K.N.D//EL NUCLEO

3.

¡Tiempo atras!

(...)

—Este será tu hogar de ahora en adelante— sin expresión número 1 apenas y lo miró cuando lo escoltaba para que bajara de la nave.

—¿Que es esto?— Habló aguantando un nudo en la garganta. —¿Piensas dejarme aqui?— Chad escondió la mirada detras las manos que cubrian su rostro. Nigel liberó al rubio de las esposas y lo dejó prácticamente hablando solo mientras el comenzó a caminar hacía la nave. —¿Que pasa Nigel, no vas a terminar conmigo?
¿te estas apiadado de mi? ¡Dimelo! No me digas que sientes remordimiento por lo que le acabas de hacerle a tu planeta...¡ooohh, No, espera seguramente quieres una muestra de especie extinta ¿no es asi?...

Sin remordimiento, sin sentimientos
—No estoy de humor. No ha sido mi decisión dejarte aqui, asi que deja de lloriquear— advirtió con frialdad.

—Y tu deja de actuar como monstruo, No olvides que eres un ser humano. Pensé que tu futuro era brillante esperaba mas de ti, pero resultaste un pelele. Destruiste todo, mataste todo lo que alguna vez conocimos— sollozó aguantando las lagrimas. —Y te quedas sin hacer nada cuando sabes lo que haran con la base lunar. Estaras lejos y no verás cuerpos pero la sangre derramada por tus camaradas permanecerá sobre tus manos...

—Por que no comprendes que se hizo lo que se debia hacer...

—¿Bromeas? Se hizo lo que ellos querian, dejaste que El G.K.N.D ganara, sin darnos la oportunidad de luchar — Sin expresión Nigel retomó su camino, dejando al pobre Chad en un planeta clase O bastante parecido a la tierra. "Conocido entre los agentes galácticos como planeta Desecho"
—¡SU SANGRE SIEMPRE MANCHARA TUS MANOS, MALDITO TRAIDOR!...

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—Recuerdo esos años cuando éramos pequeños y solías compartir tus misiones conmigo, nunca fuiste egoísta y te encantaba incluirme en tu grupo de amigos. Tengo los mejores recuerdos de nuestra infancia y vivir a tu lado ha sido una experiencia única. Siempre fuiste mi compañero de juegos y también me ayudaste cuando hacía alguna estupidez para que no me castigaran.
¡Por todo eso, muchas gracias número 100 lider supremo señor!— todos los chicos presentes celebraron alzando los brazos, tras escuchar las conmovedoras palabras de 274.

—¡Muchas gracias a todos!— el chico se dedicó a sonreír en la ultima fiesta en la base lunar antes de ser un adolescente. Estaba muy triste pero no se lo haría saber a sus compañeros. —¡CHICOS DEL BARRIO! Les prometo que daré lo mejor de mi siempre...

—¡Número 100!— empapada en llamanto el agente número 11 corrio a abrazar a su superior.

—Todo esta bien, voy a estar bien— acuno la pequeña cara de la chica entre sus manos. —Cuida bien de Abbi ¿Ok?.

—Si— dijo la niña todavía con lagrimas en los ojos. —Te veré pronto ¿no es verdad?...

Pero el chico no contestó, solo sonrió.

Esa misma noche el legendario agente sacaría las ultimas cosas de su oficina y eso le dolía mucho, sin embargo no lo quería hacer notar. —¡Cielos, es increible como puedes meter tantos años de vida en una cajita tan pequeña! ¿No lo cres 274?— sonrió mientras guardaba sus objetos mas preciados, entre ellos unas fotografías con sus mas queridos amigos.

—Número 100 señor yo...—Chad lo miró con tristeza.

—Esta bien 274, puedes solo llamame Steve ese es mi nombre y dentro de unas horas no volveré a ser número 100, tampoco sere el lider supremo, asi que creo que las formalidades salen sobrando— Con amabilidad colocó la mano derecha sobre el hombro del rubio. —Ahora tu serás el lider supremo, nadie mejor que tu para guiar y cuidar al K.N.D confió en tu juicio asi enorgulleceme— agregó con una sonrisa animada.