La ironía de la vida, quiso que el joven Lan SiZhui solo despertara hasta la hora del almuerzo, la problemática hora del almuerzo; lo primero que vio al despertar, fue la blanca cortina que separaba las camillas de la enfermería, todas iguales a donde él se encontraba, y lo primero que escucho fue la energética voz de su primo JingYi, que era acompañada en menor medida de una voz desconocida, una muy baja y tímida.
Trató de incorporarse de inmediato, logrando con ello solamente tirar de manera accidental algunos instrumentos de la mesilla al lado de la camilla, el ruido ocasionado pareció alertar a las voces detrás de la cortina, pues inmediatamente la vio abrirse de un tiron.
"¡¡Estas despierto!! Realmente estaba preocupado por ti, luces mucho mejor ahora, ya es hora de almorzar, traje tu almuerzo, puedes comer aquí, Wen Ning hushi nos dio permiso, así que come". Entro rápida y energéticamente su primo, hablando casi sin tomar respiración alguna, apenas dando tiempo a que su adormecido cerebro procesara cada oración.
Solo entonces SiZhui se volvió a ver al hombre que estaba a su lado cogiendo los instrumentos caidos, suponia que era Wen Ning hushi, recordaba vagamente que fue quien lo atendió al llegar, pero gracias a las circunstancias, y al sedante, no pudo presentarse debidamente en ese momento.
"¿Cómo se siente segundo joven maestro Lan?". Dijo el hombre mientras revisaba sus signos vitales diligentemente.
"Ahora me encuentro bien Wen hushi, solo necesitaba descansar un poco, eso es todo, pero por favor, llámeme solo SiZhui, segundo joven maestro es un poco vergonzoso". Pidió amablemte con un poco de dificultad, su garganta estaba muy seca.
"Es inútil SiZhui, llevo toda la mañana intentando que deje de hacerlo, lo único que he conseguido es pasar de ser ser llamado, primer joven maestro Lan, a joven Lan, ¿puedes creerlo?". Intervino JingYi con un tono derrotado mientras le pasaba un vaso de agua a su primo.
"Lo siento mucho jóvenes maestros, pero realmente no puedo". Dijo apenado el hombre, quien parecía rehuir decididamente a mirar los ojos de los chicos.
"No importa, no importa, pero ¿podría al menos ser joven SiZhui?, si ambos somo llamados joven Lan, sería algo confuso". Pidió conciliadoramente esperanzado.
"Entiendo, así será joven ma.., joven SiZhui". Se corrigió el hombre con una pequeña sonrisa.
"¡¡Eso es injusto!!, ¡¡favoritismo!!, ¡¡esto es claramente favoritismo!!, ¿cómo es que SiZhui es joven SiZhui, pero yo soy joven Lan?". Exclamó un indignado JingYi
"¡¡No es así, lo juro!!, realmente lo lamento primer.., quiero decir.., yo.., ¡joven JingYi!". Logró decir finalmente el hombre mientra cubría su rostro rojo de vergüenza.
JingYi estaba atónito, no creía que lo lograría con un simple puchero, peor no podía estar más feliz; mientras su primo celebraba su triunfo personal, dando brinquitos al rededor del avergonzado hombre, SiZhui no pudo evitar sentirse decaído al recordar los eventos de la mañana, ¿ahora mismo Jin Ling estaría en su cita?.
Realmente no entendía porque se sentía tan incomodo al respecto, tal vez estaba triste de ver la posibilidad de ser grandes amigos alejarse, tal vez estaba reacio a la idea de madurar de esa manera, donde las chicas serian su prioridad, no lo sabía, realmente no lo entendía.
En la azotea del colegio, los jóvenes Jin Ling y A-Qing tenían una acostumbrada reunión estratégica durante su almuerzo. "Que fastidio, apenas y pude deshacerme de ellos en la mañana". Dijo molesto el joven.
"Debes ser precavido, he estado recabando información, pero hasta ahora todo está limpio, parece que ningún estudiante tiene ni la más mínima mala impresión de ellos y por ello les tienen gran estima". Comentó la joven meditativa antes de vacilar un poco.
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De errores y cosas no dichas
Fiksi PenggemarLan SiZhui esperaba un año ajetreado como nuevo presidente del Consejo estudiantil, pero definitivamente, no estaba preparado para todos los problemas que desataria la llegada de un nuevo alumno, que era especialmente altivo y difícil de tratar o en...