Frente a las camaras

Capítulo 1. Accidente

Aome: ¡Sangooooooo! Llegaremos tarde, levántate ya ¿No sonó la alarma?

Sango: *somnolienta* ¿Pero que pasa…? ¡No puede ser! Nos quedamos dormidas.

Las dos amigas corrieron a prepararse para asistir a la escuela, pero se les había hecho muy tarde ya que la noche anterior se habían desvelado estudiando para un examen.

Vivian en el mismo apartamento, ya que los padres de Aome habían fallecido en un accidente de tránsito cuando ella tenía apenas 10 años y los padres de Sango se habían encargado de ella desde entonces porque ambas familias se querían mucho, al cumplir su mayoría de edad decidieron que tenían que separarse de ellos para que maduraran y fueran más independientes, a pesar de ser una familia con mucho dinero. Por esa razón decidieron compartir departamento, tenían un trabajo de medio tiempo por las tardes en una cafetería y por la mañana asistían a clases, por la noche estudiaban, tenían una vida muy ocupada; pero hacían todo eso juntas y de alguna manera hasta lo disfrutaban felices ya que eran inseparables, casi hermanas.

Luego de unos minutos ambas subieron al coche y Sango condujo a toda velocidad.

Aome: ¡Ten más cuidado! No vayas como loca, podríamos tener un accidente…

Sango: ¡Tú olvidaste activar el despertador antes de quedarnos dormidas! Tenemos que llegar en menos de diez minutos o no podremos presentar el examen, ya sabes cómo es Totosai, si no estamos puntuales no nos dejará entrar al aula…

Aome: ¡Lo sé! Pero importa mucho más que lleguemos con vida… ¡CUIDADOOO!

Un carro negro venía a toda velocidad en una cruz calle, la luz en verde marcaba claramente que Sango tenía el derecho de atravesarla, pero en menos de un segundo, el carro negro atravesó al mismo tiempo, provocando que ambos carros chocaran entre sí. El carro de Sango quedo hecho pedazos de la parte delantera y el otro carro del costado izquierdo. El golpe no fue muy fuerte, las bolsas de aire acolchonaron muy bien el impacto, así que las chicas no sufrieron mayor daño. Un hombre vestido con un traje formal azul, con una coleta en la parte baja de su cabeza y muy guapo, bajó del otro carro por una de las puertas de del costado derecho.

¿?: ¡Pero que despistada e imprudente eres! ¿Por qué no tienes más cuidado?

Sango: ¡¿Cómo se atreve a hablarme así?! En todo caso yo tenía el derecho, el inmprudente fue su conductor.

Aome: Por favor no se pongan a discutir, fue un accidente y lo importante es que todos estamos bien, excepto por los daños materiales… Además estoy de acuerdo con mi amiga, ustedes tuvieron la culpa.

¿?: ¡Pues no estoy de acuerdo! Tendrán que pagar todos los daños de nuestro vehículo.

Aome y el otro sujeto empezaron a discutir, mientras Sango empezaba a llamar a la aseguradora de sus padres, puesto que el carro estaba a nombre de ellos, se lo habían prestado hasta que ella pudiera comprar uno propio. La castaña llamó y le informaron que en veinte minutos estarían allí.

Aome: Ya le dije señor Miroku que ustedes tuvieron la culpa, ustedes nos pagarán los daños como se debe…

Miroku: Usted no sabe con quién está hablando… les aseguro que ustedes serán las responsables.

Sango: La aseguradora estará aquí muy pronto, y el policía que afortunadamente estaba en la esquina vio todo el accidente… él sabe que ustedes tuvieron la culpa, no nosotras.

Miroku: No me había percatado de lo preciosa que es usted… su belleza me deslumbra.

Sango: Lo dice solo porque ahora tenemos un testigo de que fue su culpa.

Miroku: Por supuesto que no, en verdad usted es muy bonita, si me lo permite, puedo compensarla teniendo una cita conmigo…

Sango: ¡Ni loca! Aome, ya llamé a la escuela y Totosai nos hará una reposición del examen mañana, fue milagrosamente comprensivo, en veinte minutos vendrá la aseguradora, aclararemos este lío y volveremos a casa…

¿?: Es demasiado tiempo, tengo que llegar a la filmación del video ahora.

Un joven de cabellos plateados muy largos hasta la cintura bajó del auto, con un semblante serio y a la vez muy disgustado, pronto se acercó a ellos.

Sango: Pero si usted es…

¿?: Inuyasha Taisho, lo sé, y ustedes imagino que son mis fans y por eso chocaron mi auto, para poder verme de cerca *Burlón*… deben estar muy trastornadas para intentar llamar mi atención con este pretexto, ¿Acaso me quieren matar? Esto lo pagarán caro.

Sango: Pero nosotras… esto fue un accidente… no teníamos intención de lastimarlo… ni si quiera sabíamos que usted viajaba en ese auto…

Aome: ¿Cómo así, por qué le das tantas explicaciones? ¿Lo conoces?

Sango: Él es Inuyasha Taisho, el famoso cantante…

Aome: Jamás lo había escuchado en mi vida, no me importa que seas famoso… el carro se lo pagarás a mi amiga tú, ya que dices que este auto es tuyo y el accidente fue ocasionado por tu chofer.

Inuyasha: ¿Pero qué?...

Él no sabía que pasaba, esta era la primera vez que una chica no lo reconocía, la mayoría de chicas solo con verlo salían corriendo tras él, sabían su nombre, incluso eran tan obsesionadas que sabían hasta el tipo y marca de shampoo usaba, no tenía idea de cómo ellas lograban conseguir esa información.

Inuyasha: jajajajaja no finjas, sé que estas igual de loca por mí que todas las demás, no tienes que fingir nada enfrente de tu amiga, ya que por lo que parece, ella también es fanática mía…

Aome: ¿Qué te pasa…?

Inuyasha: ¿Quieres un autógrafo? Linda, puedo firmar tu camisa, sé que te pondrás muy feliz de eso.

Miroku: No seas irrespetuoso Inuyasha… disculpen a mi amigo… se le han subido los humos por la fama…

Aome: ¡Qué estupidez! Págale los repuestos del carro a mi amiga, fue tu culpa.

Inuyasha: ¿Qué acaso eres ermitaña y no escuchas música? Linda, ¿En serio no sabes quién soy yo? ¿No te gusta mi música?

Aome: Nunca había escuchado hablar de ti… y si escucho música, a lo mejor no he escuchado la tuya por que debe ser horrible.

Aome ya estaba muy molesta, se había pasado la noche estudiando mucho para presentar su examen, y aparecieron estos tontos a arruinarle el día, Inuyasha se veía muy arrogante y no le agradó a ella su actitud, era muy egocéntrico y superficial, quiso ponerlo en su lugar y salir de esa situación lo más pronto posible, ya que no irían a la escuela a causa del accidente, quería volver a casa y continuar estudiando, las reposiciones suelen ser más difíciles. Inuyasha por su parte estaba confundido, esta chiquilla era la primera que no lo adulaba… lo trató como a una persona común y corriente. Y esto de alguna manera lo frustró y le resulto interesante, creía que todo el mundo lo conocía y estaba orgulloso de eso, pero ella no. No descansaría hasta que ella también se fijara en él, igual que todas las demás.

Inuyasha dio media vuelta y caminó a su auto, volvió un par de minutos después con una caja y dentro había un disco. Miroku lo miró asustado y trató de detenerlo.