Instagram Zodiacal 2

38 Especial narrado

Fiesta de Lea

Gerald POV

Ara estaba demasiado borracha para recordar algo, balbuceaba palabras sin sentido y yo no sabía que hacer con ella, si alguien no me la quitaba ahora de encima iba a colapsar y tener un ataque de pánico. Esta bien, era mi amiga y le quería, pero no le quería borracha.

Mande un mensaje al grupo pidiendo ayuda, al instante Scarlett respondió:

"La pequeña ara da más trabajo del que pensabas ¿no?😂"

Le respondo:

Cállate y ve por ayuda 🙄

A los minutos diviso a dos sombras que poco a poco se van haciendo más visibles entre tanta gente que invito Lea, eran Tom y Scarlett.

—¿Donde está?— pregunta Tom a penas llega a donde estábamos yo y Ara. Apuntó a donde yacía el cuerpo cansado y derrotado de la pelinegra y el se acerca inmediatamente.

Si Lucke estuviera acá, diría "el amor" y luego haría una arcada, como siempre.

—Soy tu príncipe azul ¿ves tu, damisela en apuros?— pregunta Scarlett sonriendo.

Las luces eran bajas por lo cual no podías divisar bien sus gestos, pero si supe que esa fue una sonrisa.

—¿Viniste a rescatarme?— le preguntó con entusiasmo.

—Así es mi querida doncella, así nunca más tendrás que estar sola— abre sus brazos y al ver eso no se exactamente que cruzo mi mente, pero me tire sobre ella y ambos fuimos como saco de papas al suelo.

Ninguno de los dos en su estado más puro de sobriedad.

Nos comenzamos a reír a carcajada y luego miramos en dirección a donde anteriormente estaba Ara y Tom, se habían ido.

—¿me concedes esta pieza?— pregunta Scarlett mientas me mira.

—Seria mi honor— respondo al borde de la risa.

Tom POV

Mientras los enfermos de mis amigos jugaban a las princesas y a todo eso, yo aproveché para sacar a Ara de ahí, la fiesta oficialmente había acabado para ella. La subí en mi coche, la acomode con delicadeza, ella no ponía retención alguna y yo pensé en lo fácil que hubiese sido que alguien le hiciese daño, había un montón de gente ahí que no conocíamos solo pensarlo me espanto. Hasta que ella balbuceó mi nombre, sabía que era yo y por eso no hacía nada.

Sentí un alivio recorrer mi cuerpo.

—¿Si?— preguntó mientras le pongo el cinturón de seguridad. Ambos habíamos consumido alcohol esa noche, no quería que si nos pillaba la policia me reprendiera también por no llevar cinturones de seguridad puesto.

—¿Dónde me estás llevando?— preguntas apenas audible.

—A mi departamento, no te déjate sola cuando estás en este estado— le digo y ella me mira sorprendida como si lo que acababa de decirle acabase de ser la peor mentira que haya escuchado.

—¿En que estado? Si estoy, fan tas ti ca— me dedica una sonrisa mostrando cada uno de sus dientes. Es tan linda.

Esa sonrisa trae tantos recuerdos, todos pasaron por mi mente como balas.

—Tom...— dice a penas.

—¿Si?— preguntó mientras le miro y le corto el cabello de la cara.