La Teoría Del Primer Amor

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–– Isa, tengo que contarte algo importante ––habían sido las palabras que escucho por la mañana, aunque no tenia ganas de siquiera pararse para responder la llamada, asi que dejo que la grabadora siguiera reproduciendo los mensajes perdidos––, contesta por favor, esto es algo que te afecta a ti más que a mi ––Isa no lo creía, habian pocas cosas que llegaran a afectarle de una forma significativa, la mayoria estaban relacionadas con su trabajo o su família, pero Cecile no tenia nada que ver con esos ambitos por lo que tal vez se refería a otra cosa–– ¡Justo hoy se te da por no responder! Bien, entonces te lo dire por aca y más vale que después me devuelves la llamada ––así que Cecile se enojo, tal vez si era algo importante–– ¿Recuerdas el programa de investigación que fundaste en el hospital de San Fransokyo? ––claro que lo recordaba, fue la segunda razón por la que tuvo que irse de Santa Cecilia––, el hospital acaba de informarnos que no te seguirá esperando, escogieron a alguien más para hacerse cargo, el problema es la persona que esta al mando, ¿Recuerdas a la practicante que por negligencia medica mató a tu herm...?

Apaga su telefono cortando el mensaje de voz, se queda unos segundos parada, temblando y apretando el teléfono con fuerza. ¿Lo que acababa de oír era cierto? ¿Escogieron a esa persona para liderar el programa de investigación que ella misma habia hecho?

El programa en el que trabajo desde los 18... en estos momentos era liderado por la persona que más odiaba en el mundo. La vida si que llegaba a ser irónicamente cruel en algunos momentos.

Deja el celular en la cama para después dejarse caer igual, hoy era su dia libre y prefería hacer algo más que estar pensando una y otra vez en lo que acababa de pasar. Aunque era algo difícil, tomando en cuenta de que Marco estaba trabajando y que Miguel estaba en alguna parte perdido con Hiro, además de que no conocia a nadie de la ciudad además de Karmi quien lo más seguro es que estaria hablando sin parar de los logros de Isa, entre ellos estaria incluido el programa de investigación.

En otras ocasiones hablaría con Cecile, pero ella parecia estar más molesta de lo normal, lo que significaba de que ni Kubo o Hiroshi estarían del mejor humor en este momento, no estaba de ánimos para lidiar con eso. Asi que sin ningun amigo disponible y sin poder concentrarse en un nuevo proyecto para la Universidad, dejo su teléfono olvidado en su cama para despues salir a caminar un rato.

Dio unas cuantas vueltas por el parque, aunque tuvo que irse antes por ciertos problemas, los cuales consistían en dueños enojados porque sus mascotas no dejaban de seguirla, aunque no era su culpa el llevarse tan bien con los animales... o niños, aun recuerda que a los 16 cuando iba a la biblioteca publica algunas niñas de 8 la arrastraban para que les leyera algún libro, ¿O eran de 6? La verdad no recuerda bien.

Aunque a ella no le gustaba el estar tan rodeada de niños o bebes, o de ningún grupo de personas en general. Generalmente le daban ataques de pánico en esa epoca, incluso Cecile llego a decirle que tal vez tenia un trastorno social, pero jamas le tomó mucha importancia.

Los planes para irse del parque fallan cuando comienzan a caer las primeras gotas de agua, las cuales fueron seguidas por cada vez mas gotas, como no llevaba paraguas tuvo que refugiarse debajo de uno de los arboles hasta que parara todo.

–– Genial, lo que faltaba para que fuera un gran día ––dijo con algo de sarcasmo mientras que suspira, ahora el pensamiento de que esa mujer esta al mando de su programa de investigación esta cada vez mas claro en su cabeza.

Y comienza a darle otro ataque de ansiedad para empeorar más el momento. Comienza a contar hasta 10, despues hasta 20, 30, 40, 50... 100.

Y aun así no lograba calmarse.

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