Atrapados por el amor

El trato

–J ya es hora -un señor de aproximadamente 56 años abre la puerta.

Supuse que ése señor era la persona que le conseguía las peleas ilegales a J, prácticamente su mánager. El señor se acerca a nosotros con pasos rápidos, me quedo observandolo asombrada. Es un señor bastante alto y a pesar de la edad que aparenta su cuerpo se ve trabajado, seguramente él también fue un luchador.

-Esta pelea sólo es de 2,000 dólares y tu contrincante es un luchador fácil de derribar, no durará más de un round si ésa muchachita que trajiste no te debilita
–Le habla el señor a J con tono serio

-¿Quién? -pregunta J con tono divertido -Jaja, yo no traje a la enana a este lugar

-Como sea, ya sal y no importa si es tu noviecita, termina con él sin piedad

Austin entra al pequeño cuarto y le quita el vendaje a J para colocarle uno nuevo, J se levanta, da dos brincos, mueve los brazos y choca sus puños varias veces. El pelirrojo le da una palmada en la espalda a su amigo

-Vamos hermano, demuestra por que te dicen La Bestia de el ring

-Buena suerte J -digo con un poco de timidez en mi voz, J me mira y se forma una pequeña sonrisa en su rostro.

No podía ver casi nada pero J dió la orden para que me dejaran pasar a donde su mánager y Austin estaban. A pesar de que éstas peleas son ilegales el lugar tiene un pésimo cuidado. El ring rechina cuando un hombre sube con un microfono en sus manos, segundos después su voz se puede escuchar a través de las bocinas que hay en el lugar.

-Damas y caballeros, bienvenidos a una noche, a mi derecha tenemos a EL DEMOLEDOR - Un hombre bastante alto y muy fuerte sube al ring golpeando su pecho con sus manos, hace una seña con sus dedos para que traigan a su contrincante -Y a mi izquierda tenemos a LA BESTIA - las personas enloquecen, empiezan a pararse de sus lugares y a gritar cosas que no logro entender -No creo que quieran meterse con éste fenómeno

El mánager de J digo que sería una pelea fácil pero su contrincante se ve mucho mas pesado y peligroso.

–Austin, El Demoledor tiene el doble del tamaño de J, lo van aniquilar

–Suenas un poco preocupada Olivia -el pelirrojo me mira con una sonrisa divertida

–Claro que no, solo pienso que no es justo

–El Demoledor es mas grande y mas fuerte pero si J utiliza su derecha aturdidora lo derribara sin problemas

–Estás loco

–Callate pequeña que la pelea va a comenzar –dice el mánager de J con la vista fija en el ring

Suena la campana

J comienza a dar pequeños saltos y a jugar dando vueltas al ring, su rival corre detras de el pero J es mas ágil y se escapa de él, su rival se veía molesto por que de cierta forma J se estaba burlando de él. La pelea comenzó a verse más peligrosa y yo cada vez me asustaba más pero al parecer J tenía todo controlado, El Demoledor recibió unos cuantos golpes en la cara y le devolvió uno de esos golpes a su rival.

–USA TU DERECHA ATURDIDORA –grita el pelirrojo a mi lado

–ACABA CON EL –ahora es el mánager que está gritando

Comenzaron a pelear brutalmente, J era rápido asi que evadia algunos golpes fácilmente pero su contrincante ya parecía cansado, tenia bastantes moretones y no había pasado medio round.

-Se nota que han entrenado bien a J, lo tiene todo controlado.

-No lo han entrenado -responde el pelirrojo sin apartar su vista de la pelea

-¿Enserio? -pregunto sorprendida

-Si, tuvo que aprender desde pequeño para cuidar a su hermanita

-¿J tiene una hermana?

-Ya hablé mucho. Cuando estába en primaria me hacían mucho bullying y todos los niños del curso me molestaban, un día J se levantó de su asiento y golpeó a medio salón, desde ese momento hemos sido inseparables.
–Sorprendida miro de reojo la pelea y J le da un súper derechazo a su oponente faltando segundos para que acabe el primer round. El demoledor cae contra el piso, el ring rechina y J pone su pie sobre la espalda de su contrincante subiendo sus manos en forma de victoria. Todas las personas se ponen de pie y gritan.
J baja del ring como si no hubiera pasado nada y una vez más me quedo pérdida observando su abdomen. J pone un dedo en mi frente para que lo mire al rostro

-¿Qué te pareció enana?

-He visto pelear a mejores jirafas - mentira, pero no quiero subir más su ego.

Noto que un señor de bastante edad se acerca a mi con una cerveza en su mano y acaricia mi pelo, J le agarra la mano tan fuerte que hace que se arodille y su bebida caiga al suelo. Estoy asombrada y me siento protegida.
-Ven -me ordena J con tono serio
Volvemos al pequeño cuarto acompañados de Austin y el mánager.   El señor le entrega 2,000 dólares en efectivo a J y le da 500 dólares al pelirrojo.

Minutos después salimos de ese lugar y entramos a una pequeña cafetería en la cual J me atiende un baso con chocolate caliente.

-No te lo pedí

-Pero te lo vas a tomar hormiga

Hace un poco de frío asi que decido tomar el chocolate, nos sentamos en una pequeña mesa y decido hablar nuevamente.
–Tenemos que hablar

–¿Sobre tus preguntas?

–Si

–Éste es el trato, por cada pregunta tendrás que hacer algo que te pida y cuando lo hagas tendrás tus respuestas, solo te permitiré cuatro preguntas asi que piensalas bien

–No acepto ese trato -digo cruzando de brazos

–Entonces olvida todo

–Esta bien pero no te haré ningún favor sexual

Al cabo de un rato terminamos de tomar nuestro chocolate y le pido a Austin que me lleve al hotel.

–Cuidate hermano -el pelirrojo se despide de J con un saludo especial

–Cuidate de ese duende

–Callate derriba aviones

–Callame, si es que puedes enana

J se da la vuelta para irse por una calle súper oscura con una botella de agua en la mano. Austin me indica que me suba al coche, le hago caso y nos vamos al hotel.

Comienzo a preguntarle de la hermana de J pero Austin no abre la boca

–Deberías preguntarle a tu novio

–¿Cual? -pregunto confundida

–J –dice en tono burlón riendose a carcajadas

Le di un apretón de orejas y sus carcajadas fueron reemplazadas por quejidos.

Espero que les guste mucho ❤
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