LA DEUDA PERFECTA

Capítulo 1 [✔]

2 meses antes.
12 de Octubre, 2018.

EVE

-No deberías ir a esa Universidad, Eve.

Y ahí íbamos de nuevo con la misma discusión de los últimos meses, ¿Qué caso tendría, haber venido desde Rusia por una beca estudiantil y no asistir a la Universidad? Sería una pérdida de dinero y tiempo no aprovechar esa oportunidad. Estudiar en la prestigiosa Universidad de Las Vegas, Sinpad.

Pero como costumbre de mi hermosa madre desde que yo era pequeña. Siempre intentó apagar mis sueños y su respuesta siempre fue que ella sabía lo que era mejor para mí o que lo veía como una pérdida de tiempo innecesario. A veces se lo agradecía porque estaba a punto de cometer errores que muchas veces ponían mi vida en peligro, pero en otras ocasiones solo quería que por una vez pensará en lo que me haría feliz. Siempre estaba rodeada de respuestas negativas y desilusiones hacia mis sueños.

Quería ser cantante…

No cantes, desafinas demasiado.

Ser bailarina…

No bailes, no tienes cuerpo para eso.

Ser la mejor de mi clase…

No te esfuerces, sabes que no serás la número uno.

Ser igual a mi padre y hacer justicia…

No imites a tu padre, que no sabes la cantidad de porquería que estás hablando.

Y así era como apagaba uno a uno mis sueños.
Al principio pensaba que ella era una insensible, después que era muy dura conmigo… pero con el paso de los años entendí que era tanto realista como egoísta. Solo quería que tuviera ojos para ella y que cada vez que me pidiera o dijera algo lo hiciera…, pero como ella me negaba mis sueños, yo negaba los suyos. Ya no era la niña que hacía todo lo que sus padres decían, ahora era yo quien tomaba mis decisiones y una de ellas había sido volver a Lidreet.

Lidreet era una pequeña ciudad a unos pocos kilómetros del centro de Las Vegas, que al igual que la gran Ciudad de los Pecados contaba con mucho entretenimiento y lujo, lo que atraía a muchos extranjeros y a nosotros los Rogers.

Una ciudad lo suficientemente grande para no llamar la atención, regido por leyes algo diferentes a la de la gran ciudad y según lo que había visto cuando nos estábamos mudando, muchos establecimientos. Alrededor de dos casinos, cuatro bares, dos cabarets, cinco restaurantes, un hotel pequeño y muchas casas tanto al este como al oeste de la ciudad.

La ciudad era muy visitada por los turistas que querían gozar de grandes comodidades y sus vicios. Una ciudad de ensueño, según los pocos habitantes que había conocido.

-Creo que cometimos un error al mudarnos a aquí-se lamentó mi madre- Y comprar justamente esta casa.

En eso yo estaba de acuerdo con ella. Papá fue el encargado de comprar la casa y por primera vez en su vida se quiso dar un gusto y comprar una casa grande que tuviera todo lo que necesitáramos y quisiéramos. Lo cual fue un error por lo que al comprar una casa con los exquisitos gustos de mamá, nos llevó al barrio de los riquillos de Lidreet y ahora parecía que teníamos un foco de luz sobre nuestras cabezas.