Die Lüge

15. Sin Reglas.

Kyungsoo se despierta por la luz natural que ilumina toda la habitación, la cabeza de Jongin descansa plácida sobre su pecho, él es cálido más el aire acondicionado no le permite sudar, esta cómodo, esta feliz... pero también está hambriento

Pasando una mano por la cabeza del menor con mucha delicadeza la alza para dejar reposar a Jongin sobre la almohada y así el poder levantarse

Jongin apenas está cubierto por una delgada sabana la cual se ajusta a su piel y delinea perfectamente ese cuerpo de Ken, es hermoso... lo que le recuerda a Kyungsoo sus imperfecciones y su desnudez, corre rápido al closet y toma un camisón extra grande de esos deportivos, el sabe que le lucen y se muere por usar algo del moreno

Mientras pasa por su rostro absorbe el aroma, se abraza en la ropa al sentir el confort que lo embriaga, Jongin es confort, es comodidad es casi hogar

Sacude la cabeza para sacudir su estupidez.. es solo sexo, grábalo de una buena vez!

Sube las escaleras decidido a hacer el desayuno, es lo que siempre hace por moshi, cocinar, cuidar... es lo que le gusta hacer

....

Kyungsoo puso en su celular una lista de reproducción de su música favorita de RV

Deja a sus pies guiarse por el ritmo suave y profundo, él lo haya perfecto para cocinar, termina su tortilla de kimchi y la sirve en los dos platos, pone las dos tostadas y cuando va a servir el café, unos fuerte brazos cubren su cintura, un cuerpo cálido se pega a su espalda y la voz mas sexy y ronca le habla sobre sus cabellos

— Buenos días Soo — conocen la miel, dulce y pegajosa, esa es la voz de Jongin

— Buenos días, dormilón — la cara de Jongin se cierna sobre su hombro Kyungsoo gira su cara y deja un tierno beso en sus mejillas, se percata que Jongin aún tiene los ojos cerrados, hinchados y se ve muy tierno

— Hey — gira sus caderas un poco para despertarlo...pero percibe que se acaba de estrujar contra su pene de buenos días

— No hagas eso, por que el pequeño Kai esta muy sensible esta mañana, creo que quiere más — Jongin habla entre pucheros y Kyungsoo la haya endemoniadamente tierno a pesar de las sexys palabras

Kyungsoo deja de hacer lo que está haciendo y se voltea para cubrir su rostro de besos, es adorable

Jongin sonrió con picardía pero su corazón está enternecido, cálido y plácido

...

Comen entre miradas tímidas como dos adolescentes en su primera vez, es que así debió ser en el hotel si él no hubiera huido, ahora no puede ni recordar que estúpida razón le hizo perderse de esto... pero ya no importa

Sus pies se tropiezan incesantemente debajo de la mesa, sus dedos se rozan cada tanto bajo miradas pícaras, Jongin alaba su comida, Kyungsoo siente su corazón explotar

Tanta cursilería debería ser prohibida, pero ahora parece importarle una mierda cuando lo esta disfrutando tanto

— Mi camisa te queda de muerte — ambos ríen con coquetería — me va a dar un infarto y tú serás el culpable — Jongin lo señala con el tenedor mientras le guiña el ojo, Kyungsoo quien ya terminó de comer se levanta, alzando juguetonamente el dobladillo

— Te refieres a esta cosa sin estilo — pone cara de asco pero su sonrisa ladina lo delata — No, yo estoy seguro que ... — pone un dedo sobre su quijada como meditando sus palabras, cuando los dos saben a conciencia que va a decir — me veo mejor sin esto —