Problemas De Familia

4 años

–– Pie de Limón, cortesía de la casa ––dijo Kyle mientras dejaba un plato con un trozo de pie de limon frente a Isabela quien lo habia mirado confundida––, por salvar a Hiro ––fue la simple respuesta que Kyle le habia dado antes de alejarse.

La de pelo negro quedo mirando unos segundos el trozo de pie de limon que estaba en su plato, sabía que debía estar delicioso, porque hasta los mismos Rivera habían confirmado que Kyle cocinaba genial y para que un Rivera dijera que otra comida era deliciosa costaba, pero el problema es simple... se veia demasiado dulce que le daban arcadas de sólo pensar en llevar un trozo a su boca.

No es su culpa, solo que tuvo los niveles de azucar elevados a un punto peligroso solo por una barra de chocolate pequeña cuando tenía 4 años. Desde entonces su instinto de supervivencia catálogo todo lo que tuviera un sabor dulce como peligroso, sabe que no es así, desde que comenzo con el tratamiento ha superado gran parte de todo eso, pero inconscientemente sigue pensando que los postres y dulces son armas mortales contra su salud.

–– Tranquila ––dijo Marco, que estaba sentado frente a ella, con un pastel de chocolate amargo a medio comer––, es mas acido que dulce.

Isabela asiente y come un pedazo, no es de su gustó, la masa es muy dulce y al mezclarla con el relleno que es tanto acido como dulce provoca que no pueda tragar el primer pedazo que llevo a su boca. Era demasiado dulce y no soportaba lo dulce.

–– Esta rico ––dijo, tenia que admitir que aunque odiara lo dulce el postre estaba rico, tenia una buena textura––, aunque prefiero el pastel de zanahoria.

–– Es el unico postre que comes _–fue la respuesta de Marco mientras que veia como su amiga llevaba otro trozo a su boca––, no es necesario que comas si no quieres.

–– ¿Es broma? Esto lo cocino el futuro esposo de mi amigo, no quiero ser descortés o no podre ser la madrina para su boda.

–– Eso no pasara.

–– ¿Que? ¡Escucha Marco Rivera! El pacto que hicimos a los 7 sigue valido y hace unos días fue legalizado ante una corte, seré la madrina en tu boda y tu el padrino en mi boda.

–– Estoy en desventaja, tu no quieres casarte, exijo una cita en la corte con mis abogados presentes.

–– Apenas tengo 21 años, espera un poco, quizás algún dia me case ––fue la respuesta que dio a lo que Marco la miro unos segundos––, ¿Pasa algo?

–– Me estas ocultando información... No me digas que... ¿Te gusta alguien? ––pregunto con una sonrisa a lo que Isabela nego.

–– ¿Cómo? Apenas y tengo vida social, ademas mi grupo social es basado en puros pendejos ciegos, homosexuales y buenos para cantar.

–– Siento que eso tiene una indirecta.

–– ¿Tu lo crees Rivera? ––dijo sonriendo al ver que le quedaba solo un pedazo––, aún recuerdo cuando te gustaba ese chico, pero lo negabas todo el tiempo... dos años después y andaban acaramelados en la calle, aunque, tengo que admitir, eran una linda pareja.

–– Gracias por recordar el pasado y abrir la herida ––dijo dramáticamente llevando una mano a su pecho para después reir–– Terminamos a los 18, no pudimos con la distancia, pero quedamos en buenos términos.

–– 3 años de pareja... ¿Lo hicieron? ––pregunto, quería ponerse al corriente de todo lo que se habia perdido mientras estaba en Inglaterra.

–– Si ––fue la corta respuesta de un sonrojado Marco a lo que Isabela río.

–– Asi que Marquito tiene vergüenza, que interesante... Marco... ¿Que hora es?

–– Van a ser las 11.