:–fruncí el ceño– ¿Cómo supiste eso?

Gordella: Acabó de ver a uno de ellos, uno con un lunar negro en la barbilla– me enseña la foto que le tomó.

Esmeraldina: ¡Qué acosadora!– le doy un empujón en su hombro.

Gordella: Bueno amiga, vamos a ponernos guapas.

Más tarde...

Esmeraldina: Ya estoy lista– fuí mirarme en el espejo, llevaba puesto mi vestido con crinolina blanco, tenía salpicadura de pintura de todos los colores por todo el vestido (PERO, cada salpicadura llevaba un set de luces LED. Entonces, brillaba bien intenso). Gracias a que el vestido era largo, me puse unos tenis blancos (también la suela del zapato brillaba de diferentes colores).

Llevaba el pelo suelto y rizado. Y por último, llevaba un broche de una corona dorada por la parte derecha de mi cabeza.

Gordella: Te ves hermosa– me toma de la mano y me da una vuelta.

Esmeraldina: Gracias, tú igual te ves muy linda. Con vestido de textura de cupcake.
– respondí y me dirigí hacia la puerta de mi habitación–.