Die Lüge

13. Casualidad.

(imagen para reír... aunque en dos capítulos me ocupo del Chenmin y sehun☻)

Mis manos Vagan lentas y firmes por sus sudorosos músculos, esos malditos músculos perfectamente trabajados de Jongin, denoto el esfuerzo en ellos con cada una de sus embestidas, recorro todo su cuerpo terso centímetro a centímetro, es suave al tacto pero duro, en nada parecido a sus ataques en mi ano.

El rechinar de la cama marca el paso del vaivén de sus caderas, un movimiento fuerte y contundente, justo lo que necesito, totalmente delicioso.

Nuestras respiraciones están al unísono, pero erráticas el exhala su aire caliente sobre mi rostro sudoroso dándome un frescor necesario a tal ajetreo sexual, luego le sigue mi exhalación pero esta escapa siempre con gemidos graves de tanto placer que esboza mi sexo, adicto y lujurioso ante tales sensaciones que me hace sentir el moreno.

El Maldito es un potente semental, he perdido el sentido del tiempo que lleva incesantemente penetrando mi agujero, me ha rodado por todas las posiciones, he recorrido la maldita habitación de pie, gateando y arrastrándome con él a mis espaldas sobre la costosa alfombra hasta retornar de nuevo la comodidad de la cama,

No me quejo la creatividad del hombre supera con creces mis expectativas

Ahora me tiene de espaldas sobre el colchón, con mis piernas sobre sus hombros, sus manos grandes y delgadas dejando morados en mis caderas, su agarre sobre mi es posesivo y el contraste de su piel canela sobre mi piel lo hace mas atrayente y delirante, las marcas sobre mi parecen tatuajes, estoy lleno de manchas rojas que más tarde serán morados pero de absoluto placer, yo hasta le he rogado ~mas fuerte~ un par de veces, pero es que parece que nada es suficiente

Tenerme así entrelazado, sudoroso, cansado, ajetreado y gimiendo más, no es suficiente ni para mi, ni para el.

Gotas de su sudor resbalan por su sien y van a parar a mi cuerpo, una solitaria gota rodó por su cara y aterrizo en mis labios la lamí y sabía a sal pura con algo más ... algo que hizo estallar mi deseo aún más lejos, gemí alto y fuerte ~AHHH~

El dibujo su típica risa socarrona y empujo mas fuerte

— Gime hermoso, sigue cantando para mi... eres el maldito coro celestial para mi deleite, mis ansias, mis ganas...—

Yo solo logró asentar con la cabeza mientras muerdo mi labio, su puta polla llena perfecto a mi necesitado ano, siento como mi circunferencia lo aprieta incesantemente, desde la base hasta la punta

— Dios no quiero acabar, quiero anidar en ti, y no salirme de ti nunca... si me matan ahora moriría satisfecho —

— Calla esa maldita boca y solo sigue follandome duro! — no podía escucharlo hablarme así, tenia toda la noche escuchando palabrería de hombre excitado nada de esta mierda era real, él no tenía que decirme cursilerias, mi culo no necesitaba eso, solo su bendita polla, dura y constante

Pero no, él cada tanto sacaba sus dulces palabras alborotando mi corazón, el cual cabe destacar esta en la novena nube, del placer y el delirio... yo también moriría feliz, con tan solo su polla adentro,

Por que cada segundo que pasa de sexo con el se volvía mas tortuoso, caliente y efímero, cada momento deseaba mas y mas de el... tanto que no se como lograre separarme cuando el momento llegará...

— MIERDA! — grite de lo más adentro, el maldito volvió a encontrar mi punto dulce, el río satisfecho

— Allí ... otra vez, te correrás para mi... hacerte acabar es mi nueva fascinación, ver tu cuerpo retorcer, para luego temblar y por último ceder entre mis brazos — con mi mano atraje su rostro para callarlo, no más.. basta!