Capitulo 4 Soy Obligada

2 0 0
                                    


He pasado tres semana aquí y ya no sé qué hacer, me siento desesperada, no sé nada de mi casa, de mi familia, Ilay me dijo que con suerte luego me dejaría hablar con ellos, pero no me dijo cuándo, tampoco he ido a la escuela y mi teléfono no sé dónde quedo, a lo largo de estos días Ilay me ha pegado demasiado solo porque no hago lo que me dice, no puedo hacer nada, ni salir al primer piso porque también me pega por eso, cuando me pega luego se disculpa conmigo y me dice que esa no es su intención, pero que no quiere que intente escaparme, la primer vez que me pego estando en el primer piso fue a la vista de todos los guardias, Eleonor intento defenderme pero Ilay no se lo permitió, me pego porque intente irme, intente salirme por la puerta principal, todavía yo de tonta, a quien se le ocurre intentar salir por ahí viendo que hay un montón de guardias.

Ya llego la noche así que decido meterme a bañar, Ilay se ha encargado de comprarme ropa, cuando salgo escucho que Ilay anda de buenas, ¿y eso?

Ilay ingresa al cuarto y me sonríe, que rayos le pasa, así que lo ignoro y escucho que dice –amargadita la niña- lo ignoro nuevamente y siento que me abraza por la espalda, intento alejarlo, pero no lo consigo, lo único que consigo es que me voltee hacia sí y me apriete más a su cuerpo, posa su cabeza en mi cuello y siento que me da besos ahí. –siento asco- intento alejarlo nuevamente y siento como jala mi cabello y me da una cachetada. Comienzo a llorar, pero ya sé que con eso no consigo nada.

Ilay me avienta a la cama y miro como se quita la camisa. -espero no pase lo que estoy pensando-. A mis 21 años aún no he tenido relaciones porque siempre fui criada con la idea de que solo se es virgen una vez y una vez que ya no lo eras para todos los demás solo ibas a ser como un juguete, y créanme yo no quería ser tratada así.

Ilay se posa arriba de mí y besa mi boca con una necesidad tremenda, es un beso con necesidad, pero yo lo único que siento es repulsión hacia él, el al ver que no obtiene mi cooperación me da una cachetada que me hace llorar más, intenta quitarme mi blusa, pero yo no lo dejo así que termina por desgarrarla y dejarme en puro sostén, me reparte besos por sobre el borde de este y lloro con más intensidad, quiero que se detenga, pero no lo logro.

Ilay sigue con su tarea de hacerme sufrir y siento ya su erección demasiado grande por entre en medio de mis piernas, -no por favor- pero no digo nada, Ilay me pide que colabore pero yo no quiero, así que el opta por seguir haciendo todo, me quita el short y ahora solo estoy en bragas también, Ilay observa lentamente todo mi cuerpo y siento vergüenza, nunca me ha gustado que me miren así, pero parece que a Ilay no le interesa eso ya que aún sigue haciéndolo, ya cuando termina de mirarme prosigue a desabrochar mi sostén y yo aún sigo intentando defenderme, obtengo otro golpe de su parte y ya no intento nada, ya no puedo, siento dolor ya que siento que Ilay empieza a succionar uno de mis pezones, dios se siente maravilloso, pero no puede ser así porque él me está obligando. Mientras Ilay se encuentra mordiendo mis pezones con su otra mano siento como empieza a hacer círculos en mi zona intima, Ilay siento que está sonriendo, se detiene y yo volteo a ver el porqué. –tranquila pequeña ya regreso-. Cuando lo veo venir siento como se sube nuevamente a la cama y veo como abre un condón y se lo pone, sinceramente no quiero esto, no con él, no porque no es con mi consentimiento, cuando noto que empieza a distraerse para acomodarse intento correr, intento estirar una cobija para salir corriendo, cuando llego a la puerta Ilay me toma por el cabello y me azota contra la pared.

–A donde pensabas ir pequeña estúpida ̶

̶ Ilay no quiero esto, déjame ̶

̶ No me importa lo que quieras ̶ me vuelve a pegar y siento sangre en mi boca, Ilay me lleva de vuelta a la cama y se pone entre mis piernas toca de nuevo mi zona íntima y veo que él también se toca, después agarra su miembro y lo restriega en mi entrada, veo que no le importa que yo este sangrando de mi boca ya que yo creo que ni lo ha notado. Sin más entra de una sola envestida en mí.

- Mierda-

Creo que ya se dio cuenta.

Nome queda más que decir, ya no puedo hacer nada. Ilay se apresura a terminar,cuando lo hace veo que se para y no me voltea a ver, maldito estúpido.

IlayDonde viven las historias. Descúbrelo ahora