CAPITULO 6:"Y acá íbamos otra vez"

817 28 1
                                    

-Oh, sí, Harry...- gimió una voz femenina subida de tono en la habitación de al

lado.

Y le di otro mordisco a mi chocolate.

Había pasado aproximadamente una hora desde que había perdido a Dusty.

La tal Amanda había llegado, y ahí estaban en la habitación de Harry,

haciendo "la tarea". Bajé al primer piso para distraerme y ver de paso si

encontraba a Dusty. Pero no lo encontré y además de comer no había mucho

tampoco. Terminé subiendo a mi habitación y comiendo una barra de

chocolate que tenía en mi bolso.

Y nuevamente a la actualidad.

Era asqueroso escuchar todo lo que ocurría en la habitación de al lado,

sinceramente. Palabras que no conocía, términos que hubiera preferido no

conocer, gemidos subidos de tono, y lo fuerte que se escuchaba la cama

crujiendo.

Asqueroso.

Y menos me quería imaginar la imagen.

Intenté de distraerme estudiando, pero en realidad nadie se podía concentrar

con tanto grito de la habitación de al lado. Enserio. Los chillidos de Amanda

eran irritantes. Pff, tarea... tarea sus bragas.

Terminé mi chocolate, me levanté de mi cama y fui al baño para botar el

paquete. Desde el baño no se oía nada, gracias a Dios (o a la gran pared,

como lo prefieran). Boté el papel de chocolate al basurero y me quedé en el

baño un rato más, esperando que los gritos cesaran.

Luego de que ya había pasado quince minutos encerrada en ese baño, salí

esperando encontrarme con un silencio total. Pero no, mis oídos se

encontraron con lo contrario: más gritos.

¿¡Qué onda ellos!? ¡Ya llevaban veinte mil horas haciendo "la tarea"! No podía

creer que se demoraran tanto. ¿¡Qué rayos...!?

Pero luego escuché mejor. No eran gritos de "tarea", eran gritos de... ¡DUSTY!

Maldición, Amanda gritaba de miedo, no de placer. Estaba segura de que era

obra del gato, siempre las mascotas eran las que hacían el desastre. Eso o

que Harry había metido la pata en la cita.

Salí de mi habitación rápidamente y corrí a la habitación del simio, aunque el

trayecto hasta su habitación era corto, por lo que no me costó llegar.

Sin pensar, como hacía Harold la mayoría del tiempo, abrí la puerta de la

habitación sin permiso.

Tapé mi boca para reprimir una carcajada.

Imagínense: Amanda estaba ahí, recostada en la cama con la camisa de Harry

sobrepuesta para cubrirla, mientras luchaba con Dusty, intentando alejarlo de

ella y de su hermoso cutis. ¡Era tan gracioso!

Cancelada Temporalmente/Viviendo Con La Nerd(Harry&tu)Adaptada (MyOnlyWay)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora