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—TaeHyung, ¿me estás escuchando?—la voz de Irene lo regresó de su transe.

El rubio subió rápido la mirada, prestando atención a la castaña quien parecía algo molesta a su falta.

—¿Eh? Oh no. Disculpa ¿Qué decías?...— dio una sonrisa apenada.

—Has estado muy distraído desde anoche.

TaeHyung sólo se quedó callado.

—Y ni siquiera me has dicho quién era ese chico. Lucía bastante triste y enojado, además te llamó idiota, ¿le hiciste algo?— preguntó mirando atentamente al rubio quien seguía en silencio.

¿Qué si sentía culpa? Uh, claro que sí y mucha. Aunque no parecía, aún se repetían las imágenes de JungKook llorando en su cabeza y el dolor en su pecho aparecer al recordar el sonido sus sollozos.

—No quiero hablar de eso...— dio un sorbido a su café.

—Está bien, pero al menos dime quién era, Tae.—insistió la chica.

—¿Para qué quieres saberlo?

—Curiosidad. Además, se veía que tú igual estabas afectado...

El rubio suspiró, se sentía mal. Nunca le gustó hacer llorar a las personas, y muchísimo menos al azabache. Pero sabía que hizo lo correcto, no podía seguir mintiéndole a JungKook, no más.

Ya no estaba seguro de sus sentimientos al azabache.

Cuando su fama comenzó a crecer ya no podía estar con JungKook como antes, no tenía tiempo porque con la fama el trabajo igualmente aumentó casi el doble, había dejado de llamarle y mandarle mensajes. Ya no podía salir con él a sus citas, más de una vez lo había dejado plantado.

Cuando aquello ocurría se disculpaba casi al instante, a veces en cortas llamadas telefónicas y otras en mensajes. Al principio a él igual le dolía mucho no poder pasarla con el menor, de pensarlo triste también. Lo extrañaba tanto...

Se concentró más en su trabajo, eso lo distraída de su tristeza por no poder estar con su novio. Con el tiempo... había cambiado algo en él.

A veces ni se llegaba a acordar del menor, y tal vez era normal por estar tan ocupado.

Hasta que conoció a la chica que estaba enfrente de él en ese instante. La conoció en una de sus premiaciones, al ayudarla porque se tropezó en uno de los escalones del escenario.

Irene le había parecido muy bonita y tierna. Desde ese entonces no podía sacársela de en mente, había caído, y se sentía culpable porque tenía novio.

¿Cómo le diría a JungKook que se había enamorado de alguien más?

Nunca encontró las palabras ni el momento para decirle que a todas las demás citas que planeaba el azabche nunca llegó por estar con ella. No tenía el valor, y muchas veces se maldijo por ser tan cobarde. Después estaba lo de su carrera, porque sí, le habían dicho que debía alejarse de JungKook o todo terminaba.

No tuvo elección. No podía echar tanto esfuerzo a la basura, amaba su carrera y no la quería perder por nada.

Oh TaeHyung, si tan sólo recordara que nunca hubiera podido lograrlo solo.

—Era sólo un amigo, discutí con él por tonterías, es todo.— contestó después de largos segundos en silencio.

—¿Seguro? Él enserio parecía que-

—Ya no hablemos de esto, ¿sí? Te invité para que la pasáramos bien...— la chica sólo asintió y dejó de insistir.

—Lo siento, Tae, pero te quiero muchísimo y me preocupas—sostuvo su mano.

TaeHyung no pudo evitar sonreír.

—Yo igual te quiero, y no te preocupes, eso no es importante—tomó la mano de la castaña y besó su dorso.

Ambos sonriéndose el uno al otro.

Y aunque el rubio se sentía mal, quería eliminar esa sensación para estar feliz con su novia, no importaba nada más para él.

—Bueno, te seguía contando cuando fui con Seulgi de compras pasó algo muy gracioso.— soltó una risita y el rubio volvió a prestarle atención.

Aunque en su mente siguiera la imagen de JungKook llorando por su culpa. Aunque una parte de él decía que hacía mal, aunque en su interior sabía que el menor estaba destrozado justo ahora.

Decidió ignorar todo eso.





Perdón si es muy corto, pero a lo mejor hago otro en su perspectiva, la siguiente es de Jk.  Agarren a palos a TaeHyung, les doy permiso ahre no xd

Without Me 『VKook』Donde viven las historias. Descúbrelo ahora