Human? | Sebastian Michaelis |

*Capitulo 12*

|Se acabo el juego|

*Narra Sebastian*

Por suerte el día de hoy no había alguna actividad así que podríamos salir, todo estaba saliendo como se esperaba, mi joven dama y sus amigos estaban hablando tan pacíficamente, como si realmente no supiéramos que pasara algo

-¡AHHH! – un grito llamo la atención de todos

-¿Qué fue eso? – voltee a ver a donde se encontraba mi joven ama y no estaba

-¿Y ___? -¿¡Donde esta ____?! - joder, un solo segundo, solo segundo me distraje y ya no estaba, buscaba algo, una pista, no había nada. Todos nos quedamos callados y buscando para todas partes

-Será mejor que nos movamos así podemos encontrarla más rápido - la señorita Camile tenía razón, no vamos a conseguir nada así

-Es verdad, yo iré con Sebastian. Ustedes regresen hacia al hotel, podría estar ahí - la pareja asintió y se fueron de regreso al hotel - Bien, ya que se fueron, tú puedes hacer algo, si ella te llama puedes saber su ubicación, ¿no es así como funciona esa cosa? - la joven Evelyn señalo mi mano donde se encontraba el contrato

-Si, así es pero es seguro que la durmieron, no quedara de otra más que buscarla y esperar a que despierte - no dijo nada más y empezamos a caminar en busca de algo, o alguien

*Narra ____*

No recuerdo mucho de lo que sucedió, estábamos todos tranquilos cuando algo me agarró fuertemente y después todo se volvió oscuro. Abrí mis ojos y se veía todo oscuro, tenía una especia de venda en los ojos

-Genial - susurre por lo bajo al darme cuenta que estaba vendada y atada de manos y pies. Tenía que hacer algo rápido, ¿Sebastian? ¿Los chicos? De seguro deben de estar preocupados, debo encontrar la forma de escapar de aquí. No se escucha nada sin contar el sonido de gotas de agua cayendo encima de algo metálico.

-¿Así que nuestra pequeña está despierta? - una voz femenina se escuchaba a lo lejos, y unos pasos acercase cada vez más - Veamos, así estarás más cómoda - sentí unas manos frías bajar la venda de mis ojos

Tú, eres una mal... -

-¿Maldita perra? ¿Zorra? Seré lo que quieras querida, pero jamás seré tan estupida como vender mi alma a un demonio con la esperanza de que se enamore de mi - Sonría burlona - ¿O me equivoco? - no dije nada, la seguía mirando con rabia - Creó que no me equivoco -

-Las cosas no son como crees y a lo mejor ahorita pudiste ganar y aprovecharte de un momento de debilidad - ella no apartaba la vista de mi cuello, traté de que mi cabello lo tapara un poco para que no se viera el contrato - ¿Qué es lo que quieres? -

-¿Yo? - seguido de ello se empezó a reír - Yo quiero demasiadas cosas pero antes de eso anhelo verte morir y antes de eso verte sufrir hasta que implores perdón, eso es lo que quiero -

-Y yo que creía que querías tomar el té querida - sonreí burlona después de llamarla "querida"

-No deberías de jugar con fuego o te quemaras - camina hacia una mesa que tenía una manta encima, tomo de la orilla de la manta y la quito haciéndola volar por los aires, se podían ver diferentes instrumentos de tortura, ella tomó unas cadenas y se acercó a mi - Me estoy aburriendo de tanta charla y fanfarria tuya, es hora de pasar a algo divertido - puso las cadenas en mis muslos

-¿¡QUE MIERDA TE PASA!? - grite al instante cuando sentí el ardor en mis muslos

-Tranquila un poco de ácido no hace mal, vamos a divertirnos tú y yo... - sentí un golpe en mi cabeza, acompañado de un zumbido en mis odios y mis párpados se empezaron a cerrar por completo...