Lily (En Edición)

VII

Conduje hacia la dirección que el profesor me había dado, estaba en un punto en que en verdad no me importaba lo que sucediera, en cuanto encontrará a Lily.

Caminé hacia un pintoresca y hermosa casa color lila, la casa de la psicóloga Lauren​, de la  universidad de Lily, toqué la puerta y está abrió muy tranquila.

-Hola Noah.- dijo calmadamente demasiado para mi gusto, era como si estuviera dopada, simplemente lo ignore.

-Como supo que era yo.

-El profesor Germán.- dijo asistiendo lentamente y haciendo una seña para que pasará a su hermosa y ordenada casa.- Siéntate por favor.- dijo indicándome un pequeño sillón con su mano, me senté y ella lo hizo también, quedando de frente en un sillón de tres plazas.- Se lo que necesitas, y voy ayudarte, pero tienes que hacer algo.

-Lo que sea, nescesito encontrarla.

-Es solo que ... No le puedes decir a nadie okay, es muy peligroso, por eso tienen que encontrarla rápido.- dijo ella aún con una calma que me sorprendía.- Tienes que saber que la vigilaban, desde hace mucho, yo... Nunca lo supe de ser hací la hubiera advertido, el día que desaparecío Peter había pasado por mi oficina temprano, el profesor Germán me contó de la cartas, Noah, Peter está enfermo, él está obsesionado.- dijo tomando aire, ella empezaba a sollozar sentía culpa, y yo ya lloraba, quería interrumpirla, pregúntarle porque no llamo a la pólicia, pero nescesitaba que me contará todo.- Noah lo siento muchísimo, yo intenté detenerlo, pero no pude, cuándo intenté buscar a Lily, ya se había ido.

-Per... Pero que le dijó, qu... que le, le contó Peter?- ya era un mar, no podía parar el llanto. Y no era tristeza era rabia, porque ella lo pudo evitar.

-Lo siento mucho Noah,- dijo asistiendo.- el mm... Me dijo que estaba obsesionado con ella, el tiene muchos problemas en su hogar, su... Su condición, el es especial, no piensa igual que todos, me dijo que la nescesitaba, me confesó lo de las cartas hacías Germán, yo le dije que estaba mal, me dijo que "el" lo habia hecho enviar las cartas, que "el" lo obligaba, que le decía que la tenía que tener.

-Quien es el?.- dije con la cara empapada de lágrimas.

-No, no lo sé, el decía que no podía hacerlo, que no podía decir su nombre, solo dijo que Lily conocía a "el" como así lo llamaba, nadie sabe esto Noah, el solo me lo confío a mi, lo siento mucho Noah, yo lo intenté.

- Porqué no le dijó a la policía, la hubiera,- mire al suelo y luego a ella de nuevo.- La hubieras salvado.

-Yo lo intenté, pero Noah si le dices a la policía le hará dañó, si se enteran de todo ésto la podría matar, no pude hablarlo porque sería peor, el me dijó que "el" le había dijo que era solo, "pedir un dinero y devolverla", pero no fue así, él tiene una casa a las afueras, ve allí. No le digas a nadie, salvala tu.-dijo dandome un papel.- El me dio esto, el confío en mi pero sé que no está bien.

Me fui de hay, destilando rabia y tristeza, mi hermana estaba en manos de un maniático, y de alguien más, alguien que quería hacerle dañó, no solo a ella a nuestra Familia. Caminé hacia el cuarto de Nick con el estómago revuelto, y mi mundo enteró en mis pies, cuando entro en la habitación, mis piernas flaquearon y caí de rodillas, y un fuerte sollozo rasgo mi garganta, llore sin mediar palabra, sin medir cuanto, lloré lo que se llora un año entero, sin fuerza, solté lo que sentía, solté todo atraves de cada lágrima, el llorar fue como un antídoto para mis huesos y mi corazón.

Luego de un rato de estár así pude hablar solo con Nick, aunque todos intentaron ayudarme, solo accedí a hablar con el. Nadie se alarmó solo le adjuntaron la culpa a la perdida de mi hermana, como ahora todo lo que pasa en esta Familia.

-Hable con la psicóloga de la universidad, Nick se como hallarla, se como encontrarla, tenemos que ir a las afueras de la ciudad.

Se levanto de un tiro y me hizo una seña para que caminara.

Nos montamos en su auto, y conducimos hacía al norte, hacia las afueras de la cuidad, allí en el carro le narré lo sucedido esa mañana, algunas lágrimas salieron de el, pero como siempre las contuvo, el siempre era fuerte.

Cuando llegamos a la dirección que Lauren nos dio, una lujosa casa relucía frente nuestro, con frentes verdes, frondosos arbustos, y ninguna protección que nos impidiera entrar. En esas residencias mis padres tenían una casa, en la cual vacacionabamos, por eso se nos hizo fácil entrar.

Pasamos la casa de largo y aparcamos delante, si había gente en la casa, no nos podrían ver, nos acercamos con cuidado, y en mucho silencio, las luces estában apagadas, así que nos acercamos, y miramos por la ventana para ver mejor.

Y lo único que pudimos ver nos descepciono como nos entristeció.