Para el más apto

Capítulo 4: No dejaré que nadie te aparte de mi (Maxim)

Viernes 14 de Julio de 2021,  6:19 A.M.

Madrid, España

Pov Maxim

Desperté como de golpe mientras gritaba esta era la 8va vez esta noche que la pesadilla se repetía, diría que es mi habilidad especial o mi maldición pero no tengo sueño incluso si dormí como mucho 3 horas a lo mucho, es una rutina con la que llevo desde que tengo memoria, no recuerdo la última vez que dormí más de 4 horas seguidas, tal vez cuando recién acababa de nacer, no, ni siquiera en ese momento creo ese hombre me dejaría descansar, su hijo tendría que ser la maquina perfecta para heredar su imperio nunca me permitiría perder el tiempo, padre jamás me hubiera dejado usar mi tiempo en algo que no sea el estudio y el entrenamiento.

*Flash Back*

/Hace 7 años/ Maxim con 12 años

Un golpe seco me derribó fuertemente al suelo lágrimas salían de mis ojos mientras miraba a la imponente figura frente a mi, uno de los hombres más poderosos e influyentes de todo el mundo y por desgracia la mayor pesadilla en mi vida, el era... mi padre Alexandrew Kalashnikov el líder de la mafia mas poderosa del mundo, la mafia Lýkos.

-¿Qué haces afuera jugando con los niños? te dije que no debes desperdiciar tu potencial con basura-  me levanté rápidamente del suelo y sequé mis lágrimas, si me veía llorar iba a ser peor me agaché frente a él -Padre por favor déjame jugar con los niños ya hice mis deberes de todo el mes y Raymond me dijo que podía jugar 20 minutos con los niños-. Plafffff una bofetada seca me volvió a derribar, seguido de una patada, luego dos, tres...

-¿Y eso quién lo decidió? ¿cuándo fuí informado de esto? dime pequeño imbécil ya te dije que debes ser un buen sucesor y para eso papá debe educarte además de que acabo de recibir tus resultados a los exámenes finales en las universidades de H*rvard Standf*ord y las demás... y tu índice en todas fue el máximo menos en Standf*rd donde sacaste 8 punto menos de la calificación perfecta ¿sabes lo que conlleva eso? ¿verdad? eso fue tu culpa por no ser perfecto ¿cómo piensas administrar mi imperio si puedes cagarla en cualquier momento? dime responde- una patada tras otra era recibida por mi pequeño cuerpo esto era normal, las palizas por su parte eran cada vez más brutales sé que si me quedo inmóvil todo terminará en unos minutos, pero si no le respondo solo podría ir a peor.

-Lo siento padre, por favor para, prometo ser perfecto prometo que la próxima vez, me esforzaré más, prometo no volver a fallarte, prometo no volver a decepcionarte más- Sniff snifff  le rogué que se detuviera pero la sonrisa macabra que me mostró acto seguido en su cara solo me respondió que esto solo había comenzado.

-Claro que no volverás a hacerlo, pero como lo harías si no te doy una lección; Albert ve y tráeme a esos niños y a sus familias, luego búscame al bastardo de Raymond, el cual se digno a ser una mala influencia para mi hijo- su sonrisa lo hacia ver como un monstruo con el que ya tenía pesadillas, lo conozco bien y sé que acabo de poner e peligro a todos.  

-¡Padreeeee por favor no! , por favor castígame a mí, a ellos déjalos ir, por favor haré lo que sea pero detente- esta vez recibí un puñetazo y todo se volvió negro, sentí un mareo y caí al suelo perdiendo la conciencia.

Al despertar estaba sentado en una silla, levante la vista y vi que habían varias personas atadas a sillas entre ellos vi a los niños que estaban jugando conmigo, en sus cabezas tenían bolsas negras que impedían su visión, al lado de cada uno se encontraba un hombre vestido con un traje negro, los cuales sostenían rifles en sus manos, en el centro de la sala mi padre me miraba desde su sillón hecho de piel de oso, con esos ojos celestes que tanto odio, con una expresión que quería demostrarme la culpa que tienen mis decisiones, al lado se encontraba Raymond amarrado a otra silla amordazado y por lo que mostraba su cara brutalmente golpeada, llena de moretones y su boca en la cual faltaban casi todos los dientes, no lo había pasado bien.