capitulo 12

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Jenna.

Lunes de nuevo, que asco, y lo que mas me mata de los lunes es que hoy me toca deportes, tuvieron que cambiar mi horario porque a una de las maestras se le ocurrió embarazarse. Ahora yo tengo deportes los lunes, lo bueno es que no es entrando, si no, hoy vendría de muy, muy mal humor.

Paso las clases con normalidad y llega el receso, bueno, acabando este periodo de descanzo ya tengo la clase de deportes y de ahí,  a casita, así que mis amigos que encontré hoy y yo nos fuimos a el gimnasio en donde se da la clase y ahí platicamos, aunque tenía mi ropa para deportes en mi casillero me vine con ropa comoda, una pantalonera adidas roja, combinando con mi cabello y una blusa de tirantes blanca, junto a unos tenis deportivos blancos, me puse mis preciadas arracadas y así es como estaba vestida.

Platicamos, jugamos y bromeamos para matar el tiempo hasta que sonó el timbre, entonces mis amigos se fueron a sus respectivas clases y yo me fui a cambiar para la mía. Llegué a los vestidores y afortunadamente todavía no había tantas chicas, así que me dispuse a cambiarme, el lugar consistía en dos habitaciones separadas por un muro con puerta, en uno estaban las regaderas y los baños y en el otro los casilleros con nuestras pertenencias, había dos para chicas y dos para chicos en las esquinas de el gimnasio.

Salí ya vestida y me fui a clases, al mismo tiempo que nosotros, estaba prcticando el equipo de fútbol americano, y además de nosotros, aquí venían algunos que no tenían clase. Primero calentamos y luego comenzamos a dar cuatro vueltas al gimnasio, la actividad física no se me daba mal,  pero no era mi fuerte, sin embargo, siempre me esfuerzo en esta clase para sacar una buena calificación.

El ejercico de hoy consistía en hacer actividades de resistencia física, lo hacíamos por número de lista y al acabar una actividad ibamos a otra.

El profesor nos dio tiempo para descanzar un poco antes de seguir con las actividades y yo aproveché para ir por mi inhalador, no soy tan asmática,  pero de vez en cuando, si paso situaciones exhaustivas como estas si lo requiero, así que siempre llevo uno para clase de deportes.

Al acercarme a donde lo dejé, cerca de las gradas, alguien desde arriba me habló.

-tienes asma?- dijo, voltee a verlo, era John.

-no es tan grave, solo me da si hago..- me interrumpi para inhalar de el pequeño aparato- actividades muy exhaustivas. No tuviste clase?

-no

-oh, bueno, ya casi acaba la clase,  me puedes esperar a la salida?

-señorita Roberts- me habló el profesor

-ya voy- dije antes de recibir la respuesta de John

-sí, no hay problema

-gracias

-señorita Roberts, vuelva a la clase- dijo el profesor a mis espaldas

-Sí,  lo siento- dije mientras caminaba de vuelta

-tendrá de dar cuatro vueltas más al acabar la clase. - dijo como respuesta, maldición.

Al acabar la clase todos se fueron a bañarse y cambiarse, yo todavía tarde más por todas las vueltas al gimnasio que tuve que dar, para cuando acabé la ultima el profesor me dejó irme ya por fin a las duchas, ya no quedaba casi nadie en los vestidores y para cuando acabara de bañarme, ya no quedaría nadie me supuse,  lo bueno de bañarme hasta el final fue que tuve suficiente agua para mí solita y caliente además, tomé una ducha rápida, no quería hacer esperar mucho a John.

Tomé mi toalla al terminar de bañarme y después de secarme un poco el cabello me la enrede en el busto y me fui a cambiarme de ropa de nuevo, tomé mi cepillo para el cabello y me cepille primero, luego, me puse mis bragas de algodón con la toalla todavía puesta cuando escuché como si la puerta se abriera, pero qué?..

¿me lo prometes?Donde viven las historias. Descúbrelo ahora