Capítulo tres: Arlequín

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La araña reposaba en la basura, vencida mientras el Lagarto rugía; festejando su victoria como el depredador superior

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La araña reposaba en la basura, vencida mientras el Lagarto rugía; festejando su victoria como el depredador superior. Por su parte, Spider-Man cae en visiones, ¿el veneno? Pensó. El veneno lo hacía ver cosas; lo hacía recordar aquella época más fácil, cuando su preocupación era pasar las notas y recibir golpizas. Cuando su familia estaba con él. Recuerda a sus padres. Lo recto, estricto y educado que era su padre. La sonrisa, el cálido rostro, el suave cabello de su madre. Recuerda cuando tuvieron que irse, sin darle explicación, solo se fueron. Se fueron para nunca volver. Hasta entonces, su vida relativamente era fácil; dos tíos que lo amaban, y un futuro glorioso. Al menos hasta que el destino le dio un golpe de realidad; se convirtió en Spider-Man.

 Al menos hasta que el destino le dio un golpe de realidad; se convirtió en Spider-Man

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¿Quieres hacer reír a Dios? Cuéntale tus planes. 

El héroe abre los ojos, sus músculos están tensos, su cuerpo ya estará contra atacando el veneno, pero aún se estaba desangrando. Sentía frío, ansiedad y mareos; hasta incluso, las gotas de lluvia se sentían pesadas. 

—"Vamos Spaidy" —pensaba irguiendo su cuerpo para así quedar boca arriba—. "¿Qué clase de superhéroe se muere apenas un año después de su aparición? ¡Wildcat no cuenta!"

Pero ahí, en frente de él, se encontraba el espectro de Helena. Completamente desnuda, con un agujero en el cráneo, bañada en sangre. 

—No me encontraste —le decía el espectro—. ¿Por qué no me encontraste? 

—"El veneno, tiene que ser el veneno" —pensaba Spider-Man aterrado. 

En eso, la ex vigilante dio un grito espectral antes de desaparecer en la nada; en la oscuridad. 

—Ja, ja, ja...

—No —exclamó Spider-Man—. ¡Tu no!

 ¡Tu no!

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The Amazing Spider-Man: Why So Serious?Donde viven las historias. Descúbrelo ahora